MURCIA.- Los efectos del granizo y las fuertes tormentas de los últimos
días en la Región de Murcia han causado graves daños en los términos
municipales de Jumilla, Yecla y Abarán, y afectan a una superficie total
de 3.583 hectáreas. Según las evaluaciones de la Consejería de Agua,
Agricultura y Medio Ambiente los daños en la cosecha alcanzarían los 6,5
millones de euros.
La directora general de Agricultura,
Ganadería, Pesca y Acuicultura, Carmen Teodora Morales, ha visitado este
miércoles las zonas afectadas, acompañada por responsables de las
Oficinas Comarcales Agrarias y afectados de las comarcas del Altiplano y
la Vega Alta del Segura, así como por los alcaldes de Abaran, Jesús
Molina, Jumilla, Juana Guardiola, y Blanca, Pedro Molina, y por
representantes de Coag-Ir, Apoexpa y Fecoam.
Morales ha indicado
que "el granizo y las fuertes tormentas de agua, que llegaron a alcanzar
los 60 litros por metro cuadrado, han dificultado enormemente la
continuidad de los trabajos de recolección de uva de mesa y
vinificación, así como la realización de tratamientos fitosanitarios con
productos cicatrizantes, ya que en algunos casos la madera se ha visto
fuertemente afectada".
Los cultivos más perjudicados han sido la
viña con 2.034 hectáreas, frutales (700), olivar (500), uva de mesa
(150) y hortalizas (50).
La producción más afectada ha sido la uva
de mesa, que se encuentra en plena recolección. La incidencia ha sido
menor en las explotaciones dotadas de algún sistema de protección como
mallas o plástico. Así, el daño en los viñedos de Jumilla y Yecla ha
sido de gran importancia en racimo, al producir un adelanto de la
vendimia en zonas donde las uvas no habían completado su maduración.
Según
Morales, "la perdida de hoja en las víñas y las abundantes lluvias de
esta campaña podrían determinar en estos días una nueva brotación, lo
que implicaría una pérdida importante de reservas en la viña para la
próxima campaña".
Respecto a la uva de mesa, al igual que en el
viñedo para vinificación, podrían aparecer brotaciones en los próximos
días que implicarían una utilización de las reservas de las plantas y
un detrimento en la vegetación, y en producción para el año próximo.
En
cuanto al olivo, en las zonas de Jumilla y Yecla se aprecian daños
tanto en fruto como en madera. La caída de fruto podría verse
incrementada en los próximos días, debido a que muchos frutos dañados
pueden continuar cayéndose. Los daños en madera podrían comprometer la
cosecha de la próxima campaña, así como la aparición de enfermedades.
En
la comarca de la Vega Alta del Segura, en Abarán, los daños en los
frutales de hueso y almendro se han producido en la madera, y varían
desde heridas dispersas hasta levantamiento casi total de la epidermis.
En uva de mesa la cosecha ha sido afectada prácticamente en su
totalidad, mientras que la viña está recolectada al cien por cien, y se
aprecian solo daños en madera.
Para concluir, la directora general
aseguró que "desde la Consejería se va a trabajar de forma directa con
los ayuntamientos de las zonas afectadas para arreglar los caminos
rurales".