MADRID/CARTAGENA.- El Consejo de Ministros
aprobó hoy el contrato de ejecución de los trabajos de reparación
integral o gran carena del submarino S-74
'Tramontana', que se llevarán a cabo en el astillero de Navantia en
Cartagena y tendrán un importe de 42,9 millones de euros.
La financiación de la gran carena, la cuarta que se realiza al
sumergible, se distribuirá en cuatro anualidades, de 2014 a 2017, han
informado fuentes del Ejecutivo central en un comunicado.
La adjudicación se realiza de acuerdo con lo previsto en el convenio
entre el Ministerio de Defensa y la Armada con la empresa Navantia S.L.,
por ser el astillero de esta empresa en Cartagena el más adecuado del
país para acometer esas obras por su «experiencia y capacidad».
El retraso en la construcción del nuevo submarino de la Serie 80 ha
impedido el solape previsto inicialmente entre la Serie 70 y la Serie
80.
Por este motivo, y teniendo en cuenta que el arma submarina es una
capacidad esencial para el cumplimiento de las misiones que la Armada
tiene encomendadas, tanto a nivel nacional como internacional, es
necesario acometer la ejecución de las obras de la Cuarta Gran Carena
del Submarino Tramontana (S-74), con lo que se asegura la continuidad
entre una y otra serie, así como la formación y adiestramiento de las
dotaciones de submarinos.
La noticia cogió hoy por sorpresa a la
plantilla de Navantia en Cartagena, que no esperaba la orden de las los
trabajos hasta después de verano, a pesar de que acumula un retraso de
más de un año. La gran carena del S-74 supone garantizar la carga de
trabajo del astillero de Cartagena, al menos, hasta 2017.
El retraso en la construcción del nuevo submarino de la serie 80 ha impedido que puedan solaparse las obras de las series 70 y 80, tal y como estaba previsto inicialmente.
A la espera de que se solucionen los problemas del S-80, la Armada podrá mantener la situación actual de dos unidades operativas durante los próximos cuatro año
El retraso en la construcción del nuevo submarino de la serie 80 ha impedido que puedan solaparse las obras de las series 70 y 80, tal y como estaba previsto inicialmente.
A la espera de que se solucionen los problemas del S-80, la Armada podrá mantener la situación actual de dos unidades operativas durante los próximos cuatro año
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