MULA.- Si la lluvia no lo vuelve a impedir, mañana domingo la talla del Niño de Mula, ahora y durante la última semana en el Monasterio de La Encarnación, su residencia en Mula cuando lo bajan al pueblo, volverá en romería definitivamente a su ermita en la huerta del Balate, lugar de su primera aparición al luego franciscano Fray Pedro de Jesús Botía en el siglo XVII, durante su juventud y mientras huía de una fuerte epidemia de peste.
La Cofradía del Niño Jesús de Belén decidió el pasado lunes suspender la tradicional romería anual ante el adverso pronóstico del tiempo atmósferico en la comarca del Río Mula y vecinas del Noroeste y Vega Media del Segura, lo que frustró a muchos fieles que sí acudieron a las inmediaciones del paraje donde se produjo en su día la Aparición.
Desde ese día, la talla del 'Niño de Mula' se encuentra expuesta al culto y adoración de los creyentes en el altar mayor del Monasterio de La Encarnación, fundado al final de sus días por Fray Pedro de Jesús y regentado desde siempre por las monjas clarisas.
El día anterior, 21 de septiembre, se había celebrado la festividad del 'Niño de Mula' con gran afluencia de fieles a la procesión entre la iglesia de Santo Domingo de Guzmán y el Monasterio de La Encarnación, a la que acudió el presidente de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, el abogado Alberto Garre, del PP.
Aunque el pronóstico del tiempo para mañana domingo es similar al del pasado lunes o, incluso, peor, de momento se mantiene el plan inicial de celebrar la romería en un segundo intento aunque si no hubiese unas garantías mínimas mañana a primera hora, se dejaría para el próximo domingo 5 de octubre tras la festividad de San Francisco de Asís el día anterior.
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