MADRID.- La Región de Murcia es una de las comunidades autónomas españolas que sufre más las consecuencias de la crisis, al tener una renta per cápita baja, limitada dotación de capital humano y bajo nivel de industrialización, lo que provoca "un mayor deterioro" en el índice de pobreza económica y en el de desarrollo humano (que combina indicadores como salud, educación y bienestar).
El último numero de Papeles de Economía Española, editado
por la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) y dedicado a la economía de
las regiones españolas durante la crisis, pone de manifiesto que el PIB
regional ha descendido desde 2008 un 7%, que la tasa de destrucción de
empleo ha bajado un 21% y que el paro ha pasado del 10 al 29%.
Según Funcas, Murcia suele sufrir oscilaciones cíclicas
"más acusadas que las demás regiones", y propone políticas específicas
para sus "debilidades estructurales", entre las que cita la baja renta
per cápita, que está "entre las más bajas del país"; el menor nivel de
industrialización o la limitada dotación de capital humano.
El informe de la organización de cajas de ahorro también
pone de manifiesto que "las consecuencias de la crisis se dejaron notar
con más crudeza en el mercado de trabajo, situando a Murcia entre las
regiones con más destrucción de empleo y mayor tasa de paro", así como
que la Comunidad tiene la población activa con niveles educativos más
bajos del país.
Por contra, según Funcas, las políticas de estímulo a los
emprendedores sitúan a Murcia entre las regiones con mayor impacto en la
reducción del desempleo, sobre todo en la conversión de asalariados en
autónomos.
Con respecto al índice de desarrollo humano, en el que se
combinan indicadores de salud, educación y bienestar material, Funcas
señala que, antes de la crisis, Murcia estaba por debajo de la media
nacional y que ahora es una de las regiones que sufre "un mayor
deterioro" en estos indicadores por "un fuerte caída de la renta y el
gasto de las familias, y por un importante crecimiento de la
desigualdad".
"Murcia ha experimentado en el periodo de crisis un gran
deterioro en el índice de pobreza económica, hasta situarse entre las
regiones con peores registros, tanto por la ampliación de la brecha de
pobreza como por la intensidad con que se manifiesta el desempleo de
larga duración", reitera el informe.
Junto a Murcia, la Comunidad Valenciana, Andalucía y
Castilla-La Mancha han sido las comunidades más castigadas por la
crisis, mientras que el País Vasco, Madrid, Navarra y Castilla y León,
han sido las menos perjudicadas
El estudio señala que la crisis apenas ha afectado a la
ordenación de las regiones por renta per cápita. Así, País Vasco,
Madrid, Navarra, Cataluña, Aragón y La Rioja son las que tienen mayor
nivel de renta por habitante, y Extremadura, Andalucía, Melilla,
Castilla-La Mancha y Murcia, las que menos.
Asimismo, el informe apunta que sólo seis comunidades (Cantabria,
Castilla-La Mancha, La Rioja, Asturias y Andalucía) han registrado
incrementos en el índice de desarrollo humano entre 2006 y 2011, frente
al resto, que ha experimentado retrocesos.
Finalmente, el índice de pobreza material se redujo únicamente en
Extremadura, País Vasco, Castilla-La Mancha, Castilla y León y Asturias
entre 2008 y 2011, mientras que la media nacional del indicador de
pobreza económica se ha disparado un 138% en el mismo periodo.
El coordinador del estudio, Eduardo Bandrés, ha destacado que el
factor territorial "es un factor relevante que explica las diferencias
entre las comunidades autónomas", y ha señalado que las condiciones de
partida entre ellas no eran las mismas y las políticas impulsadas no
tiene los mismos efectos.
En concreto, Bandrés ha explicado que aquellas regiones que tienen
más sincronía con el conjunto de la economía nacional son las que mejor
han transitado por los años de crisis. Por el contrario, hay otras que
tienen problemas estructurales de fondo que requerirían un tratamiento
singular y un tipo de políticas algo más complementarias.
De la misma forma, Bandrés ha subrayado la relación positiva entre
educación y empleo y ha recalcado que "allí donde hay mejores
dotaciones de educación hay más probabilidad de participar en el mercado
de trabajo, de encontrar empleo e incluso de tener un salario más
alto".
Por su parte, el director general de Funcas, Carlos Ocaña, ha
expresado que la salida de la crisis será diversificada y no habrá un
único sector que actúe como sector milagro que lidere la recuperación,
sino que habrá toda una variedad de acciones y de sectores que tiren de
la economía, y de distintas políticas públicas que ayuden a esta
recuperación.
Preguntado por los efectos que tendría una supuesta escisión de
Cataluña, Bandrés ha argumentado que existirían efectos "muy negativos"
sobre la economía catalana y la economía española".
"Vivimos en un mundo
global con mercados interrelacionados y cualquier 'shock' de esta
naturaleza política tiene un impacto económico indudable y siembre
negativo", ha explicado.
Con respecto a este tema, Ocaña ha señalado que "hasta ahora no se
aprecia un impacto por este debate, pero es verdad que la incertidumbre
no ayuda y es conveniente que estas cuestiones se aclaren y se disipen
cuanto antes".