sábado, 29 de noviembre de 2014

El juez Castillejos prolonga la 'agonía política' de Cámara / Vera Mª Cubí

El alcalde de Murcia es un jugador de póker, y bueno, aunque aquí juega con las cartas marcadas. Sabiendo de hace meses lo que piensa Génova 13 sobre los imputados y las listas, igual que Valcárcel, ha aguantado el tirón de adversarios en torno suyo, hasta que oficialmente se ha pronunciado el PP. Mientras no se formalice una acusación concreta, con apertura de juicio oral, el alcalde de Murcia puede ser candidato de su partido por sexta vez al cargo que ocupa. Y tanta prórroga del secreto de sumario, solo indica que, todavía a estas alturas, no es tan sencillo presentar cargos, al menos que existan inesperadas cartas guardadas bajo las puñetas del juez Castillejos.

Hace semanas recibía Cámara el apoyo público de otra imputada, María Dolores de Cospedal, todopoderosa secretaria general de su partido, con motivo de la Intermunicipal celebrada en Murcia. Y aunque no la explicitó públicamente el interesado, también tiene la de Antonio Sánchez Carrillo, presidente del Comité Electoral Regional del PPRM, en última instancia quien elabora materialmente las listas y controla a los apoderados que las presentan en las Juntas Electorales de Zona, incluso con un poder específico por encima de Valcárcel. La sintonía entre ambos no puede ser mejor y siempre la ha sido porque 'el candidato' de Sánchez Carrillo es Cámara y no tiene quien le guste más. Aunque a Génova 13 ha llegado desde amplios sectores internos descontentos el siguiente mensaje: “Hay presidentes provinciales que llevan siglos y manejan las listas electorales a su antojo”, lo que sustrae credibilidad porque no favorece la urgente por necesaria renovación, añaden.

Item más: aquí la empresa a la que supuestamente ha podido favorecer Cámara de alguna manera es, ni más ni menos, que el Grupo 'Santa Mónica', un entramado societario de negocios, absolutamente imbricado con el PP nacional y de Madrid, como bien es sabido, por lo que el todavía alcalde de Murcia ha jugado en casa y, eventualmente, favoreciendo los intereses económicos del partido político al que siempre ha pertenecido. Las palabras de Cospedal el otro día en Murcia y el cerrado apoyo 'de facto' de Génova 13 desde siempre, sólo se explica así frente a la diferente vara de medir a la cercana alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo que, si ha beneficiado a alguien, parece ser que ha sido a 'Ortíz e Hijos', la empresa de un amigo de allí, y nunca a la voraz estructura del PP nacional, provincial o regional. Cámara es un trapecista siempre con red.

En ese fregado está metido sin quererlo el juez Castillejos, que tiene abierta una vasta y compleja investigación sobre las presuntas andanzas y pitanzas del alcalde Cámara sobre la base de la recalificación urbanística de la zona norte del municipio, con los escasos medios de que dispone pese a los últimos refuerzos. El fiscal quiere saber y el magistrado tiene que contestarle. Y ahí están las diligencias previas eternizadas por las comprobaciones pedidas y en marcha, también por la acusación particular personada en nombre de colectivos sociales interesados. Imagino que habrá un límite de tiempo para tener que pronunciarse en uno u otro sentido porque el procedimiento ahora veo claro que favorece, en este caso concreto, al imputado. Hay moribundos que vuelven con fuerza a la vida por circunstancias que, a veces, no se aciertan a ver o a adivinar.

Sin quererlo, estoy segura, Castillejos está prolongando una agonía política reversible que, de no concluir en el primer trimestre del año, terminará favoreciendo políticamente a un alcalde de Murcia, que muchos ven desde hace meses erróneamente como un cadáver político, para que vuelva a ser el candidato, sabida la opinión de Rajoy de que es mejor repetir con los que ya están. Así que lo del cadáver me parece que tiene que ver más con la ansiedad de jóvenes aspirantes internos a sucederle que con una realidad tangente. Sin embargo, algo saben esos traidorzuelos porque, en el último Pleno del Ayuntamiento, impidieron que saliese adelante la moción de UPyD para que los imputados no fuesen en las listas en el municipio de la capital.

En muchos sitios de España (no sé si la Región de Murcia es también el caso) el PP se encuentra con dificultades para que actuales alcaldes o ex candidatos a la alcaldía, libres de toda sospecha, quieran repetir en 2015 por la mala imagen pública que está dejando sobre el partido la corrupción, aparte de los pésimos datos demoscópicos que maneja el propio PP mes a mes. En Génova 13 se admite la mella que la conocida como 'Operación Púnica' ha producido, aparte de haber sembrado muchas dudas en las propias filas a nivel local y autonómico. En el PP de Cartagena, por poner un ejemplo cercano, la desazón es enorme. No así en Lorca.

Si el magistrado Castillejos sigue prolongando la agonía política de Cámara y lo mantiene como imputado, con prórrogas sucesivas sobre el secreto sumarial, sin abrir juicio oral y el alcalde de Murcia acusado de cargos muy concretos, yo no dudo que terminará siendo de nuevo el cartel electoral porque nada interior de su partido se lo impediría y los votantes fieles o cautivos por clientelismo no encontrarían tampoco argumentos y motivos para no elegir la papeleta del PP en el colegio electoral y depositarla en la urna si la encabeza Cámara Botía, Miguel Ángel.

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