martes, 1 de octubre de 2013

El aeropuerto fantasma atrapa a la élite murciana en la guerra Sacyr-Valcárcel


MADRID.- La trifulca de la Comunidad Autónoma de Murcia con Sacyr por el nuevo aeropuerto de Corvera fractura las élites murcianas. Directivos de empresas muy ligados al poder del PP en la región no tienen otra que respaldar las acciones judiciales de la concesionaria Aeromur, de la que forman parte, contra decisiones del Gobierno regional. 

El “buen pleito” por el que ha optado el Ejecutivo tiene largo recorrido y aumentará las dificultades para que finalmente lleguen aviones. En el aire están más de 200 millones de euros, por mucho que el presidente Valcárcel intentara ayer dulcificar la situación anunciando un acuerdo con Aena para que gestione la nueva instalación y cierre al tráfico civil el otro aeródromo, el de San Javier.
El contencioso, iniciado cuando Aeromur quiso renegociar las condiciones de la concesión en 2009 y en 2012, estalló el martes 24 por el intento de funcionarios regionales de ocupar las instalaciones aeroportuarias, terminadas y sin funcionar, después de que el Gobierno de Ramón Luis Valcárcel comenzara en mayo pasado los trámites para retirar la concesión por incumplimientos de contrato -el aeropuerto está terminado y sin funcionar desde enero de 2012- y la hiciera efectiva el 13 de septiembre. El Ejecutivo siempre contestó a la concesionaria que hiciera honor a lo firmado y abriera el aeropuerto en los plazos previstos.
Aeromur, liderada por Sacyr, pidió el miércoles tutela judicial por irregularidades en el intento de ocupar las instalaciones. Un juez le dio el jueves la razón recordando a la Comunidad la inviolabilidad del domicilio consagrada en la Constitución, aunque autorizó que los funcionarios levantaran acta de inventario el viernes, como estaba previsto y acordado, un paso previo a la ocupación oficial de las instalaciones.
Este no es más que el inicio de la que se prevé larga batalla judicial puesto que Aeromur, a través de Sacyr, ha declarado su intención de recurrir la retirada de la concesión así como el nuevo concurso que la Comunidad pretende convocar para gestionar el aeropuerto antes de final de año.
Así se acordó en el último consejo de la exconcesionaria, en el que todos los asistentes respaldaron esa toma de postura, según varias fuentes coincidentes. En el órgano de dirección se sientan representantes de Cajamurcia (ahora BMN), Grupo Fuertes y Sabadell-CAM, entre otros, todos al 6%. Los dos primeros, dirigidos por los murcianos Carlos Egea y Tomás Fuertes, tienen estrechísimas relaciones con el presidente Valcárcel y con la estructura del Gobierno y del PP.
Esto coloca a esos dos socios minoritarios de Sacyr (60,7%) en Aeromur en una situación delicada y difícil, aunque las fuentes coinciden en que ambos han intentado tender puentes y evitar el conflicto desde el inicio de las discrepancias. Junto a ellos ha actuado en ese sentido y muy activamente el presidente del consejo de administración de la exconcesionaria, Patricio Valverde, que es también delegado de Iberdrola en la región y fue consejero de Economía de Valcárcel a principios de la década pasada.
Cajamurcia, Grupo Fuertes e Iberdrola han participado como soporte de una u otra forma en grandes operaciones urbanísticas y financieras alentadas por el ejecutivo desde hace más 15 años. La antigua CAM desempeñó, si cabe, un mayor papel 'ladrillero' hasta su quiebra, pero su compra por el Sabadell por un euro en junio del año pasado la ha distanciado de la 'pomada'.
El consejero de Empresa e Innovación y portavoz del Gobierno, José Ballesta, describió el jueves con su habitual circunspección el asunto de Corvera como “complicado y delicado”. Pero añadió el factor sorpresa anunciando que hoy el presidente Valcárcel cerraría con Aena un acuerdo para que la gestora aeroportuaria estatal se haga cargo del nuevo aeropuerto y traslade sus operaciones civiles desde el de San Javier, situado a 20 kilómetros de aquel.
“Suena paradójico que una semana después de retirarle la concesión a una empresa se firme ese acuerdo”, dicen fuentes de la concesionaria, cosa que con probabilidad añadirá otro proceso judicial y más retrasos para la apertura del aeropuerto. Porque el Gobierno intenta desesperadamente que los aviones empiecen a aterrizar en Corvera en el mes de abril. No sólo porque es el inicio del verano turístico y así no se perdería una temporada más, sino también porque el presidente Valcárcel tiene previsto concurrir a las elecciones europeas en las listas del PP en mayo, algo que aún no se ha hecho oficial, y quiere, obviamente, dejar encauzado el problema.
Un problema que se puede convertir en una bomba económica puesto que Aeromur inició el preconcurso de acreedores tras retirársele la concesión porque ahora no tiene perspectivas de poder devolver el crédito sindicado liderado por CaixaBank que obtuvo para terminar las obras, que es de 197 millones de euros. La Comunidad Autónoma fue el avalista del préstamo, por lo que su impago la obliga a satisfacer la deuda.
La sorpresa del acuerdo con Aena fue complementada el viernes 27 con la intención de la Comunidad de pedir créditos por los casi 200 millones del aval por si Aeromur no hace frente a su pago, cosa probable ya que está en preconcurso de acreedores.
La petición de tutela judicial y la posible suspensión de pagos son interpretadas desde el Gobierno como tácticas dilatorias premeditadas para entorpecer el nuevo concurso de adjudicación del aeropuerto. En el otro lado, se sorprenden de que, paralelamente a las negociaciones de Aeromur y Comunidad, se estuvieran preparando durante el verano informes jurídicos para anular la concesión por retrasos en la apertura, se avance otro concurso de adjudicación y se anuncie para ya mismo el acuerdo con AENA. Aunque esto último tardará meses en plasmarse: Según explicó el lunes 30 el propio Valcárcel tras entrevistarse con la ministra Ana Pastor, será durante el primer semestre de 2014 si todo va bien.
La gestora estatal puso como condición para el traslado que se le compensara por los 70 millones que costó una segunda pista, inaugurada en marzo de 2011, y otras instalaciones antes de dejar San Javier exclusivamente para vuelos militares y trasladarse sin armas pero con bagajes a Corvera. Valcárcel dice ahora que solo son 54 y se pagarán a medias entre el ministerio de Defensa y quienquiera que sea el nuevo concesionario de Corvera, que asumirá también los 197,5 del aval.
Por eso, tanto en la ya ex concesionaria como en su socio mayoritario no entienden bajo qué criterios económicos se han tomado estas decisiones, y coinciden en señalar a Juan Bernal -consejero de Economía, vicepresidente y también muy ligado a las élites económicas del PP- como el más firme opositor dentro del Gobierno regional a que Aeromur continuara en Corvera.
Está en juego una cantidad de millones de euros que puede desequilibrar el presupuesto de una comunidad destacada entre las menos cumplidoras de los límites de déficit impuestos por el ministro Montoro y en cuya ejecución para que sean pagados por todos los contribuyentes figurarán como cooperadores necesarios ilustres representantes empresariales y financieros murcianos, además de Sacyr. Algunos añoran los tiempos en que Luis del Rivero era dueño y señor de Sacyr haciendo y deshaciendo en Murcia en comandita con quienes ahora quedan entre dos fuegos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que no que las cosas no son así y la historia es bien distinta, veamos:
En un momento determinado los socios de Sacyr en Aeromur entre ellos las cajas CAM y Cajamurcia dijerón que no arriegaban ni un euro más, porque ya sabian del disparate de la inversión. Ante ello Del Rivero-Sacyr se inventan o convienen con los bancos eso de que los bancos les han cerrado el crédito y tienen que pedir el aval de los 200 m. de euros de Valcarcel. No era creible que les hubieran cerrado el crédito porque para que les adjudicaran el Aeropuerto tenian que presentar previamente las garantías de financiación y los avales correspondientes (si no los presentaron es que hubo fraude o la adjudicación era irregular, cualquier cosa es posible. Y tampoco era creible que el aval de la CARM fuera necesario porque entre Sacyr, Grupo Fuertes y las Cajas de entonces había más solvencia que en La CARM. Se trató "presuntamente" de una jugada maestra de Del Rivero para endosarle el muerto a Valcarcel y todo a sabiendas de este ¿prevaricación, pacto? porque el único que ganaba si o si era Sacyr que se embolsó mas de 50 m. de euros como constructor, es decir que lo que pagaba como socio promotor lo sacaba por otro lado como constructor y los socios minoritarios ya se habían percatado de la cuestión.
Por todo ello y una vez fuera-expulsado de Sacyr Del Rivero, no sería de extrañar que detrás de estas últimas jugadas se encuentre la dulce venganza del que lo tenia todo hablado con Valcarcel, conociendo lo maquiavelico del personaje parece que le ha vuelto a marcar otro gol a Valcarcel y de paso a sacýr llevandolos a una posición de díficil salida para ambos.

Anónimo dijo...

Se comenta que parte de los socios se han llevado su buena tajada en la construcción del aeropuerto, sacyr con la construcción, Grupo Fuertes vendiendo materiales de construcción, Angel martinez Consejero de la CAM instalando el aire acondicionado, el socio hormigonero poniendo el hormigón y así hasta sacarle los 200 millones a la CARM. Alguien debería investigar sobre todo en si ha habido libre competencia a la hora de adjudicar contratos..