LORCA.- Izquierda Unida-Verdes ha denunciado ante el Servicio de Protección
de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil un vertido ilegal de
purines de cerdo en la pedanía de Purias. Éste, según precisaron, afecta
a una superficie de unos 7.000 metros cuadrados.
Los concejales de IU Pedro Sosa y Adoración Peñas mostraron ante la
prensa instantáneas captadas en el lugar del vertido, dos parcelas
ubicadas en las inmediaciones del Cabezo Velillas donde no hay ninguna
granja porcina.
Vecinos de las viviendas más próximas alertaron del vertido en «una
gran balsa ilegal» que provoca un hedor «insufrible», dijeron los
ediles. Advirtieron de que el líquido contaminante es un caldo de
cultivo perfecto para la proliferación de mosquitos tigre en la zona,
vectores de transmisión de distintas enfermedades, entre ellas del virus
zika.
Peñas indicó que el vertido está contaminando «el suelo, el subsuelo y
el aire» y relató que el olor que desprende es perceptible a varios
kilómetros de distancia y que condiciona las actividades cotidianas de
los habitantes de la zona.
El concejal Sosa recordó que en 2014 cerraron las dos plantas de
tratamiento de purines que existían en el municipio para la cogeneración
eléctrica y señaló que desde entonces se suceden casos como el de
Purias. Se refirió a que ya son varias las denuncias provocadas por las
ampliaciones de los cebaderos porcinos y la apertura de balsas de
vertido de purines, como la que afecta a varias familias en la pedanías
de Campillo y Tercia.
El edil instó a Urbanismo y Medio Ambiente «a
tomar cartas en el asunto» de inmediato.
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