MURCIA.- El ex alcalde de Ojós, Francisco Salinas, ha reconocido los hechos de los que la Fiscalía le ha acusado y ha aceptado el pacto de conformidad, reduciendo de este modo la pena de cinco a dos años de cárcel por presunto delito de corrupción de menores a través de la tenencia y producción de pornografía infantil del que está acusado desde 2007.
Salinas ha reconocido hoy ante la Audiencia Provincial de Murcia los hechos de los que estaba acusado por el fiscal y constitutivos de un delito de corrupción de menores del que fueron víctimas dos vecinos de la localidad que tenían entonces 10 y 15 años.
El ex primer edil tras
mostrar su conformidad, ha aceptado el pacto al que han llegado la
fiscal del caso y su abogado defensor, y por el cual cumplirá dos años
de cárcel por un delito de corrupción de menores cometido por la
tenencia y producción de pornografía infantil.
Salinas estaba acusado de haber realizado fotografías a estos dos menores, en las que aparecían desnudos o semidesnudos.
Los
hechos fueron descubiertos en el año 2007 en el laboratorio fotográfico
de Murcia al que el acusado llevó las fotografías que había captado de
los dos niños, lo que motivó que un empleado del establecimiento lo
comunicara a la policía.
El ex mandatario de Ojós fue detenido poco después en el mismo local al acudir a recoger las fotografías ya reveladas.
No obstante, a su salida de la Audiencia Provincial, Salinas ha
vuelto a insistir en su inocencia, pero "sabemos que las razones de
justicia están a la orden del día y más cuanto son temas políticos".
Su abogado defensor, José María Caballero, ha explicado que "el
reconocimiento de hechos ha sido una mera cuestión práctica, ya que
tiene 72 años y está deseando que esto termine", además de que cuenta
con el apoyo de los padres de los menores, ha recordado.
Salinas ha dejado claro que ha aceptado la pena por su estado de
salud y el apoyo que tiene de las presuntas víctimas. "Hay que apoyarles
y dejarlas en paz y a sus padres y a veces las decisiones se toman por
ese motivo", ha indicado.
Al hilo, ha advertido que todo esto "es un tema político",
declinando decir más sobre este asunto. "He asumido la pena por eso y no
tengo más que decir, está todo dicho ya", ha subrayado.
Por su parte, Caballero ha explicado que "al haber durado siete
años la tramitación del procedimiento lo normal es que se haga la
liquidación de condena y se vea extinguida".
Igualmente, ha vuelto a subrayar el apoyo de los menores y sus
padres. De hecho, ha comentado que cuando ha terminado el proceso, los
propios menores "han preguntado si podían acercarse a Salinas y le hemos
dicho que por precaución y hasta que no dicte la resolución declarando
extinguida la orden de alejamiento, pues que no lo hicieran".
Y es que, ha indicado, "nuestra justicia, en este caso, se ha
empeñado en ir adelante y ha sido una mera cuestión práctica por la edad
que tiene y su estado de salud".
"Siempre ha mantenido su inocencia y
los padres de los menores están con él desde el principio", ha
manifestado.
Caballero también ha justificado la existencia de fotos de los
menores en la cámara del ex alcalde porque "se las hacían ellos mismos
cuando iban a su casa y Salinas le ayudaba con los deberes". Incluso,
recuerda que los padres no tienen nada contra el exalcalde y que la
influencia para sus hijos "ha sido positiva".
Los hechos se remontan al 15 de octubre de 2007, cuando el acusado
fue descubierto en una tienda de fotografía de Murcia visionando una
imagen en una terminal informática y lo vio un cliente del
establecimiento.
Según el escrito de conclusiones provisionales, el ex regidor está
acusado de haber tomado presuntamente fotografías de los dos menores,
de 14 y 10 años, posando "desnudos o semidesnudos en diferentes poses de
contenido sexual", todo ello tras haberse ganado su confianza.
Supuestamente, el acusado regalaba a los menores "ropa, calzado,
una consola Play Station, una bicicleta y un teléfono móvil", entre
otros objetos.
El pasado mes de enero de 2013, el ex alcalde rechazó el pacto de
conformidad ofrecido por el fiscal en el caso de corrupción de menores, y
mantuvo su inocencia porque "no ha cometido ningún delito".
La acusación inicial del Fiscal pedía hasta cinco años de cárcel
por un presunto delito de corrupción de menores y seis años de
prohibición de comunicación con los menores, así como la accesoria de
inhabilitación para sufragio pasivo, según se desprende del escrito de
conclusiones provisionales del Ministerio Público.
Salinas fue detenido en el 18 de octubre de 2007 por el Grupo de
Delincuencia Tecnológica e Informática de la Jefatura Superior de
Policía de Murcia, y fue puesto en libertad con cargos y bajo una medida
de alejamiento e incomunicación tras comparecer en el juzgado de
guardia nº 4 de Murcia por el presunto delito de corrupción de
menores.
Sin embargo, meses después y durante la fase de instrucción,
Salinas fue detenido nuevamente por agentes de la Guardia Civil por
quebrantar la orden de alejamiento sobre el menor de edad, ya que los
encontraron juntos a las puertas de un establecimiento público en
Archena.
Por quebrantar la orden de alejamiento, el Juzgado de lo Penal
nº 5 de Murcia le condenó a 18 meses de multa con cuota diaria
de seis euros -unos 3.240 euros en total- y a pagar las costas
procesales causadas.
Según recogía la sentencia, quedó probado que Salinas se
encontraba en compañía del menor frente a un bar de Archena cuando
apareció un coche de la Policía Local, por lo que el menor intentó
esconderse, lo que llamó la atención a los agentes.
Salinas se acercó a ellos y les dijo que "no pasaba nada, que era
su sobrino" y les enseñó el DNI del menor, por lo que les dejaron ir.
Los agentes observaron como el menor y Salinas, junto a un adulto y otro
menor, se introdujeron en el mismo local, saliendo unos 10 ó 15 minutos
después, momento en el que fue detenido Salinas por quebrantar una
orden de alejamiento sobre el menor de edad.
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