MURCIA.- Las exportaciones murcianas crecieron un 3,2
por ciento durante el primer trimestre del año, tasa similar al 3,9 por
ciento observado en el ámbito nacional. Si se excluye del análisis los
productos energéticos, que vienen "distorsionando" la serie estadística
por su elevada volatilidad, el incremento de las ventas al exterior
asciende al 8,7 por ciento, un dinamismo "más que notable".
Así se refleja en el Boletín de Coyuntura Económica de la
Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM)
relativo al primer trimestre de 2013, que considera que el sector
exterior volvió a ofrecer resultados "muy positivos" y logró una
aportación "significativa" al crecimiento económico regional en el
primer trimestre de 2013.
Se trata para la patronal de una "gran noticia", máxime "en un
contexto tan difícil como el actual, en el que los principales socios
comerciales de la Región, que son los países de la zona euro, se
encuentran en recesión".
El incremento es generalizado y la mayor parte de los sectores
contribuyeron al avance. En particular, destaca el de las
semimanufacturas (+28,8 por ciento) espoleadas por las ventas de
productos químicos que rondaron los 300 millones de euros en el primer
trimestre del año.
También presentaron un comportamiento muy dinámico las
manufacturas del consumo (+27,9 por ciento), donde destaca la presencia
de la industria del calzado, mientras que los bienes de equipo crecieron
un 6,5 por ciento.
El sector agroalimentario que viene registrando una gran expansión
exportadora volvió a presentar tasas positivas, aunque algo más
moderadas que en trimestres anteriores. Solamente los productos
energéticos minoraron sus exportaciones, aunque mantiene una elevada
ponderación en el sector exterior regional.
Atendiendo al destino geográfico de los productos murcianos,
también se pueden extraer conclusiones muy positivas, dado que las
empresas de la Región continúan avanzando en la diversificación de sus
ventas.
Cada vez cobran más protagonismo los destinos extracomunitarios,
en tanto que las exportaciones no energéticas hacia los mercados
emergentes crecieron con fuerza. En concreto, las ventas hacia Asia se
dispararon un 29,9 por ciento por el dinamismo de China y Japón; hacia
África aumentaron un 12,6 por ciento, con protagonismo de Marruecos; y
hacia América Latina un 9,8 por ciento, con México como principal
destino -en cambio, cayeron de forma notable las exportaciones a Brasil y
Argentina. También hay que destacar el impulso que tomaron las
relaciones con Estados Unidos (+33,6 por ciento).
En todo caso, destaca que los principales socios comerciales de la
Región continúan siendo los países de la UE. Hacia ellos las
exportaciones aumentaron de una forma más moderada (+9,4 por ciento en
total; y +4,5 por ciento las no energéticas). La CROEM resalta el
dinamismo de las ventas no energéticas a Italia (12,8 por ciento), Reino
Unido (+11,4 por ciento) y Francia (+7,1 por ciento).
En cambio, preocupa el retroceso leve que mostraron las
exportaciones hacia Alemania (-0,3 por ciento), que se constituye como
el principal destino de los productos regionales.
Las importaciones cayeron un 6,7 por ciento a consecuencia de la
debilidad de la demanda interna. El descenso fue generalizado y afectó a
todos los grupos salvo Alimentos (+2,3 por ciento) y manufacturas de
consumo (+0,1 por ciento).
Los fuertes retrocesos de semimanufacturas (-11,5 por ciento) y
bienes de equipo (9,5 por ciento) evidencian el continuo descenso de la
inversión regional, evolución que sin duda se explica por las todavía
bajas expectativas empresariales -a pesar de la mejora observada en el
primer trimestre, pero también por la contracción del crédito.
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