MURCIA.- El juzgado de lo Mercantil nº 1 de los de Murcia aprobó este
lunes la modificación del convenio del concurso de acreedores que en su
día propuso el Real Murcia, club de fútbol cuyo primer equipo compite
actualmente en Segunda División B, y ello otorga a la entidad grana
cinco años más de margen para saldar su deuda, la cual ronda en términos
globales los 40 millones de euros.
La sentencia dictada por la jueza titular María Dolores de
las Heras García con fecha 1 de octubre de 2016 trae consigo la
aceptación del 88,4% del crédito ordinario no público y el 100% del
crédito privilegiado laboral.
Así lo indicó la oficina de comunicación del Tribunal
Superior de Justicia de Murcia (TSJMU), que informó de que la
modificación y sus efectos "se extenderán a los acreedores con créditos
privilegiados laborales, a los ordinarios que no se hubiesen manifestado
a favor de la misma y a los acreedores subordinados, salvo los
públicos".
De este modo, el club que preside Guillermo Martínez Abarca
desde el fallecimiento a finales del pasado año de Jesús Samper
encuentra un balón de oxígeno y el objetivo a corto plazo es ir
atendiendo a las obligaciones económicas del día a día.
Por lo tanto, la noticia supone tranquilidad para una
institución con apreturas hasta el punto de que ha tenido que
confeccionar una plantilla más bien modesta para acometer el objetivo de
ascender a la Liga 1/2/3.
La modificación del convenio no obliga al Murcia a pagar la
deuda estando su primer equipo en la categoría de bronce, en la que los
ingresos son mínimos con respecto a la Liga de Fútbol Profesional (LFP).
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