martes, 3 de noviembre de 2015

Tras hacer un negocio, el obispo de Cartagena lo justifica por el aumento de vocaciones sacerdotales


MURCIA.- El aumento de vocaciones al sacerdocio ha sido uno de los detonantes por los que desde hace años el obispo de Cartagena quería adquirir un edificio propio para ubicar el Seminario Menor de San José, que en la actualidad comparte instalaciones con el Seminario Mayor San Fulgencio

Al conocer que las religiosas de Jesús María se marchaban de Santomera para unirse a la comunidad existente en Murcia, se convino con ellas la compra de su casa. “Para ellas ha sido un gozo enorme que la casa de Santomera fuera a tener un uso para la formación de los seminaristas”, asegura monseñor Lorca Planes.
La finca que las religiosas tenían en Santomera, y que en los últimos años había servido como residencia de las hermanas ancianas, será la nueva ubicación para la formación de los seminaristas menores, 37 en la actualidad: 12 viven en el Seminario en régimen interno y otros 25 acuden al Seminario un fin de semana cada quince días, en lo que se denomina Seminario en Familia.
Monseñor Lorca asegura que el seminario menor “no está pasado de moda” y espera que el tener instalaciones propias sea un aliciente más para aquellos jóvenes que están sintiendo la llamada al sacerdocio. A inicio de verano cerca de un centenar de jóvenes participaron en el campamento vocacional, un síntoma, según el obispo, lo que denota que hay un interés manifiesto de muchos jóvenes que necesitan discernir su vocación.
El rector del Seminario Menor San José, Sebastián Chico, destaca que este curso se utilizarán las nuevas instalaciones para convivencias, encuentros y retiros, mientras se va acondicionando el edificio para que pueda acoger, quizás para el próximo curso, de forma definitiva a los seminaristas menores de la actual Diócesis de Cartagena.
Ninguna de las partes ha hecho público el montante económico de la adquisición de la finca.

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