Meses llevan esperando muchos murcianos de bien que el Papa Francisco actúe respecto a la llamada, comercialmente, 'Universidad Católica de Murcia' sin ser algo la Fundación 'San Antonio' (tapadera blanda para un negocio puro y duro) que tenga que ver orgánicamente con la Diócesis de Cartagena, la Nunciatura Apostólica en Madrid ni siquiera el mismo Vaticano.
Ergo, la marca induce a error a crédulos padres con hijos sin nota suficiente para pasar la selectividad o un intelecto perezoso a asistir con dinero como último recurso en busca de papel que no excelencia. Porque la UCAM no es Navarra ni la Pontificia de Comillas o Salamanca. Ni de lejos. Que Mendoza ejerza de verdadero rector en la sombra con la cobertura de un 'florero' de Cuenca, lo dice todo sobre el fiasco sin atajar. Lo que sufre, en definitiva, es la falsa denominación de una empresa porque su naturaleza principal no es la que dice ser, en todo caso accesoria.
Hace unos meses, un análogo de Mendoza en un país sudamericano, creo recordar que Perú, fue destituido fulminantemente pese a la complicidad con un reaccionario cardenal del país. Supongo que monseñor Lorca Planes, el gran cómplice actual de este más que opaco sujeto valenciano (que no de Cartagena como él da a entender para inducir a error) y con un pasado a investigar a fondo por los demócratas murcianos, incluido su paso por la República Dominicana y diversos gimnasios de la Región en los años 70-80 (?), tiene menos fuerza en Roma que un cardenal. O que Rouco y Cañizares juntos porque ambos forman ya parte del pasado reiteradamente desautorizado por Francisco, que si supiera toda la verdad vital sobre Mendoza actuaría de inmediato para que no siga usurpando.
Esta pelota murciana está precisamente en el tejado de Francisco ya que la Fiscalía del TSJ nunca se ha atrevido a actuar de oficio para poner fin a este vodevil de tercera convertido en pesadilla y que ahora trata de capitalizar y condicionar el cartel de la temporada de comedias algo mejores, pero muy poco más, que lo representado en Guadalupe para un público más cerca de lo que llaman en Gran Bretaña 'los comunes' y con una oferta muy a su medida moral, vista la derrota seguida por este centro con algunas pasarelas y atajos hasta rozar una nueva y moderna simonía del 2x1. Puro marketing en la línea de 'Mercadona' o 'Carrefour' para entender mejor la naturaleza de este extraño fenómeno 'académico', con técnicas de continua oferta, como fórmula de fuga hacia delante cuando los tiempos no son propicios para sostener la demanda ordinaria.
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