lunes, 11 de abril de 2016

PSOE y Podemos abren de nuevo la puerta a un acuerdo de última hora / José Hervás *

Aunque el proceso abierto por Pedro Sánchez para formar Gobierno y someterse a la sesiónde investidura parece más alejado que nunca, en los partidos de la izquierda todavía mantienen abiertas las esperanzas de llegar a un acuerdo en el último minuto. El PSOE considera que en el documento de Podemos había un amplio margen de acuerdo. ¿Por qué no volverlo a intentar, entonces?

Y Podemos ha ten­dido la mano a los so­cia­listas con el fin de que le apoyen mañana para sacar ade­lante su pro­po­si­ción de Ley 25 de emer­gencia so­cial. Aunque en el PP no des­cartan este acuerdo de úl­tima hora, toda su es­tra­tegia está mon­tada pen­sando en la con­vo­ca­toria de elec­ciones para el 26-J.

El PSOE man­tiene la puerta abierta al con­testar al do­cu­mento que Podemos le en­tregó en la reunión que man­tu­vieron con Ciudadanos a través de una carta del por­tavoz en el Congreso y en la Comisión Negociadora del PSOE, Antonio Hernando, ex­pre­sando que había un am­plio margen de acuerdo sobre el pro­grama. Solo en los puntos 19 y 20, los re­la­tivos al de­recho a de­ci­dir, donde Podemos da por hecha la exis­tencia de va­rias ‘naciones’ y a la com­po­si­ción del Gobierno, donde ex­cluía a Ciudadanos, hay "dos opo­si­ciones cla­ras".

Bien es cierto que en el do­cu­mento del PSOE que hace acom­pañar a la carta que Antonio Hernando ha en­viado a Pablo Iglesias, aunque ha­blan de acuerdo en el 70 % de puntos de en­cuen­tro, una lec­tura más re­po­sada evi­dencia que las di­fe­ren­cias son más agu­das.

El primer test para este nuevo in­tento de acer­ca­miento lo vamos a ver mañana martes cuando a partir de las cuatro de la tarde se de­batan en el Congreso de los dipu­tados las pro­po­si­ciones de ley que han pre­sen­tado los par­ti­dos.

La pre­sen­tada por Pablo Iglesias, co­no­cida como ‘Ley 25 de emer­gencia so­cial’ será la se­gunda en de­ba­tirse tras la pro­puesta por el Partido Popular de mo­di­fi­ca­ción de la Ley 25/2015, de 28 de ju­lio, de me­ca­nismo de se­gunda opor­tu­ni­dad, re­duc­ción de la carga fi­nan­ciera y otras me­didas de orden so­cial, que en cierta me­dida asume parte de las reivin­di­ca­ciones de Podemos.

La pro­puesta del grupo par­la­men­tario que li­dera Pablo Iglesias se re­sume en cuatro puntos bá­si­cos, según la carta que Pablo Iglesias re­mitió a los dipu­tados: 1) Prohibir los des­alojos for­zosos sin al­ter­na­tiva ha­bi­ta­cio­nal. 2) Introducir un pro­ce­di­miento sim­pli­fi­cado de re­es­truc­tu­ra­ción y can­ce­la­ción de la deuda hi­po­te­caria de los ho­ga­res. 3) Garantizar por ley que no se cor­tará la elec­tri­cidad ni el gas en casos de po­breza so­bre­ve­nida y 4) Prohibir los co­pagos far­ma­céu­ticos en todo el te­rri­torio es­ta­tal.

No tendrá muy di­fícil Iglesias con­se­guir el apoyo de la opo­si­ción a su pro­yecto, una vez que ha de­jado al margen uno de los puntos más di­fí­ciles de apli­car, el de la renta ga­ran­ti­zada. Los cuatro puntos que pro­pone ya se aplican en la nor­ma­tiva es­pañola. El único en el que se po­drían con­se­guir avances sobre la ac­tual le­gis­la­ción o sobre la pro­puesta del PP que se va a de­batir con an­te­rio­ridad a la suya, es en el co­pago.

En la prác­tica, la Ley 25 de Podemos su­pon­dría un cambio para la eli­mi­na­ción total de los co­pagos far­ma­céu­ti­cos. Pero estas tasas sólo se aplican a partir de un de­ter­mi­nado nivel de renta, fi­ján­dose un lí­mite má­ximo al mes, de modo que no afecta a las fa­mi­lias sin re­cursos ni a los pen­sio­nistas con bajos in­gre­sos. Además, va­rias CCAA han ate­nuado o elu­dido la apli­ca­ción de di­chos co­pagos me­diante di­versas me­di­das.

En cuanto a los equipos de es­tra­tegia del PP, li­de­rados por el jefe de Gabinete del Presidente del Gobierno, Jorge Moragas, que se ha con­ver­tido en el fac­tótum del par­tido de cara a las elec­cio­nes, con­si­deran que la op­ción que tiene más po­si­bi­li­dades a día de hoy es la de la con­vo­ca­toria de nuevas elec­cio­nes. Y con ella tra­ba­jan.

Saben que tienen que ce­rrar el de­sá­nimo que se está pro­du­ciendo en las de­le­ga­ciones del par­tido en pro­vin­cias y por eso han pre­pa­rado un pro­grama se­manal de ac­ti­vi­dades a las que acude el pre­si­dente del Gobierno y del par­tido para que la es­truc­tura no se des­mo­rone. Pero son cons­cientes de que, si no per­ma­necen en el Gobierno o ganan unas pró­ximas elec­cio­nes, una parte de su es­truc­tura des­apa­re­cerá. Y con ella una parte de su forma de vida.


(*) Periodista

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