La economía
española sigue bajo la supervisión de los órganos ejecutivos de la Unión Europea, es decir de la Comisión. Y todo por la crisis del sistema
financiero español. Los banqueros han insistido a lo largo de los
últimos años en que la crisis no iba con ellos. Pero la realidad es que
también les afecta. No se ha quedado solo en las cajas de ahorros.
Primero
será durante la tarde de este lunes cuando se reúna el Eurogrupo y ya,
en la mañana de mañana martes, cuando lo haga el Consejo de Ministros
de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin) con una agenda llena
de cuestiones sobre asuntos bancarios. España va a ocupar una parte
importante de las reuniones, tanto formales como informales, que
se van a celebrar estos dos días.
Lo obliga el Memorando de
Entendimiento sobre las condiciones de política sectorial
financiera firmado entre España y la Comisión Europea. La pasada
semana han sucedido dos cuestiones sobre las que el Consejo y la
Comisión tienen que manifestarse. Las novedades son la ampliación
del plazo para la privatización de Bankia y el cambio de
presidente de una de las entidades sometidas a los órganos de
supervisión comunitarios. Los pactos son para cumplirlos.
El
segundo párrafo del preámbulo del acuerdo firmado por parte
española por el Ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos
Jurado y por el Gobernador de Banco de España, Luis María Linde, y por
parte de la Comisión por el entonces vicepresidente, Olli Rehn, es
claro.
Por su interés de cara al futuro de las intervenciones
de la Comisión Europea en el sector financiero lo reproducimos
íntegro: “Durante el período de prestación de asistencia
financiera por la FEEF, las autoridades españolas adoptarán todas
las medidas necesarias para garantizar la adecuada aplicación
del programa. Se comprometen asimismo a consultar ex ante con la
Comisión Europea y el Banco Central Europeo (BCE) sobre la adopción de
toda política relativa al sector financiero que, no estando
incluida en este ME, pueda incidir sensiblemente en la
consecución de los objetivos del programa (se solicitará
igualmente el dictamen técnico del Fondo Monetario
Internacional-FMI)”
Este segundo párrafo continúa y añade una
serie de precisiones que conviene tengan en cuenta quienes todavía
ponen en duda, por su desconocimiento claro, el poder de
supervisión de la Comisión Europea, sobre todo el sector bancario
español, hasta tanto se haya devuelto el último euro de los más de
40.000 millones que hemos recibido para rescatar al sistema
financiero español.
Así el segundo párrafo del memorando de
entendimiento, que puede leerse íntegro en la dirección que
añadimos más abajo, concluye: “Facilitarán también a la Comisión
Europea, al BCE y al FMI toda la información necesaria para
supervisar los avances realizados en la aplicación del programa y
hacer un seguimiento de la situación financiera. El Anexo 1
contiene una lista provisional de los datos que deberán
presentarse”.
Dirección de consulta del Memorando de Entendimiento: https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-2012-14946.
Bien
es cierto que el Eurogrupo y el Ecofin tienen una amplia agenda que va
mucho más allá de las cuestiones que afectan a España. Está encima de
la mesa el Fondo de Garantía de Depósitos cuya constitución a
escala europea debe suponer un paso de gigante en la unión
financiera de los países comunitarios.
Están también,
curiosamente en este momento tan relevante para el futuro del
sector financiero español, las normas que deben aprobarse para las
condiciones de la asunción de pérdidas y recapitalización de
las entidades financieras. Y como consecuencia de lo anterior
también el consejo analiza las propuestas aprobadas por el
Parlamento Europeo sobre las condiciones para declarar en quiebra una
entidad.
Todo ello la misma semana que se reúne el Banco
Central Europeo del que no se descarta apruebe más medidas para
conseguir que el ritmo económico en la eurozona no decaiga en
exceso.
(*) Periodista
No hay comentarios:
Publicar un comentario