LORCA.- El concejal de IU-V, Pedro Sosa, comparecía esta mañana ante los medios de comunicación para dar cuenta del objeto esencial de las juntas generales de Limusa y Aguas de Lorca que se celebraron ayer: el cierre del ejercicio del año 2015, que arroja beneficios extraordinarios para ambas empresas.
En el caso de Limusa los beneficios alcanzan la
cifra de 784.472 euros, con unas reservas (acumulación de beneficios
desde 2011) de nada menos que 3.390.707 euros. Por su parte, Aguas de
Lorca ha obtenido unos beneficios de 1.962.634 euros (medio millón de
euros más que el año pasado).
Pedro Sosa sostiene que esos
beneficios no son objeto de ninguna gestión excelente de los
responsables de ambas empresas, sino de todo lo contrario; esos
beneficios traen causa de los elevados recibos de agua y basura que los
lorquinos pagan regularmente y, también hay que decirlo, de la
deficiente prestación de los servicios que ambas empresas tienen
encomendados.
En opinión del concejal de IU, la contraprestación
económica que pagan los ciudadanos por esos dos servicios: agua y
basuras, debería tener legalmente la naturaleza jurídica de tasa, y por
lo tanto es ilegal que se obtengan beneficios, toda vez que la tasa por
la prestación de cualquier servicio público, por ley, en ningún caso
puede superar el coste global del servicio, es decir, a los ciudadanos
no se les puede exigir globalmente en los recibos que pagan ni un euro
más de lo que a las empresas les cuesta prestar el servicio. En
definitiva, esos beneficios son ilegales, lo llevamos diciendo durante
años y el PP es consciente de ello.
Respecto a Limusa, que de
nuevo ha recibido un galardón de esos que pagamos entre todos -escoba
de platino lo llaman-, Sosa afirma que este premio parece un chiste y
que en materia de premios y autobombo del gobierno del PP ya no le
sorprende nada, pero que cualquier ciudadano lorquino que pasee
regularmente por Lorca y sus barrios se extrañaría mucho de que nuestra
ciudad sea merecedora de cualquier galardón serio en materia de
limpieza.
El concejal de IU también ha aprovechado su comparecencia para
volver a denunciar la política de contratación de personal en la
empresa, convertida en un cortijo en el que no se respetan los
principios de igualdad, mérito, capacidad y concurrencia.
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