PARÍS.- El Gobierno francés
intenta hoy desbloquear la crisis porcina acelerada la semana pasada,
cuando el mercado de Plérin, que sirve de referencia para Francia y
mueve el 12,5 % del porcino galo, suspendió las cotizaciones por su
desacuerdo con el precio fijado.
El ministro de Agricultura y portavoz gubernamental, Stéphane Le
Foll, mantendrá hoy una primera reunión con el presidente, François
Hollande, antes de participar en una mesa redonda en la que se
encontrará con productores e industriales.
El pulso contra el Gobierno lo encabezan las dos principales cárnicas
francesas, Cooperl y Bigard/Socopa, que la semana pasada no
participaron en la compra de carne en ese mercado bretón al estimar que
el precio marcado en julio por el Ejecutivo, 1,40 euros por kilo, no les
permite ser competitivas a escala europea.
La cita de este lunes busca reactivar la actividad con urgencia, y
dejará para finales de agosto un análisis más exhaustivo sobre las
reformas estructurales de la filial.
Le Foll ya advirtió la semana pasada de que "cada uno tiene una parte
de responsabilidad", y que no habrá solución si no se lleva a cabo "un
trabajo conjunto sobre la cotización, la organización del sector y los
grandes retos a nivel mundial y europeo".
Xavier Beulin, presidente de la Federación Nacional de Sindicatos de
Explotaciones Agrícolas (FNSEA), el principal sindicato sectorial de
Francia, insistió hoy en que el ministro debe comprometerse a encontrar
una respuesta a nivel europeo.
"La Comisión Europea tiene medios, tanto jurídicos como financieros,
para intervenir en caso de crisis, y la crisis es profunda", apuntó en
la cadena "France 2", donde atribuyó una de las razones al veto ruso a
determinadas producciones agroalimentarias procedentes de la Unión
Europea.
A largo plazo, el Gobierno francés aspira a promover mayores ventajas
competitivas y a automatizar los mataderos para dotar de dinamismo a la
organización colectiva, y ha prometido ya cinco millones de euros para
ayudar a las empresas a vender sus cerdos en el extranjero a través de
una plataforma común.
El conservador Thierry Mariani, ex ministro de Transporte, criticó
hoy en la emisora "RTL" que el Ejecutivo socialista se haya visto
"sobrepasado" por la situación, no haya anticipado la amplitud de la
crisis, y la haya agravado por la, a su juicio, falta de reacción.
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