miércoles, 20 de abril de 2016

Nuevo terremoto de 6,3 grados frente a la costa de Ecuador

QUITO.- Un nuevo sismo de magnitud 6,3 ha golpeado la costa de Ecuador cuatro días después de que el país se viera sacudido por un terremoto de magnitud 7,8, que ha dejado 525 víctimas mortales. El epicentro del temblor, que se ha producido a las 08.33 GMT a una profundidad de 15,7 kilómetros, se ha ubicado a 25 kilómetros de Muisne y a 73 kilómetros de Propicia, ha indicado el Instituto de Estudios Geológicos de Estados Unidos (USGS). 

El USGS ha señalado en su página web que el temblor se ha sentido de forma débil en Quito y en Guayaquil y no se ha activado la alerta de tsunami.
Las localidades de Manta, Portoviejo y Pedernales suman el mayor número de fallecidos, con un total de 431 muertos. En Pedernales se han contabilizado hasta el martes a las 20.30 159 víctimas mortales, 158 en Manta y 118 en Portoviejo.
Del total de fallecidos, once son de nacionalidades extranjeras (tres ciudadanos cubanos, tres colombianos, dos canadienses, un dominicano, un inglés y un irlandés). La Fiscalía ha publicado en su página de Internet una lista con los datos de las víctimas mortales del terremoto ya identificadas.
Horas antes del último balance de la Fiscalía, el ministro de Defensa ecuatoriano, Ricardo Patiño, compareció el martes antes para hacer balance de la situación. El ministro indicó que 4.027 personas han sido atendidas con heridas de diversa consideración.
"Es la peor tragedia que hemos asumido en 60 años", admitió Patiño, antes de agradecer las muestras de solidaridad de la comunidad internacional. En este sentido, explicó que en las tareas de búsqueda participan 400 efectivos procedentes de un total de ocho países.
Carreteras colapsadas
Las autoridades se afanan también en reabrir las carreteras que han quedado colapsadas por el seísmo y en restablecer las comunicaciones telefónicas o la electricidad. El suministro eléctrico está ya restablecido en la "mayoría" de las zonas afectadas.
El ministro instó a las tiendas de alimentación y a los bancos a recuperar progresivamente su actividad, con el objetivo de avanzar hacia una normalidad que, en vista de los datos, aún parece lejana.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, ha estimado en unos 3.000 millones de dólares las pérdidas ocasionadas, si bien Patiño considera que esa cantidad es el dinero que hará falta sólo para reconstruir la región de Manabí.

No hay comentarios: