jueves, 28 de mayo de 2015

Consecuencias de la improvisación y la cerrazón / Apunte de Argárico

Albert Rivera tiene ya un problema con Murcia y en Murcia un problema. Es decir, dos problemas. Alguno lo ha utilizado aquí para ser diputado o concejal y, a partir de ahí, si te he visto no me acuerdo. A este paso, Ciudadanos casi no existirá cuando se convoquen elecciones generales y lleva camino de correr la misma suerte que UPyD, con el handicap añadido de que desde Barcelona no se puede y, como hemos visto, tampoco se sabe, articular un partido nacional para toda España, ahora bajo la dirección de gente menor de 40 años, porque hoy albergan esas generaciones grandes insuficiencias en comparación con quienes pilotaron la Transición en 1978, por ejemplo.

Sustanciada, al parecer a golpe de talonario, la estabilidad institucional en la Asamblea Regional y el Ayuntamiento de Murcia, lo de Lorca resulta ya más fácil y menos gravoso, y lo de Cartagena es cuestión de quitar de enmedio a la ex alcaldesa Pilar Barreiro - quien anunciará en las próximas horas su renuncia a ser concejal- para que el Movimiento Ciudadano (partido de derechas donde los haya por estar detrás empresarios cartageneros de relieve) y el PP se puedan entender rápido ante la aversión del concejal José López al PSOE de la burócrata tipo Pepiño, Belén Castejón, y los indocumentados, políticamente se entiende, de 'Cartagena Sí Se Puede', que no puede controlar siquiera la dirección regional de Podemos, hasta el relativo fracaso electoral cosechado por tres 'donnadies' y la eurodiputada cartagenera, Lola Sánchez, su gran mentora.

'Cartagena Sí Se Puede', la agrupación electoral apoyada por Podemos, ha indicado hoy que su intención es impedir que el PP pueda gobernar ahora la ciudad tras las elecciones. Esta agrupación de electores, que ha entrado como quinta fuerza política en el Ayuntamiento de Cartagena con algo menos de 10.000 votos (11,37 por ciento del total) y tres concejales, se ha manifestado así en en relación con los posibles pactos para acceder a la alcaldía, no consciente todavía de su falta de fuerza por deficiente prestigio social de su lista.

Lo de gobiernos de izquierdas en los núcleos de verdadero poder político de la Región va a ser que no debido a la capacidad de reacción estratégica de Ramón Luis Valcárcel, que ha sabido maniobrar a tiempo de forma certera y más que rápida para conjurar el peligro de un vuelco en las instituciones más representativas del territorio. Así, el PP gobernará en Murcia, Cartagena y Lorca, amén de San Esteban con Sánchez (si no lo imputan finalmente) o con Bernabé, candidato éste último auspiciado por el empresario Alfonso García (verdadero dueño de Portmán) y con definitivos apoyos locales en Ciudadanos - como el diputado autonómico electo Miguel López Moral- fuera del control del propio Rivera por estar planificados desde fuera mucho antes de la convocatoria electoral.

La izquierda murciana es así incapaz de superarse a si misma y conformar gobiernos progresistas en la Asamblea Regional y los tres principales ayuntamientos. Al candidato socialista no lo tragan ni los de Ciudadanos, Podemos o Cambiar Murcia/Ganar la Región. Es, por tanto, Tovar un imposible evidente, además de perdedor histórico, al que no consideran una opción quienes podían auparlo a San Esteban a través de un tripartito a partir del 'Pacto del Moneo' que, como bien se ve ahora, no ha servido absolutamente para nada práctico excepto para mayor gloria y vanidad de su ideólogo el 'Rasputín de Altorreal', que va de sabelotodo en política desde su más que triste licenciatura universitaria local en naderías de andar por casa mientras otros de su Facultad cardan la lana sin alharacas al tener mucho más mundo y ser tan golfos como su amigo Alonso, amigo del alma por supuesto. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Deja que se descubra el paso de la familia por el Club Naútico de Los Nietos, cuñado y hermano especialmente...