CARTAGENA.- La Policía Nacional detuvo hoy en Cartagena, cerca de siete meses después, a seis agentes del Cuerpo presuntamente vinculados con el asesinato de un hombre el pasado mes de marzo. Se trataría del vecino de la barriada 'Virgen de la Caridad', más conocida como Las Seiscientas, Diego Pérez Tomás, de 43 años, cuyo cuerpo fue hallado flotando en Cala Cortina con lesiones en la cabeza, tras quince días desaparecido.
Los arrestos se producen en el marco de la investigación abierta por la propia Policía, en colaboración con Asuntos Internos, para esclarecer la desaparición y posterior hallazgo del cadáver de esta persona, cuyo cuerpo apareció flotando en el mar con claras evidencias de violencia 'ante mortem'.
Al parecer, el propio desaparecido llamó días antes a la Policía Nacional para alertar que algunos vecinos le estaban amenazando, según se confirmó en fuentes policiales. Al lugar se desplazó una patrulla de la Policía Nacional que encontró al hombre en su domicilio, nervioso y excitado, pero no encontraron a ningún vecino ni a ninguna persona por los alrededores, por lo que los agentes se retiraron y continuaron su servicio ordinario.
A partir de ese momento, el hombre, que vivía solo en su domicilio y no tenía pareja, desapareció. El último en verlo fue un vecino, que relató que el individuo se encontraba "muy excitado" y portaba una manta que, posteriormente, fue encontrada en los alrededores del edificio en el que vivía.
Los policías nacionales ahora detenidos pudieron extralimitarse con la víctima, según informaron fuentes de la investigación. Todos los agentes arrestados pertenecen a la escala básica y están destinados en la misma unidad de patrullas zeta, y en el mismo turno de trabajo.
Las fuentes consultadas creen que a los policías "se les pudo ir la mano", lo que previsiblemente causó la muerte del hombre, que había desaparecido de su domicilio varios días antes de que su cuerpo apareciera flotando en Cala Cortina.
Desde su arresto, los policías se encuentran incomunicados y separados entre ellos. La mayoría de los arrestados fueron trasladados hoy mismo a dependencias de la Jefatura Superior, en Murcia.
Las mismas fuentes indican que los investigadores trabajaron sobre una pista que situaba al fallecido aún con vida en el interior de un 'zeta'. De hecho, la investigación fue abierta por la propia Policía, en colaboración con Asuntos Internos. Los agentes de Asuntos Internos establecieron varios elementos de escucha en los 'zetas' en el marco de la investigación.
El pasado 13 de marzo un familiar de la víctima, con quien convivía en el mismo domicilio, denunció que el desaparecido había salido de casa dos días antes y que desde entonces no había vuelto a tener noticias de él. Su cadáver fue finalmente localizado varios días después flotando en el mar, cerca de la bocana de la dársena portuaria cartagenera.
La familia llegó incluso a difundir por Cartagena carteles sobre la desaparición de su allegado en busca de pistas sobre su paradero.
El cadáver de Diego Pérez Tomás, encontrado el pasado 25 de marzo flotando cerca de Cala Cortina, llevaba al menos diez días en el mar. El cuerpo fue encontrado después de doce desaparecido oficialmente. Concretamente fue el 13 de marzo cuando su familia presentó la denuncia en la Comisaría de Cartagena después de que transcurriesen 24 horas sin tener noticias suyas, según ha relatado ahora su hermano, Enrique Pérez Tomás.
"Nos dieron 24 horas para ponerla y cuando transcurrieron nos llamaron diciendo que ya podíamos ponerla porque le estaban buscando y no le encontraban", ha dicho.
Al menos diez días de todo ese tiempo estuvo el cuerpo en el agua. La Dirección General de la Policía ha añadido este lunes en una nota de prensa que el cuerpo presentaba signos de haber sufrido un trato violento antes de morir.
El día que apareció su cadáver, la Policía Nacional informó de que habría que esperar a una serie de resultados, que podrían tardar días o semanas, para conocer la causa de su muerte.
La investigación policial se está realizando por parte de agentes de la Brigada Local de Policía Judicial de Cartagena , de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Murcia, junto a la Unidad de Asuntos Internos de la Dirección Adjunta Operativa de la Policía Nacional.
Hace unos días, la Unión Federal de Policía (UFP) interpuso en el juzgado de guardia de Cartagena una denuncia por la presunta instalación ilegal de sistemas de escucha y grabación ocultos en tres coches patrulla de la Comisaría.
Hace unos días, la Unión Federal de Policía (UFP) interpuso en el juzgado de guardia de Cartagena una denuncia por la presunta instalación ilegal de sistemas de escucha y grabación ocultos en tres coches patrulla de la Comisaría.
El Juzgado de Instrucción nº 4 de Cartagena ha declarado el secreto de las actuaciones.
Sorpresa en su familia
Enrique Pérez Tomás, hermano del fallecido, ha manifestado su "fuerte sorpresa" tras conocer la noticia de que seis agentes de la Policía Nacional han sido detenidos este lunes por su presunta relación con la muerte de Diego.
"La sorpresa ha sido muy fuerte, es increíble, es increíble, increíble", ha dicho. "Ni remotamente podría haber pensado esto", ha añadido.
Según ha recordado, la última vez que vio a su hermano fue en la cafetería que regenta. Fue a verle a su puesto de trabajo y después nunca más le volvió a ver. "Confíe en ellos (la Policía) y mira", ha dicho, al tiempo que ha recordado que cuando preguntaba por su hermano desaparecido un policía le dijo que "podría estar por otro pueblo llamado Los Mateos".
Según dice, tras enterarse de la noticia, ha llamado a la Comisaría, pero no ha recibido información. "Me han dicho que por el momento no pueden decir nada".
Preguntado acerca de si algún vecino vio algo, responde que "nadie vio nada. Todos callados".
"Yo pensaba que había sido un vecino. Tenía un problema con un vecino, yo le he acusado y el pueblo muchas veces le ha acusado a ese vecino de que había sido él", ha zanjado.
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