MURCIA.- El responsable de Economía de IU-Verdes, José Antonio Pujante, ha acusado este miércoles al presidente de la Región de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, de mantener una actitud "sumisa y extremadamente obediente" ante las "imposiciones" del Ejecutivo central que afectan a los intereses generales de la ciudadanía de esta comunidad autónoma.
Pujante se ha referido en esta ocasión al techo de gasto con el
que contará el Ejecutivo regional en 2016, que ha calificado de
"insolvente" al entender que no recoge aspectos fundamentales que marcan
la situación de la Región y su capacidad de desarrollo económico y
social como la pobreza, las desigualdades sociales y el índice de
desempleo.
A su juicio, el hecho de que el Ejecutivo no tenga en
cuenta estos criterios para fijar el techo de gasto produce un "círculo
vicioso" porque no permite obtener los suficientes recursos para
impulsar políticas que atajen de forma efectiva la brecha de la pobreza y
el nivel de paro que afecta a esta comunidad, que se sitúa en torno al
25% de la población activa.
Además de la postura "nada
reivindicativa" del presidente del Gobierno autonómico, del que ha dicho
que "solo sabe ir a Madrid a los besamanos", Pujante ha denunciado el
"maltrato" que ha sufrido la comunidad "durante décadas" por parte del
Ejecutivo central en forma de recortes, así como el impago de la deuda
histórica, que ha cifrado en más de 4.200 millones de euros.
En
este sentido, ha recordado que IU-Verdes defendió en las últimas
legislaturas en la Asamblea regional una propuesta para el pago de la
deuda histórica en un plazo de 10 años, a razón de 420 millones de euros
al año, pero el PP "ha preferido seguir mirando hacia otro lado y no
exigir lo que le corresponde a la Región de Murcia".
Pujante
también ha explicado que la capacidad de recaudación de la comunidad
está limitada, además de por su situación económica y social, por el
fraude fiscal y las grandes bolsas de economía sumergida derivadas de la
falta de recursos económicos de la Administración autonómica y su
"incapacidad" para poner en marcha políticas que atajen este problema.
Por último, ha insistido en que por encima de la "nula voluntad" del
gobierno del Partido Popular a nivel nacional para compensar a la Región
se encuentra su "supeditación" a los "dictados de la troika", centrados
en "salvar a la banca en lugar de dar cobertura a las necesidades de
las personas, que debería ser el objetivo número uno".
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