MURCIA.- La responsable regional de Unión Progreso y
Democracia, Fuensanta Máximo, ha afirmado, tras la investidura del nuevo
presidente autonómico, que un Gobierno liderado por Alberto Garre
"genera muchas dudas e incertidumbre en cuanto a la capacidad del futuro
ejecutivo de hacer frente a la situación actual y poner freno a la
deuda de 5.500 millones de euros". Igualmente, sostiene que "un cambio
de gobierno para hacer lo mismo no nos lleva a ninguna parte".
Máximo destaca que en su discurso, Alberto Garre "no ha entrado en
detalles ni ha enumerado cuáles serán las medidas que piensa poner en
marcha para cuadrar las cuentas de la Comunidad, más allá del gasto
corriente que ha sido casi lo único que ha nombrado".
"El nuevo presidente regional ha llevado a cabo una declaración de
intenciones sin más, lo que genera considerables dudas de que se puedan
lograr los objetivos presupuestarios, dado que sigue valorando la
situación actual de la Región de una manera demasiado optimista",
lamenta.
A juicio de Fuensanta Máximo, "esto no es ni mucho menos realista,
ya que estamos muy lejos de poner las soluciones adecuadas para salir
de la crisis". Para UPyD, la Región "tiene un déficit y problemas
estructurales que hacen que la recuperación sea mucho más difícil que
para el resto de comunidades".
UPyD viene proponiendo desde hace cinco años, y para todo el Estado,
"la racionalización de las administraciones públicas y la reforma del
modelo territorial como la mejor solución para eliminar duplicidades,
disminuir gastos y reducir el déficit".
Al hilo, recuerda que "hemos sido los primeros en poner encima de
la mesa cuestiones como la supresión de las Diputaciones, la fusión de
ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes y la devolución de
competencias al Estado, como Sanidad y Educación".
Para la responsable regional de la formación magenta, "un cambio
de Gobierno para hacer lo mismo no nos lleva a ninguna parte, siendo
necesario empezar por cambiar las reglas del juego reformando la ley
electoral que es la que blinda todo el sistema e ir depurando
responsabilidades por la gestión realizada".
Respecto a la corrupción, "es necesario un sistema más
transparente y más eficaz, comenzando por la obligación de abandonar el
cargo público cualquier político que sea imputado porque cuando se
ostenta un cargo institucional, se tiene aún más responsabilidad, y
escudarse en la presunción de inocencia para eludir la responsabilidad
política no es aceptable".
En este sentido, Máximo remarca que "los políticos imputados tiene
derecho a la presunción de inocencia, por supuesto, pero deben ejercer
su derecho a la defensa fuera de las instituciones para no dañar el
interés general y el propio sistema democrático", concluye.
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