sábado, 29 de agosto de 2015

Pintadas contra el pago del aparcamiento en Calblanque


CARTAGENA.- La puesta en marcha del cobro por estacionar en las 280 plazas de aparcamiento que gestiona la empresa Turismo Rural Sostenible (TRS) en el parque regional de Calblanque, se ha encontrado con protestas en forma de graffitti.

El centro de visitantes de Las Cobaticas, en el parque regional de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña del Águila, amaneció cubierto de pintadas con mensajes en contra del aparcamiento de pago, que se puso en marcha el miércoles en dos de las tres áreas de estacionamiento del espacio protegido, de propiedad particular.

Una medida polémica a la que siempre se han opuesto los vecinos de este enclave natural. Varias de las pintadas exigían la expropiación de los terrenos. La reanudación del aparcamiento de pago en Calblanque fue posible una vez que la empresa encargada del mismo recibió la pertinente licencia del Ayuntamiento de Cartagena, recuerda 'La Verdad'.

Las pintadas han aparecido en la caseta de información que tiene instalada la contrata de la Comunidad Autónoma encargada de controlar que no se sobrepase el aforo del parking.
El socio y administrador de TRS, empresa que gestiona las propiedades de la sociedad Costa Paraíso y de una familia de hermanos –que también es propietaria– Karl H. Bödding Cañedo, señaló a 'La Opinión' que el pasado verano los vándalos también provocaron varios destrozos valorados entre 7.000 y 9.000 euros. «Hicieron pintadas en nuestra caseta, rompieron el sistema de comunicación, entre otros elementos».
Karl H. Bödding quiso aclarar que él no es propietario, pero sí es socio y apoderado de Costa Paraíso, una sociedad formada principalmente por capital alemán.

Catalá y Arenas clausuran en Mazarrón la Intermunicipal del PPRM con presencia de Valcárcel

MAZARRÓN.- El vicesecretario general de Autonomías y Ayuntamientos del PP nacional, Javier Arenas, y el ministro de Justicia, Rafael Catalá, clausuraron este sábado en Mazarrón la Convención Intermunicipal del PP de la Región de Murcia, bajo el lema 'Ciudades, espacios de nuevas oportunidades. Un proyecto para las personas'.

Al acto, que se celebrado en la Cafetería 'El Faro', acudió también la presidenta del PP en la Comunidad Valenciana, Isabel Bonig, el secretario general del PP de la Región de Murcia y presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez, y el presidente del PP de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel.
Tras la clausura, los alcaldes, portavoces municipales y concejales del Partido Popular junto al presidente de la Comunidad y secretario general del PP de la Región de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, procedieron a la firma del Manifiesto por el desarrollo de la Región 'Murcia, ¡más!', en el que se recogen las reivindicaciones de las necesidades de la Región de Murcia en materia de agua, financiación, infraestructuras, investigación e innovación.
El documento refleja el compromiso de cooperación permanente con el proyecto del Gobierno Popular de la Comunidad Autónoma, para reclamar en los diferentes foros de participación institucional de las corporaciones locales las iniciativas necesarias para que los compromisos en estos ámbitos sean una realidad en el menor tiempo posible.
El PP de la Región de Murcia defendió "los proyectos comunes de España", como el agua, las infraestructuras y la financiación "desde la unidad, la solidaridad y el diálogo".
El presidente del PP en Murcia, Ramón Luis Valcárcel, destacó que "compartimos asuntos comunes" con el resto de España, y destacó el "esfuerzo colectivo" para que "la Región de Murcia sea mucho más", con nuevas ideas, propuestas, y renovación de compromisos. "El PP es un partido comprometido, que se abre a los demás y que se proyecta hacia todos", subrayó Valcárcel.
"Trabajamos con más ambición para que Murcia sea más", remarcó el secretario general del PP y presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez, quien añadió que "tenemos una agenda común" con el Gobierno central para mejorar estas demandas. Durante su intervención en el acto de clausura dijo que "creemos en España y queremos aportar a ese proyecto la fortaleza de Murcia".
En este sentido, Sánchez adelantó que en la reunión que mantendrá con el presidente Rajoy esta próxima semana, solicitará que se establezca como "medida excepcional" un precio del agua desalada "razonable y asequible" para los agricultores y regantes, según han informado fuentes populares en un 'comunicado'.
Afirmó que el Gobierno de España "cree en Murcia y se compromete con ella" y destacó que se han realizado "gestos de solidaridad" con la Región y sus regadíos. Subrayó en este sentido la aprobación por el Consejo de Ministros en su reunión de ayer de las medidas que completan el decreto de sequía, con una inversión global de 30 millones de euros, que va a permitir, entre otras actuaciones, la apertura de pozos y movilizar nuevos recursos para "garantizar el agua que Murcia necesita a más de 100.000 familias", frente a las alternativas del PSOE "y su política de agua de salero", manifestó.
Pedro Antonio Sánchez resaltó que municipios, pedanías y barrios "son la piedra angular" de un proyecto nacional "del que todos somos parte", y sobre el que dijo, "seguimos construyendo el proyecto de más Región".

Respuesta del PSRM

El responsable de Comunicación del PSRM y diputado regional, Emilio Ivars, ha respondido al Pedro Antonio Sánchez que, si de verdad el PP está por conseguir un precio razonable para el agua desalinizada, lo tiene muy fácil: que vote a favor de las enmiendas del PSOE a los Presupuestos Generales del Estado.
En concreto, Ivars se refiere a la enmienda socialista que defiende la construcción de plantas fotovoltaicas en las desalinizadoras de Águilas y Valdelentisco, lo que reduciría el coste del agua hasta en un 50%.
El diputado socialista ha criticado al presidente murciano "por propugnar ahora lo que no han sido capaces de hacer en muchos años".
"El PP habla ahora de infraestructuras en beneficio de los municipios, cuando lo único que ha conseguido hacer con sus reiterados mandatos es que los ayuntamientos las paguen a costa de sus inversiones, como el caso de la Autovía del Noroeste, o retrasar y retrasar las tan necesarias infraestructuras regionales, como la demandada autovía del Norte, por no hablar del retraso en el AVE o de las ridículas aportaciones que se hacen en los PGE de 2016 para finalizar obras inconclusas o para solucionar las necesidades que esta Región aún tiene", ha subrayado.
"Ahora que han perdido gran parte de los ayuntamientos de la Región, el PP habla de recursos (los que recortaron, los que aprobaron la Ley de Bases de Régimen Local), de sostenibilidad (los que han hecho imposible la sostenibilidad regional, los que no apuestan por las energías fotovoltaicas) y se atreven con ofrecer gobierno abierto (después de 20 años de prepotencia e imposiciones en sus gobiernos)", ha añadido.
En opinión de Ivars, "el PP no tiene credibilidad cuando habla de poner los ayuntamientos al servicio de las personas, cuando lo único que ha hecho hasta ahora en todos sus gobiernos ha sido hacer caer el peso de la crisis sobre las personas, sobre los servicios a las personas, fundamentalmente en el ámbito municipal, en la administración que más cercana debe encontrarse al ciudadano".
"Afortunadamente en la Región de Murcia se ha producido un cambio en muchísimos ayuntamientos que están poniendo en valor las políticas socialistas para las personas, las políticas para la gente, las políticas de transparencia y cercanía ciudadana", ha insistido el responsable socialista, que sostiene que el PP "debería pedir disculpas y comprometerse a una mejor financiación, a retirar su nefasta Ley de Bases de Régimen Local, y a atender las cargas impropias que están asfixiando a los ayuntamientos ".

Ministra Tejerina: «Hemos dado seguridad a la cuenca del Tajo y tranquilidad a la del Segura»

MADRID.- La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, defendió el Memorándum del Tajo-Segura, entre otras actuaciones, al asegurar que el Gobierno ha conseguido dar "seguridad" a la cuenca del Tajo y "tranquilidad" a la del Segura.

Así lo afirmó García Tejerina en la rueda de prensa posterior a la reunión de trabajo que mantuvo con sus homólogos francés, Stéphane Le Foll; italiano, Maurizio Martina, y portugués, Assunçao Cristas, para alcanzar una postura común de cara al Consejo de Ministros extraordinario del 7 de septiembre en Bruselas.
La ministra aludió al trasvase de 15 hm3 del Tajo al Segura para este mes, una derivación hídrica criticada por el Gobierno castellano-manchego ante la "escasez" de agua en los pantanos de Entrepeñas y Buendía.
Según señaló, el Gobierno ha dado "garantías" y "seguridad" a la cuenca del Tajo "estableciendo por primera vez" un límite por debajo del cual no se puede trasvasar.
Ese límite se estableció en un principio en 240 hm3 y ahora se encuentra en los 304 hm3 e irá subiendo "progresivamente" en los próximos años hasta que alcance los 400 hm3.
Indicó que con los gobiernos socialistas los recursos hídricos de Castilla-La Mancha tenían una "desprotección total", mientras que el Gobierno del PP "da seguridad a la cuenca excedente".
"Al mismo tiempo", según García Tejerina, "se ha dado tranquilidad a las cuencas receptoras" -en este caso la del Segura-, porque se han establecido unas normas "objetivas y no arbitrarias" para conceder los trasvases.

Medio Ambiente incrementa el número de muestras tomadas en el Programa de Vigilancia Sanitaria de Fauna Silvestre

MURCIA.- La Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente ha ido incrementando paulatinamente desde el año 2010 el número de muestras tomadas en el Programa de Vigilancia Sanitaria de Fauna Silvestre, con la finalidad de detectar la aparición de determinadas enfermedades o las variaciones de su prevalencia.

El director general de Desarrollo Rural y Forestal, Federico García, señaló que "la Ley de Caza y Pesca Fluvial de la Región de Murcia establece la necesidad de un sistema de vigilancia del estado sanitario de la fauna silvestre para preservarla de epizootías y evitar la transmisión de zoonosis, así como de establecer las medidas necesarias para impedir que las piezas de caza se vean afectadas o puedan transmitir enfermedades".
Dicho Programa comprende la vigilancia sanitaria activa en especies más o menos abundantes y con aprovechamiento cinegético por la relativa facilidad para obtener un número suficiente de muestras y busca un muestreo aleatorio para determinar los patógenos más relevantes y prevalentes. 
Por otra parte, la vigilancia sanitaria pasiva determina las causas de mortalidad en animales que aparecen muertos. En ambos casos se pretende establecer indicadores que definan la situación sanitaria de una determinada especie en su área de desarrollo.
El Programa de Vigilancia Sanitaria en Fauna Silvestre se inició en el año 2010, centrándose en las enfermedades del jabalí y su diagnóstico. Desde entonces se ha ido ampliando a otras especies y sus enfermedades. El pasado año 2014 se llevaron a cabo un total de 562 muestras de diferentes especies de fauna cinegética, tales como zorro, liebre, conejo, arruí, ciervo, cabra montés, gamo, muflón, cabras asilvestradas y jabalíes.
El Laboratorio Agrario y de Sanidad Animal (LAYSA) de la Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente analiza las muestras tomadas y comunica los datos epidemiológicos obtenidos a la Red de Alerta Sanitaria Veterinaria (RASVE), dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Las muestras que han resultado positivas son enviadas a los laboratorios nacionales de referencia para descartar o confirmar la presencia de esas enfermedades. También se colabora con la Dirección General de Salud Pública para el análisis y detección de enfermedades zoonóticas, como la triquina en jabalí y zorro.
El director general destacó que "el pasado año el Programa de Vigilancia Sanitaria no detectó ninguna muestra positiva en carnívoros, liebres y rumiantes. Solo se ha detectado un caso positivo del complejo Mycobacterium tuberculosis en jabalí".
En 2015, añadió, "se han empezado a analizar muestras de conejos para determinar la enfermedad hemorrágica, con la obtención de una prevalencia del 42 por ciento".
En general, concluyó Federico García, "el estado sanitario de los animales abatidos durante la pasada temporada de caza ha sido bueno. No se han encontrado lesiones importantes durante las necropsias, salvo las propias del abatimiento por arma de fuego".

Asaja Murcia califica de "insuficiente" el trasvase aprobado de 15 hm3

MURCIA.- Asaja Murcia ha valorado como "insuficiente" el trasvase aprobado por el Gobierno central de 15 hectómetros cúbicos, pues le han quitado cinco y deberían haber sido 20, según han informado fuentes de la organización agraria en un comunicado.

De este modo, su portavoz ha explicado que "la situación de la cabecera es complicada, necesitamos agua y debería haberse aprobado un trasvase de 20 hectómetros cúbicos. Necesitamos una política nacional de agua vertebradora y solidaria, y no se puede permitir presiones políticas de ninguna comunidad autónoma, pues el agua es un bien de dominio público".
Además, ha apuntado que "necesitamos un Plan Hidrológico Nacional que se ponga en marcha urgentemente y que solucione definitivamente el déficit hídrico estructural que tiene la cuenca del Segura".
"Estamos muy preocupados por la campaña de otoño, que si no llegan recursos hídricos suficientes, puede verse afecta directa e indirectamente y eso no podemos permitirlo. Confiamos en que existe la solidaridad hídrica que evite que podamos encontrarnos con graves problemas para las hortalizas otoñales, pues está en juego la economía de miles de familias", ha matizado.

Estados Unidos vs. Arabia Saudita: relaciones de poder / Luis Augusto Yepes G. *

En 1973, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) puso de rodillas a las economías occidentales, reduciendo la producción de petróleo y aumentando los precios. Hoy, los avances tecnológicos, en particular en Estados Unidos, han llevado a este país a ser el primer productor de crudo y gas en el mundo, amenazando la posición de la OPEP y de su principal socio, Arabia Saudita. ¿Estamos ante la revancha de lo sucedido hace más de 40 años? Veamos:

En octubre de 1973, coincidiendo con la festividad judía del Yom Kippur, los egipcios –con su poder militar, recuperado gracias al permanente suministro de material de guerra soviético– atacaron las posiciones israelitas en el Sinaí y las alturas del Golán. Mientras que Estados Unidos y los países de Europa Occidental confirmaron su apoyo militar y político a Israel, la Unión Soviética tomó partido a favor de los egipcios.

Así las cosas, la Organización de los Países Árabes Exportadores de Petróleo (OPAEP), miembros de la OPEP, con excepción de Egipto y Siria, redujeron la producción de petróleo en 25 por ciento, aproximadamente, lo que equivalía a cinco millones de barriles por día o 9 por ciento de la demanda mundial de petróleo de la época. Este impacto equivale a suspender hoy toda la producción petrolera de África, que incluye a países como Nigeria, Angola y Egipto, o casi 70 por ciento de toda la producción de Estados Unidos, lo que generaría un desajuste de grandes proporciones entre la oferta y la demanda. Como si fuera poco, la OPEP incrementó de manera unilateral los precios del petróleo en más de 400 por ciento hasta llegar a valores del orden de 16 dólares por barril, que, en términos de dólares del 2015, correspondería más o menos a un precio del WTI de 50 dólares por barril, superior al cierre del mercado el 21 de agosto, de 40 dólares por barril.

Actualmente, el balance de poderes entre los dos países parece estar dando un giro a favor de Estados Unidos. El precio del mercado de futuros del WTI para el 2023 es de 62 dólares por barril, lo que quiere decir que los mercados no ven una recuperación significativa de precios en los próximos años. Para Estados Unidos, cuya nueva producción de petróleo y gas se basa en técnicas no convencionales tipo fracking, la innovación tecnológica está dando resultados mejores a los pronosticados.

En una reciente publicación de Ambrose Evans-Pritchard en The Telegraph del Reino Unido, indica que las técnicas mejoradas de perforación han permitido reducir los costos en un 50 por ciento, y hay oportunidad de reducciones adicionales del 30 por ciento. Aunque el número de pozos de petróleo se ha disminuido, la producción sigue en aumento, lo que refleja mejoras en la eficiencia de perforación. En consecuencia, precios de 60 dólares el barril no afectarán tanto la producción como se suponía inicialmente.

Por otra parte, Estados Unidos sigue importando aproximadamente el 50 por ciento de sus consumos (9,9 millones de barriles día en la primera semana de agosto del 2015), luego los precios relativamente bajos del petróleo también favorecen las importaciones, lo que, de cierta manera, pone a ese país en el mejor de los mundos.

Por el lado de Arabia Saudita, la estrategia de aumentar la producción no ha sido exitosa y hoy el precio del hidrocarburo está en su nivel más bajo de los últimos seis años. La idea inicial era aumentar producción para no perder participación del mercado y esperar que las bajas cotizaciones del petróleo tuvieran un fuerte impacto en la producción del shale oil. Sin embargo, en la práctica, y por los altos niveles de eficiencia de la producción de hidrocarburos no convencionales, la producción no se ha reducido tanto como se esperaba y, en la medida en que los precios se incrementen, de la misma manera lo hará la producción de petróleo en EE. UU.

Contrario a lo que ocurría en las épocas del legendario Ahmed Yamani, quien fuera el ministro de Petróleo, en el embargo petrolero hace poco más de 40 años, ahora el panorama petrolero de Arabia Saudita luce complejo. Su dependencia del petróleo es del 90 por ciento, y durante estos años no se diversificó el aparato productivo de ese país. El presupuesto está desfinanciado en un 20 por ciento, lo que se agrava considerando los altos subsidios y el hecho de que la población no paga impuestos. Según el artículo de The Telegraph, solo con un precio de 100 dólares por barril, el presupuesto llega al punto de equilibrio. Mientras tanto, hay que echarle mano a los fondos de reserva, que en el periodo de agosto del 2014 a mayo del 2015 se han reducido en un 10 por ciento.

En conclusión, a largo plazo Estados Unidos tiene una posición energética más sólida, mientras que la situación de los saudíes no pinta bien. Este balance puede afectar las relaciones de poder y la geopolítica internacional en los próximos años, sobre todo en el Medio Oriente, considerando que Arabia Saudita ha sido hasta ahora un factor estabilizador en la región y alineado, por lo general, con los países occidentales. Habrá que ver cómo evolucionan las variables de este complejo panorama petrolero.


(*) Consultor privado en Venezuela

Se hunde la OPEP / Luis Rivas *

A pocos días del 55º aniversario del nacimiento de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), el cartel ahora compuesto por 12 países (Arabia Saudí, Angola, Argelia, Libia, Ecuador, Emiratos Árabes Unidos, Irak, Irán, Kuwait, Nigeria, Qatar y Venezuela) vive uno de sus peores momentos. La crisis de los 50 en el seno del club ha provocado que algunos de sus componentes comiencen a dudar sobre la existencia misma del grupo: ¿Para qué sirve la OPEP?, se preguntan negativamente algunos medios de prensa. 

En este aniversario y en esta crisis es preciso recordar también al venezolano considerado como «el padre de la OPEP». Juan Pablo Pérez Alfonzo (1903-1979) fue uno de los principales impulsores de la organización, para él pensada como un mecanismo de control de producción y precios que ayudara a los países productores a liberarse de las grandes compañías privadas y a mejorar las condiciones económicas de sus pueblos.

Pérez Alfonzo supo detectar enseguida que la OPEP por él soñada poco tenía que ver con su desarrollo posterior. Entre sus obras escritas sobre asuntos siempre relacionados con los hidrocarburos destaca «Hundiéndonos en el excremento del diablo», donde refleja su crítica y su decepción sobre el tratamiento que los políticos hacen de una riqueza que él pensaba serviría para beneficiar a toda la ciudadanía.

Cinco décadas después de su nacimiento, la OPEP vive una guerra interna provocada por la bajada brutal del precio del petróleo. Resulta curioso leer las informaciones sobre el crudo de los últimos meses, cuando los analistas — a los que siempre recurrimos los periodistas ingnorantes como el que suscribe- señalaban el peligro de un barril de petróleo por debajo de los 100 dólares norteamericanos, que es la moneda en la que se comercializa este «excremento».

La rebelión de «los 5 frágiles»

Estamos ya por debajo de los 50 dólares barril y los siempre respetados analistas piensan incluso que el precio puede bajar hasta los 30 «fulas». Con estas cifras, algunos países miembros de la OPEP, digamos con respeto, los más pobres de la organización, o los llamados «los 5 frágiles» (Argelia, Irak, Libia, Nigeria y Venezuela), denuncian la política de sus colegas «ricos», Arabia Saudí y sus aliados del Golfo.

El régimen de Ryad es el primer señalado por, según sus detractores dentro de la OPEP, desvirtuar uno de los principios de la organización: luchar por la estabilización de los precios y reducir la producción para aumentar el coste del petróleo.

Argelia, cuyos hidrocarburos suponen el 98 por ciento de sus exportaciones, ha levantado la voz de los críticos al intentar forzar una reunión de urgencia antes de la oficial, que se celebrará el 4 de diciembre. Desde la dirigencia de la OPEP se dejó claro que la situación no requiere ningún tratamiento de emergencia.

Arabia Saudí se opone pues a reducir la producción de petróleo, el arma siempre utilizada por la organización para aumentar los precios. Su fenomenal riqueza, acumulada durante décadas, le permite incluso perder dinero, en su lucha por mantener sus mercados, amenazados por su rival norteamericano.

Para algunos especialistas, Ryad no quire dejarse conquistar el terreno por el gas de esquisto producido en Estados Unidos, y haría todo lo posible para hundir ese nuevo hidrocarburo, en teoría, más caro de producir que el petróleo. Esos mismos especialistas señalan incluso que aunque los saudíes decidieran reducir la producción, desde Estados Unidos se lucharía por mantener bajos los precios del combustible, inundando los mercados con el gas de esquisto almacenado y aprovechando el avance tecnológico que ha provocado al abaratamiento del «fracking».

Una coyuntura internacional negativa

Los productores partidarios de aumentar el precio del petróleo deben contar con otros factores de la actualidad decepcionantes para sus intereses.

En primer lugar, el «frenazo de China» (batacazo de la bolsa de Shangai, devaluación del yuán…), el principal devorador de energía del planeta, que se ha puesto a dieta y ha generado un «shock» de consecuencias incalculables para la economía mundial, aunque ya calculables para la industria petrolera.

Para muchos mienbros de la OPEP tampoco es una buena noticia el levantamiento de las sanciones a Irán, tras el acuerdo sobre la producción nuclear de Teherán. En efecto, la República Islámica — miembro de la organización- vuelve al mercado del petróleo y colaborará a inundar un mercado ya hipersaturado, donde la demanda decrece proporcionalmente tres veces con relación a la oferta.

Irán vuelve al escenario internacional económico y político. Rival regional de Arabia Saudí en la guerra que se libran suníes y chiíes en el área, no podrá contar con la generosidad de Ryad, que impedirá por todos los medios que Irán se recupere gracias al maná negro con un aumento de los precios. Es más, expertos en el mercado del petróleo aseguran que el retorno al mercado de Irán provocará una bajada de 10 dólares por barril en 2016.

La Agencia Internacional de la Energía, considerada como la defensora de los intereses energéticos occidentales, estima también que la producción mundial de petróleo seguirá aumentando de manera «desenfrenada».

Malos augurios, pues, para los países miembros de la OPEP a los que la extracción de petróleo les cuesta ya casi más que su comercialización. Malas noticias también para los productores de crudo fuera de la OPEP, que ven sus economías afectadas por los bajos precios, pero que tampoco pueden frenar su producción, precísamente porque esas economías dependen en buena parte de la venta del crudo.

En esa guerra que se libran Estados Unidos y Arabia Saudí, también hay víctimas norteamericanas. Las grandes petroleras ya no pueden dormirse sobre su colchón de billetes. Exxon Mobil y Chevron han reducido sus beneficios en un 50 por ciento. La sexta de las grandes compañías, Sabine Oil and Gas, ha sucumbido en el campo de batalla. Las empresas que han invertido en el gas de esquisto empiezan a temblar…

Por supuesto, la interpretación política de esta crisis tiene también sus adeptos. Venezuela y Ecuador han denunciado esta situación como «una decisión de ejes imperiales». Mucho se ha insistido, también, sobre la intención de los Estados Unidos de utilizar la crisis del petróleo para intentar humillar a Rusia.

De aquí al 4 de diciembre, las maniobras y las declaraciones entre bambalinas sustituirán a las decisiones oficiales de la OPEP. Mientras tanto, solo hay algo seguro: el olor del excremento del diablo seguirá apestando.


(*) Periodista

El petróleo y el fin de los buenos tiempos / Hernán Terrazas *

La mayoría de los analistas económicos del mundo coincide en que deberá pasar por lo menos una década para que el precio del petróleo llegue  a los 90 o 100 dólares que mantenía a mediados del año pasado. Ésa es una muy mala noticia para los países productores de hidrocarburos y para las empresas petroleras, que durante casi una década vieron cómo crecían  y se multiplicaban sus ingresos.

Hoy las empresas han comenzado a aplicar estrategias de emergencia y los países productores a buscar fórmulas que les permitan compensar una significativa merma de sus recursos. 

Las compañias petroleras más fuertes han anunciado recortes en inversión y producción, además del despido de centenares de empleados. Mientras tanto, países como Venezuela, Ecuador e incluso Bolivia se han visto en la necesidad de reprogramar sus gastos en función de menores ingresos. 

Los países que habían formulado sus presupuestos en base a un precio del petróleo de 70 a 75 dólares, se han visto en la necesidad de elegir en qué rubros gastar menos, para que la austeridad no toque fibras sociales sensibles, que puedan derivar en consecuencias políticas.

En el tema del precio del petróleo  no hay mucha ciencia. Todo se reduce a un problema de oferta y demanda. En sólo seis años Estados Unidos duplicó su producción y dejó de comprar petróleo a proveedores como Arabia Saudi y Nigeria.  Desde entonces, estos países probaron suerte en el mercado asiático, pero con precios más bajos.

Si el incremento de la producción en Estados Unidos es una de las razones evidentes de la caída de precios, no los es menos, en el lado de la demanda,  el efecto de la crisis económica europea y el desarrollo de nuevas tecnologías en la industria automotriz para mejorar la eficiencia en el consumo de los nuevos vehículos. 

Y en este extremo del problema  debe mencionarse también la pérdida de dinamismo de la economía china, el principal importador de petróleo del planeta. Por ahora, los chinos están más preocupados por vender que por comprar y esta tendencia se mantendrá durante algún  tiempo.
¿Hay beneficiarios de la caída de los precios? Tal vez los consumidores de los países donde los precios no están subsidiados. En las naciones donde los subsidios son altos -Bolivia, Ecuador -, ese beneficio obviamente no se advierte.

Entre los perjudicados  se anotan los llamados petro-Estados. En América Latina, el país más afectado es Venezuela, aunque el origen de la mayor parte de sus problemas tiene que ver con la suma de manejo económico desastroso con caída de precios. 

Es distinta la situación de Ecuador, aunque la corrida de depósitos en el sistema financiero -3.000 millones de dólares en sólo seis meses- indica  que más temprano que tarde las consecuencias se van a sentir. El escudo de prosperidad ya no es tan firme y las tensiones podrían agudizarse hacia delante.

En Bolivia, Evo Morales y su equipo económico intentaron sin mucho éxito minimizar las consecuencias de la caída de precios del gas. Hoy se sabe que la arcas estatales dejarán de recibir 2.500 millones de dólares, alrededor de un 8% del PIB (30.000 millones de dólares) y que  ello ocasionará varias restas que podrían disminuir también el respaldo al llamado proceso de cambio.

El mismo Gobierno que nacionalizó los hidrocarburos hace nueve años y que luchó para evitar que el gas boliviano se venda en el mercado chileno, hoy hace malabarismos para incentivar y premiar la inversión extranjera  en este sector y no descarta la venta del combustible a Chile.  El problema es que será muy difícil recuperar la simpatía de los inversionistas, después de haberlos maltratado durante nueve años.

Y ahora, ¿quién podrá defendernos? Antes, los países integrantes de la OPEP actuaban en estas circunstancias para poner topes a la producción y regular el precio a su antojo. Hoy están divididos. Unos presionan para ello, pero la mayoría, incluidos Estados Unidos, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos prefieren dejar las cosas como están.

Los años que vienen serán muy difíciles. Nadie se atreve a pronosticar cuándo volverán los buenos tiempos. Frente a las inquietantes señales del oro negro, nada más paciencia y austeridad.

(*) Periodista boliviano

Soberanía y corrupción / Ramón Cotarelo *

Tiene razón Soraya Sáenz de Santamaría al decir que los jueces no entienden de fechas electorales. Obvio. Cumplen con su deber. Si la justicia se rigiera por las conveniencias electorales de este o aquel no sería justicia, ¿verdad? Sería un cachondeo. Y, como en España la justicia no es un cachondeo, su acción prosigue implacable contra la presunta corrupción institucional de CiU (aunque la tocada aquí parece sobre todo Convèrgencia)  con el fin de averiguar el alcance de los indicios delictivos que viene investigando, juzgar a los culpables, si los hay, y condenarlos, si lo merecen. Y así debe ser. Es preciso acabar con la corrupción en donde se dé, en Cataluña, en Madrid, en Andalucía. Caiga quien caiga.

Al mismo tiempo, no cabe olvidar que estamos en mitad de un torbellino político, quizá el más importante que ha habido en España desde la muerte de Franco, el que puede cambiar de verdad y para siempre la faz del país, aunque los nacionalistas españoles acaben de enterarse, y no ando muy cierto de que lo hayan hecho del todo. Y en estas circunstancias es de esperar que el debate político, habitualmente cálido en estos pagos, se ponga al rojo vivo. El rojo vivo real y no ese ñoño remedo televisivo. Se oirán muchos ex-abruptos, incluso barbaridades, de un lado y del otro. Pero no es motivo para enredarse o confundirse. Hagan los jueces en buena hora su trabajo con eficacia e independencia. Déseles toda la ayuda y el apoyo que precisen. La justicia es el eje esencial de toda comunidad política. Platón dedicó su obra más importante a este vínculo. Y así sigue hoy, casi 2.500 años después.

Salgamos, pues, del ámbito judicial, dejemos trabajar a los jueces y vayamos a la dimensión política del asunto. ¿Qué autoridad tiene el PP para reclamar la separación entre ambos campos? Nula, como todo el mundo sabe. La derecha, el gobierno, el PP, la señora Santamaría, no han colaborado jamás con la justicia cuando esta los investiga. Antes bien, la destrucción de pruebas de todo tipo, la negativa a atender y cumplir reiterados autos judiciales, el borrado de los discos duros barcénigos, etc., atestiguan lo contrario, esto es, que obstaculizan y entorpecen la acción de la justicia cuanto pueden e, incluso, si parecen colaborar, como cuando se personaron en la causa de los papeles de Bárcenas como acusación, lo hicieron para distorsionar el procedimiento y fue necesario expulsarlos. Como probablemente lo será otra vez con la nueva personación de la Comunidad de Madrid (PP) en el caso de la Púnica. Y esto sin entrar ya en terrenos más procelosos, como las maniobras para apartar unos jueces íntegros y poner otros más acomodaticios o de la propia cuerda.

Sin embargo, reconozcámoslo, este argumento, teñido del defecto "y tú más", no es válido del todo. No, no lo es, pero ayuda a hacerse una idea. Lo interesante es el argumento siguiente: frente a sus casos de corrupción, que son una pedrea cuya enumeración no cabría en el post, el PP insiste en que se trata de cuestiones aisladas que en nada afectan al partido en su conjunto, a su programa, su ideología (si es que tiene alguna) y su proyecto político, del que tampoco se sabe gran cosa. De hecho, ese mismo partido se presenta a las elecciones de diciembre sosteniendo que lleva una lucha titánica contra la corrupción que anida en su seno, igual que San Antonio luchaba contra la concupiscencia que lo asaltaba. Y presenta como candidato a Mariano Rajoy, sobre quien recaen fundadas acusaciones de haber estado cobrando sobresueldos y otras bicocas de procedencia dudosa y certidumbres de que ha mentido en repetidas ocasiones en el parlamento, en la televisión y en la calle.

¿Por qué, en cambio, los presuntos casos de corrupción que afectan a Convergència y no, por cierto, personalmente a Mas, han de debilitar o hacer fracasar el proceso soberanista en su conjunto? ¿Por qué no se liga corrupción y unidad de la España neoliberal y nacionalcatólica pero sí corrupción y soberanismo? Es patente que Juntos por el sí no es Convèrgencia, sino una "confluencia" de mucha más gente en principio limpia de polvo y paja. Por cierto, para quien sepa apreciar la finura florentina de la política de Mas, que sigue dando mil vueltas al zote de La Moncloa, ¿queda ya claro el misterio de por qué va el cuarto en la lista y no el primero? ¿Hay que explicarlo? Precisamente para desactivar esta supuesta "bomba" que ya preveía, esta amalgama para dinamitar el soberanismo.

Es igual. El unionismo, el nacionalismo español, creyendo victoriosa su estrategia del embudo, ha lanzado a sus portavoces a bombardear la plaza soberanista. Arranca alegre "El País" que, titula más con el deseo que con la luz de la razón, que La investigación de las comisiones del 3% fractura la lista unitaria. Y todos se hacen eco, hasta Pablo Iglesias, quien, encantado de mostrarse persona de orden y patriota, repite la falsa doctrina de que "soberanía y corrupción son incompatibles", doctrina falsa por partida doble: a) una general y de hecho, ya que hay Estados soberanos basados en la corrupción; por ejemplo, el suyo; b) otra particular y de juicio de intenciones, porque nadie en el soberanismo catalán, que se sepa, ha pretendido hacerlo compatible con la corrupción.

Está claro que, a falta de argumentos, el nacionalismo español de derechas, de centro, de izquierda y de izquierda/no izquierda, recurre al socorrido método de la amalgama, que los soberanistas califican de "juego sucio". Aunque pueda parecer paradójico, Palinuro está satisfecho con esta vía de contraataque a una emergencia independentista catalana que los unionistas no saben cómo contrarrestar. Peor sería que preparan algún tipo de intervención violenta o de provocación. Posibilidad que tampoco cabe ignorar sin más en una país cuyo ministro del Interior se reúne mano a mano con un presunto delincuente. De momento, al parecer, se ha limitado a avisar a las televisiones y periódicos afectos al régimen para que tuvieran tanto tiempo para preparar el "operativo mediático" como la Guardia Civil el suyo, es decir, ha movilizado su brigada de plumillas. Luego vendrán los tertulianos de estercolero.

Todo esto, sin embargo, aunque el nacionalismo español crea lo contrario, es agua pasada. El soberanismo catalán, el impulso independentista no depende ya de las candidaturas concretas, de las personas, de Juntos por el Sí y mucho menos de Convèrgencia. Es un movimiento de amplia base social, transversal, transideológico, transconfesional, con profundas raíces en todo el territorio y mucha fuerza fuera de él. De esta forma, quienes pretenden emplear los autos judiciales como armas políticas (diciendo lo contrario, por supuesto) en contra del independentismo, del secesionismo, demuestran una vez más su pasmosa cortedad mental porque, al hacerlo, han acabado agrupando las opciones en los dos bloques plebiscitarios que el independentismo quería y los unionistas pretendían evitar a toda costa: sí o no. Y el "sí" daba hoy contundente respuesta en la fiesta de "JpS". De este modo, la suerte está echada: el día 27 de septiembre se verá si la presunta corrupción de Convèrgencia resta votos al independentismo, como anhelan los nacionalistas españoles o, al contrario, fabrica más independentistas, como dicen los soberanistas. Parada y fonda para calibrarlo entre tanto será la Diada. 
 
Veremos quién gana. 
 
(*) Catedrático emérito de Ciencia Política en la UNED

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