MADRID.- La
madrileña Cristina Cifuentes no será la única que se quede sin
vacaciones en agosto, aunque en el caso de la presidente
autonómica no será de manera voluntaria. Los principales
banqueros del país, y sus respectivos equipos, deberán estar más
que nunca al pie del cañón en las próximas semanas. Las
integraciones de Popular en Santander y de BMN en Bankia
condicionarán los días de descanso. Caixabank y Bankinter tampoco
están para mucho asueto. Sólo FG (BBVA) podrá digitalizarse aún más
en plena canícula veraniega, adelanta www.capitalmadrid.com
El
mes de agosto se avecina y los días de holganza, deseados por tantos,
parecen reducirse para los principales banqueros del país. Sobre todo,
para la presidenta del Santander, Ana Botín, inmersa en integrar al
Popular y ante un anunciado aluvión de demandas judiciales por los
antiguos accionistas y bonistas del banco presidido en los últimos años
por Ángel Ron y Emilio Saracho.
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, tampoco gozará
de un agosto demasiado tranquilo, ya que en curso tiene pendiente la
integración de BMN. Tanto su grupo como el presidido hasta ahora por
Carlos Egea (se le espera poco por Campoamor este verano) ya han fijado para el 14 de septiembre sus respectivas
juntas de accionistas para aprobar dicha operación.
Estos dos asuntos pendientes son los principales con los que llegan
los bancos españoles a la última semana de julio, en las que en pleno
pelotón, como en las carreras ciclistas, rendirán cuentas sobre los
resultados obtenidos en la primera mitad del año. Algunos flecos sobre
esas integraciones se podrán obtener en los próximos días.
Algo más venideras podrán ser las vacaciones de agosto para otros
banqueros del país. CaixaBank acaba de cumplir el plan de 100 días para
la integración del portugués BPI. Su consejero delegado, Gonzalo
Gortázar, podrá adelantar algunos datos de los avances conseguidos desde
el pasado mes de marzo respecto a su expansión en Portugal.
Bankinter, con algo más de tiempo, trabaja duro en su primer gran
salto internacional con la entrada en Portugal con la compra de parte
del negocio de Barclays en el mercado luso. Su consejera delegada, María
Dolores Dancausa, ya reconocía en los resultados del primer trimestre
que ese negocio aún "tiene un recorrido de mejora".
Sus explicaciones antes de agosto se producirán el 26 de julio, con
las cuentas correspondientes al primer semestre del ejercicio. Es decir,
pese a lo avanzado desde hace un año, los responsables de Bankinter no
pueden tomarse un descanso pleno en agosto para avanzar en sus
objetivos.
Algo similar ocurre en el caso del Sabadell. Su presidente, José
Oliu, ya calificó 2017 como el ejercicio de transición en el que todos
los esfuerzos están puesto en la integración del británico TSB en la
plataforma tecnológica del grupo vallesano. Como diría su consejero
delegado, Jaime Guardiola, los dos primeros ejecutivos podrán tomarse
vacaciones en agosto "fifty, fifty", frase muy utilizada también por el
ex vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra. Todo dependerá de cómo
vaya el proceso de integración.
El presidente del BBVA, Francisco González (FG), se queda como la
única excepción entre los principales banqueros del país que pueden
encarar todo el mes de agosto con menos asuntos pendientes por resolver,
salvo más complicaciones en Turquía o México, sus grandes apuestas
internacionales, o Venezuela, donde aún está el banco presente.
Por tanto, FG podrá dedicarse más a su pasión por la revolución
digital, que casi parece haber creado, mientras vuelve a dejar recluido a
un plasma a su consejero delegado, Carlos Torres, por segunda vez
consecutiva. En esta ocasión, con la presentación de los resultados del
segundo trimestre.
Eso sí, el BBVA, muy voluntarioso, ha adelantado a última hora de la
tarde del jueves 27 de julio dicha presentación. De esta manera, evitan
coincidir en el mismo día con Santander, Sabadell y CaixaBank. Pero eso
sí, se entremezclan con las cuentas de Liberbank, el banco inmunizado
por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de la posiciones
bajista hasta septiembre.
Mientras tanto, en algunos círculos han echado de manos a Francisco
González en el último adiós a las cenizas de Miguel Blesa en Linares
(Jaén), la localidad natal del expresidente de Caja Madrid. Tanto él
como FG entraron en el olimpo bancario por el mismo "dedo designador",
el del expresidente del Gobierno José María Aznar.
1 comentario:
Pobre Don Vito.
Se le verá poco por Campoamor.
Después de hundir una Caja y un Banco, debería descansar un poco. Eso no lo hace cualquiera.
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