domingo, 30 de julio de 2017

Vecinos de La Arboleja frenan la instalación de dos torres de alta tensión


MURCIA.- Una treintena de vecinos de la pedanía murciana de La Arboleja lograron frenar esta mañana los trabajos de instalación de dos torres de alta tensión ubicadas a escasos metros de varias viviendas en la carretera de La Ñora, junto al Molino del Amor. La convocatoria se hizo ayer sábado a través de redes sociales y mensajes de WhatsApp, según La Verdad.

«Los operarios han aparecido dispuestos a concluir su tarea, pero cuando nos han visto, y después de pensárselo un rato, se han marchado, sin ningún tipo de conflictos», señalaba Concha Medina, de la asociación de vecinos de la zona. 
En el lugar se personaron efectivos de Policía Local y Nacional, que no llegaron a intervenir, pese a indicar que los operarios de la compañía eléctrica acudían legalmente a trabajar.
Es la segunda vez que los vecinos evitan la instalación definitiva de dichas torres, tras el intento del año pasado. En esta ocasión, estuvieron acompañados en su acción por concejales del PSOE, Ahora Murcia y Cambiemos Murcia en el Ayuntamiento de Murcia.
Jesús Martínez, uno de los propietarios de las viviendas ubicadas a escasos metros, denuncia que estas tareas se quieren llevar a cabo «a pesar de haber una moción aprobada en el Pleno del Ayuntamiento de Murcia en el mes de marzo, donde se insta al equipo de gobierno al desmantelamiento de las mismas de forma inmediata».
La formación Ahora Murcia ya puso de relieve que «la construcción de una urbanización estaba perjudicando gravemente a varias familias de la zona, debido a la instalación de dichas torres de gran capacidad eléctrica en la misma puerta de una vivienda». 
«Además de la grave amenaza para la salud y de las molestias para estas familias, los peatones también se ven afectados por la infraestructura», añadían. 
«En lugar de poner las enormes torres en su urbanización, como están obligados, las han sacado fuera del Plan a las viviendas que hay en La Arboleja desde hace más de 30 años», apostillaban además.
Desde la formación insistían en que «estas torres de media tensión incumplen las instrucciones de la OMS (Organización Mundial de la Salud) de que la distancia mínima respecto a las viviendas debe ser de 20 metros: en este caso, hay menos de diez al dormitorio. Las torres deberían estar en la urbanización o soterradas, pero no afectando a vecinos que llevan allí más de 30 años».
Los trabajadores de la empresa que debía hacer los trabajos para la conexión de la línea han comenzado a llegar poco antes de la ocho de la mañana con las máquinas y utensilios necesarios. Sin embargo, según han explicado quienes se encontraban en la protesta, en ningún momento han iniciado su tarea.
En torno a las diez de la mañana, los trabajadores se han marchado y los vecinos han dado por finalizada su protesta que, por esta ocasión, ha surtido efecto.Los trabajadores se marcharon sin conseguir su objetivo, pero previsiblemente la empresa volverá a intentarlo próximamente.
Iberdrola, la empresa que da el suministro y que ha subcontratado los trabajos de instalación de las torres, explica que se trata de una obra que cuenta con todos los permisos municipales.
Fuentes de la compañía han señalado que la instalación de estas torres se lleva a cabo porque una promotora de viviendas en un solar ubicado frente a la vivienda tiene que soterrar la línea volante de alta tensión para conseguir los permisos.
Las torres de la polémica son una conexión entre la línea volante que ya pasaba por la zona y la nueva línea subterránea.
Iberdrola, que insiste en que ellos solo son ejecutores de una obra que tiene permisos municipales a petición de una promotora, explica que dicha promotora intentó llegar a un acuerdo con el dueño de la vivienda para poder instalar las torres dentro de su parcela a cambio de soterrar también la línea en su propiedad. La negativa del vecino motivó que la constructora pidiera permiso municipal para la instalación de las torres en la vía pública, donde están ahora, según se cuenta en La Opinión.
Los residentes en la pedanía han contado con el apoyo de concejales del PSOE y Cambiemos Murcia, que les han acompañado en su protesta.
Nacho Tornel, concejal de Cambiemos Murcia, ha criticado la nula presencia que el equipo de Gobierno está teniendo en este caso en el que considera que se está abandonando a un vecino que tiene un serio problema. 
"Hace cuatro meses que el pleno aprobó una moción para iniciar los trabajos para desinstalar las torres y el Gobierno vuelve hacer lo de siempre, que es cumplir solo aquellas mociones que le interesa", ha protestado Tornel.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ballesta es un mentiroso acreditado de tiempo atrás con una enorme falta de respeto democrático con el adversario y con varios esqueletos en el armario que claman justicia