MURCIA.- El candidato comunista de Ganar la Región de Murcia a la presidencia de la Comunidad Autónoma, José Antonio Pujante, ha afirmado que él no quiere hablar de pactos postelectorales "ni de sillones", sino que su intención es hablar de su programa electoral y se ha mostrado dispuesto, en todo caso, a pactar "cosas concretas".
Por ejemplo, Ganar la Región de Murcia, coalición que integra a
IU-Verdes, Alternativa Socialista y a personas independientes, no
tendría inconveniente en pactar "cosas concretas" como "una banca
pública autonómica, la defensa de la Sanidad o de la Educación pública
y, por tanto, el rechazo a los contratos que se realizan para
externalizar y privatizar servicios públicos".
Asimismo, se ha
mostrado dispuesto a pactar aspectos como la Renta Básica de Inserción y
su dotación económica para garantizarla a todos los murcianos que la
necesiten; y también está dispuesto a pactar "que no haya ni un solo
desahucio de ninguna familia de la Región por el simple hecho de no
tener recursos para pagar la vivienda".
Pujante ha considerado que un buen resultado
en las elecciones autonómicas del próximo mes de mayo sería "ganar,
mejorar los resultados de las últimas elecciones y que el PP perdiese la
mayoría absoluta o que no ganase". Asimismo, cree que se daría un buen
resultado si "se pudiera conformar una mayoría parlamentaria alternativa
a la que representa el PP".
Sea como sea, lo fundamental para
Ganar la Región de Murcia es defender sus ideas y propuestas
programáticas que, además, son "realistas y no son cartas a los Reyes
Magos, sino que están cuantificadas económicamente y se pueden
realizar", según ha defendido Pujante.
Al ser preguntado por
posibles alianzas tras las elecciones, Pujante ha aclarado que su
intención no es hablar de pactos, sino que él quiere hablar de programas
electorales. "No queremos sillones, queremos transformar la realidad de
la Región de Murcia, ya que el poder no es para estar sirviendo
cómodamente a los poderes económicos que hay en la Región y que manejan
al PP como si fueran marionetas".
No obstante, ha insistido en que
no irá con el PP "ni a misa", ya que este partido "necesita no solo ir a
la oposición, sino un proceso de refundación o de autodisolución para
crear una nueva formación política de derechas que sea homologable a los
partidos demócrata-cristianos o de centro-derecha de los países más
avanzados de la UE, donde los casos de corrupción sean algo residual y
se asuman las responsabilidades sin ningún tipo de complejos".
Al
ser preguntado por la situación de fragmentación de la izquierda
política, Pujante ha matizado que Podemos "dice no ser ni de izquierdas
ni de derechas", por lo que "no están dentro del espectro sociológico de
la izquierda", sino que están, en todo caso, en un "limbo en el que
utilizan los esquemas de arriba y de abajo".
Por contra, ha
explicado que en Ganar la Región de Murcia "somos de izquierdas" y no
huyen de la lógica de "arriba y abajo", pero ha asegurado que "estamos
con los de abajo: estamos con los trabajadores y trabajadoras, con las
personas desahuciadas, con los parados que no tienen prestación por
desempleo, con las personas que están en situación de pobreza y con
aquellas personas que defienden los servicios públicos".
Pujante
define Ganar la Región de Murcia como un partido de "izquierdas" no solo
por definición, sino porque "si acudimos a nuestro programa electoral
se puede constatar que defendemos posiciones nítidas y claramente de
izquierdas".
Puntualiza que estas políticas "se diferencian de las
del PSOE, que también dice ser de izquierdas, pero por decirlo no se es
de izquierdas, sino que se es de izquierdas por el contenido, no por el
continente".
Ha recordado que los integrantes de Ganar la Región
de Murcia "nos hemos opuesto a la reforma del artículo 135 de la
Constitución española, que propició el PSOE y que votó a favor el PP;
estamos en contra del tratado de libre comercio que se está negociando
con Estados Unidos y que puede perjudicar a los intereses de la Región
de Murcia y de España, mientras que el PP y el PSOE lo apoyan".
"Nosotros
estuvimos en contra del Tratado de Maastricht y el PSOE está a favor;
nosotros estuvimos en contra de las dos reformas laborales, tanto la que
hizo el PP como la que hizo anteriormente el PSOE contestada por los
sindicatos, y eso son políticas de derechas", ha afirmado.
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