MURCIA.- La evolución de la ciudad, desde la creación del Concejo de Murcia por Alfonso
X, el 14 de mayo de 1266, hasta 2016, a través de los documentos
originales que se conservan en el Archivo Municipal, es el contenido de
la exposición que hasta el 30 de junio próximo alberga el Palacio
Almudí.
Comisariada por la profesora Isabel García Díaz y la
archivera municipal, Mª Ángeles Jover Carrión, la muestra “Concejo de
Murcia 1266-2016” es una visita obligada para obtener una amplia visión
de los cambios experimentados por la ciudad a lo largo de los últimos
750 años.
La muestra que hoy ha inaugurado el alcalde, José
Ballesta, acompañado por el concejal de Empleo, Turismo y Cultura, Jesús
Pacheco, reúne el testimonio escrito de gran parte de la historia del
Concejo de Murcia desde el Privilegio Rodado de Alfonso X, pieza
fundamental y que da sentido a esta celebración, así como el resto de
textos históricos del Rey Sabio.
“Un recorrido histórico de la
actividad del Ayuntamiento de Murcia desde su fundación que finaliza con
el acta de constitución de la actual Corporación Municipal”, ha
subrayado Ballesta, por lo que “esta exposición representa una ocasión
única para conocer mejor nuestra historia, recordar qué camino hemos
recorrido para llegar hasta donde nos encontramos ahora y poder esbozar
lo que nos puede deparar el futuro”.
Así, la exposición permitirá
contemplar la evolución desde la Murcia medieval, una ciudad de diseño
musulmán –con calles estrechas y quebradas- adaptado a las costumbres
cristianas –cuando algunas calles se ensancharon y las mezquitas se
convirtieron en iglesias-, con Santa María como principal centro
religioso y la Plaza de Santa Catalina como centro administrativo y
político.
Una de las obras de mayor interés de cuantas se pueden
observar en la muestra es el Libro del Repartimiento –con información
sobre los primeros cristianos que se asentaron en la ciudad-, así como
una amplia colección de cartas originales y copiadas en Cartularios,
junto con las series de Actas Capitulares y Libros de Mayordomo, que son
las más antiguas conservadas en la Corona de Castilla.
Una
copia del Códice del Fuero Juzgo, del que se conserva un ejemplar
original del siglo XIII, fue traída a Murcia por una comisión que el
Concejo desplazó a Sevilla.
La exposición también permitirá
descubrir los Expedientes de Hidalguía, donde a menudo se incluían
artísticos árboles genealógicos, como en el caso de Floridablanca, así
como documentos relacionados con el censo de población, entre ellos, el
Padrón de Hidalgos, el Padrón de Moriscos, de 1583, los padrones de
alardes, de gitanos y de extranjeros.
Igualmente figura
documentación relacionada con construcciones singulares de la ciudad,
especialmente el Pósito y el Contraste, actualmente el Almudí y un
edificio emblemático situado en la Plaza de Santa Catalina que fue
demolido a principios del siglo pasado.
El
23 de junio de 1849 el Ayuntamiento aprueba las Ordenanzas para el
Régimen y Gobierno de la Huerta de Murcia, divididas en 17 capítulos y
en los que se regula por primera vez el Consejo de Hombres Buenos, su
composición y funciones.
Durante las próximas semanas, en el
Palacio Almudí también se podrá profundizar en la aparición de edificios
públicos civiles como el Instituto de Segunda Enseñanza, la Escuela
Normal, el Manicomio y el Teatro Romea, así como la reforma de la Plaza
Camachos, Alameda del Carmen y Jardín Floridablanca, coincidiendo con la
inauguración del ferrocarril en 1862.
El recorrido de la
exposición de los últimos 750 años no concluye sin reflejar la
transformación urbana en la segunda mitad del siglo pasado con la
apertura de la Gran Vía y la aparición de nuevos barrios como Santa
María de Gracia, Vistabella, Barriomar, La Paz o Infante Juan Manuel, y
construcciones más modernas como los nuevos puentes sobre el Segura, el
edificio Anexo al Ayuntamiento o el edificio que acoge la Concejalía de
Urbanismo en Abenarabi.