MURCIA.- El presidente del Consejo Social de la UMU, Javier Ruano, ha cedido ante el rector Orihuela y ha acudido
finalmente, esta tarde a las 17.30, al Claustro de la Universidad de
Murcia para dar explicaciones no reglamentarias sobre su voto favorable a la implantación
de nuevos grados en la UCAM, con el objetivo, según él, de evitar que se le acuse
de 'poca transparencia y de no dar la cara'.
Ruano comparece ante la representación de la comunidad
universitaria, pese a que el propio órgano consultivo que preside
rechazó esta misma mañana por nueve votos contra ocho de los miembros del Consejo Social que su asistencia fuera necesaria esta tarde.
Ruano, cuyo voto
era de calidad, se abstuvo en la votación por principio y para evitar un empate, se supone.
Los miembros en contra han argumentado que
el Consejo Social representa a la sociedad y no a la Universidad, y los
partidarios de que acudiera al Claustro consideraban que se trataría de
un acto de transparencia 'acorde con lo que se espera de este órgano'.
La comparecencia de Ruano ante el Claustro había sido demandada por sesenta
claustrales descontentos con la actuación del presidente del Consejo
Social, quienes consideran su apoyo a la universidad privada de la Fundación San Antonio contrario
a los intereses de la institución a la que está vinculado.
Los rectores
de las dos universidades públicas de la Región, UMU y UPCT, en cambio, votaron en el Consejo Interuniversitario contra la
puesta en marcha de los nuevos grados, y presentaron sendos informes
argumentando su oposición pese al placet de la ANECA.
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