MURCIA.- El Museo Salzillo expone de forma permanente los paños de la
Verónica realizados por Domingo Valdivieso, del siglo XIX, el de Manuel
Muñoz Barberán (S.XX) y el de Pedro Cano (S.XXI), coincidiendo con la
celebración del 260º aniversario de la realización de la Santa Mujer
Verónica para la Cofradía de Jesús por el escultor Francisco Salzillo.
La
idea es que unas obras "de esta envergadura", que se encuentran en el
interior de unas vitrinas con la luz y humedad medidas para evitar
perjudicarlos, "se puedan disfrutar durante los 365 días del año".
"El
año que vuelvan a procesionar cualquier de ellos, solo hay que abrir
esas urnas y volverlos a sacar, sin ningún problema", ha acentuado Gómez
Fayrén.
Aunque, ha aclarado, el paño de Valdivieso (en la imagen), que fue
sometido a un proceso "complicadísimo" de restauración, "no puede salir
con la luz y el sol que hay en Murcia en la mañana de Salzillo",
mientras los otros dos, "muchos más recientes", pueden procesionar "en
cualquier momento" de nuevo.
La Cofradía, ha proseguido su
presidente, Antonio Gómez Fayrén, atesora 17 paños, escogiendo para esta
exposición permanente en el Museo tres de los que, a su juicio,
"Salzillo estaría orgulloso", siendo una lástima "que no se conserve
ninguno del Siglo XVIII".
Pero con esta representación, ha
insistido, Salzillo celebraría "como los pintores de Murcia han sabido
interpretar lo que él quería para la figura de la Verónica".
Este
año está previsto que la figura de la Verónica salga en procesión con el
paño de Francisco Cánovas, de 1998, "que se expondrá próximamente para
que pueda ser contemplado también antes de la mañana del Viernes Santo",
ha avanzado Gómez Fayrén.
En el acto de presentación Pedro Cano,
que ha contado que hubiera dado dinero por hacer el paño "porque para mí
era un orgullo", ha afirmado que no fue un momento fácil y que estuvo
mucho tiempo preparándolo, "dibujé parte de las imágenes de Jesús que
hay en el Museo, menzclándolo, a partir de todos ellos, con la gente de
la calle para que tuviese una relación con el dolor o la dificultad".
Cano
ha mostrado, de tal forma, su alegría por estar presente en esta
exposición, ya que "estoy con dos compañeros de fatiga muy importantes".
Tras
lo que ha pedido a la Comunidad Autónoma o al Ayuntamiento "tener la
fuerza" para poder hacer una gran exposición del trabajo de Muñoz
Barberán, que era "como una especie de padre espiritual"; un pintor "que
contó algo de nuestra ciudad, costumbres e historias, que no ha pintado
ninguno". Así, según Cano, "se hará justicia" a este pintor
"importantísimo".
Al acto también han acudido la viuda y la hija
de Muñoz Barberán, Fuensanta Clares y Fuensanta Muñoz Clares, quienes
han asegurado, emocionadas, que el pintor se sentía "muy orgulloso" del
paño, "fue todo un honor". Así como representantes del Ayuntamiento de
Mazarrón, de donde era oriundo Valdivieso, la camarera de la Verónica,
María Angeles Servet, viuda de Fontes y representantes de la Cofradía.
El
concejal Cultura de Mazarrón, Ginés Campillo, ha destacado, por su
parte, el trabajo de Valdivieso, del que el Consistorio hizo una
exposición en 2013, "un pintor muy querido y admirado, no solo en
Mazarrón, y que se merece estar en un lugar expuesto, como es el caso,
junto a Muñoz Barberán y Pedro Cano".
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