lunes, 19 de septiembre de 2011

Registrados dos terremotos de más de 2 grados de magnitud al noroeste de Lorca

MURCIA.-  Dos terremotos de 2,1 y 2'2 grados de magnitud en la escala de Ritcher se han registrado este lunes al noroeste de Lorca, con epicentro al oeste de Aledo, según han informado  fuentes del Instituto Geográfico Nacional. 

   El primer movimiento telúrico se registró a las 6.48 horas y un minuto más tarde se producía el segundo, ambos a 37'8 grados de latitud.  
Fuentes de dicho Instituto han confirmado que no se tiene constancia de que se hayan sentido los seísmos entre la población.
   Estos leves temblores son normales dentro de la propia actividad sísmica del sureste español.

El Estado financiará en Lorca las viviendas para familias cuyas casas fueron demolidas por el terremoto

LORCA.-  El Estado va a financiar la totalidad de las viviendas que alojarán a las familias de Lorca  cuyas residencias hayan tenido que ser demolidas por los terremotos que tuvieron lugar el pasado mes de mayo, tal y como ha anunciado el consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, Antonio Sevilla, tras la reunión mantenida este lunes con la secretaria de Estado de Vivienda y Actuaciones Urbanas, Beatriz Corredor, y el alcalde de Lorca, Francisco Jódar. 

Sevilla ha asegurado que le ha manifestó a la secretaria de Estado la "insuficiente" participación económica del Estado en el borrador de protocolo sobre la construcción de viviendas modulares presentado este lunes en la ciudad de Lorca. No obstante, finalmente ha expresado la "satisfacción" del resultado de las negociaciones "porque es responsabilidad del Estado hacerse cargo y auxiliar a las regiones, como ya lo hizo en el pasado con el Plan Galicia, cuando éstas sufren a consecuencia de una catástrofe de la magnitud de los terremotos de Lorca y más en una situación de crisis económica como la actual".
A su juicio, "los ciudadanos de la Región de Murcia no pueden pagar por dos, como murciano y como español, cada vez que se haga una actuación para la reconstrucción de los daños producidos por el terremoto del pasado mes de mayo".
Asimismo, el consejero de Obras Públicas considera "imprescindible" que todas las iniciativas de las administraciones estén consensuadas y coordinadas antes de ser presentadas, así como que "deben estar enmarcadas en el 'Plan Lorca' para asegurar la rentabilidad de las inversiones públicas, con el objetivo último de que la ciudad recupere la normalidad lo antes posible".
En este sentido, ha recordado que tanto el Congreso de los Diputados como la Asamblea Regional corroboraron hace tan sólo unos días que es el Gobierno central quien debe hacerse cargo de la financiación de las actuaciones de recuperación de Lorca "porque es una cuestión de Estado".

La deuda militar, "patata caliente" del próximo Gobierno central

MADRID.- En plena tormenta económica en España, con los mercados preocupados por el elevado déficit del país y la sociedad alarmada por el paro y los recortes sociales, pocos esperarían que una de las cuestiones más espinosas de las cuentas públicas con las que tendrá que lidiar el gobierno que salga de las urnas el 20-N esté relacionada con la Defensa.

Y sin embargo, las deudas que acumula esta cartera - que oscilan entre los 26.000-27.000 millones de euros y cuyo pago se extiende hasta 2025 -, serán previsiblemente uno de los asuntos más urgentes sobre la mesa del próximo presidente del Gobierno.
"Esta es la patata caliente (para el próximo gobierno), o lo resuelve en seis meses o le va a estallar en las manos", dijo Enrique Navarro, presidente de la consultora IC2 Partners.
La implicación de España en grandes programas con los que modernizar las Fuerzas Armadas, así como su presencia en misiones internacionales, creció notablemente en el anterior gobierno del PP y se mantuvo durante la primera legislatura socialista de José Luis Rodríguez Zapatero. Aprovechando los últimos coletazos del periodo de expansión económica, el presupuesto de Defensa creció un 57 por ciento entre 1998 y 2008 hasta los casi 8.500 millones de euros.
España se unió a ambiciosos proyectos europeos, como el caza Eurofighter 2000 y el avión de transporte A-400M, además de otros contratos importantes a nivel nacional, como el del carro de combate Leopardo, las fragatas F-100 y los submarinos S-80, que ahora algunos ponen en duda que sean adecuados para las necesidades reales de las Fuerzas Armadas.
"Estamos pagando cosas que probablemente no vamos a necesitar", afirmó Antonio Fonfría, profesor de Economía Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid.
Estos contratos de modernización contaron con el apoyo imprescindible de los créditos blandos concedidos por el Ministerio de Industria bajo el concepto de ayudas a la innovación tecnológica en el sector de la defensa y en forma de anticipos reintegrables a las empresas, para que pudieran ir fabricando el material hasta que Defensa les pagara.
Pero esta política expansiva se dio de bruces con el estallido de la crisis en 2008 y, al igual que el resto del presupuesto público, Defensa tuvo que ajustarse el cinturón.
En estos tres años, su presupuesto - del que hasta un 65 por ciento corresponde a gastos de personal, una cifra que ha ido en aumento - ha bajado un 15 por ciento, y el capítulo de inversiones reales, de donde paga estos programas, ha caído a la mitad en ese mismo periodo hasta los 1.000 millones de 2011.
Sin embargo, tiene que afrontar una deuda de unos 26.000 millones de euros hasta 2025 - tras haber pagado ya unos 5.000 millones -, explica Navarro. Según el analista, 14.000 millones de euros pendientes de pago corresponden a los créditos anticipados por Industria y que habría que devolver a partir de 2014; 4.000 millones de euros figuran entre los retrasos que Defensa ya tenía que haber pagado a las empresas y 8.000 millones deberían ser pagados en los próximos cinco años a la entrega del material.
Ante la dificultad de conseguir cifras oficiales sobre la deuda pendiente y los calendarios de pago, se espera como agua de mayo la comparecencia el miércoles en el Congreso del secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez. El funcionario, que ha llegado a hablar de un "festín de gasto público" en defensa en la época del PP, cifró hace un año la deuda en 27.000 millones de euros.
Los rígidos compromisos de consolidación fiscal con Bruselas dificultan aún más el panorama lo que, según diversos analistas, podría llevar a Defensa a paralizar sus inversiones durante hasta 10 años.
"El ministerio tiene para gastar este año en inversiones 200 millones y tiene que pagar unos 1.000 millones", dijo Fonfría.
Los analistas explican que se han barajado varias opciones: desde condonar los créditos de Industria a alargar el calendario de pago, pasando por crear un organismo que asuma las deudas o permitir que las empresas exporten parte de los encargos y así reducir el déficit. Además, Defensa podría optar por vender sus participaciones en empresas como Hispasat o Isdefe, según analistas.
En un momento en el que se teme que la economía de los países desarrollados pueda caer en una nueva recesión y en el que hasta Estados Unidos -el país con mayor gasto militar del mundo- ha aprobado recortes en el presupuesto del Pentágono, también está en juego la supervivencia de la industria española de Defensa, que ha sufrido ajustes de hasta el 25 por ciento de su fuerza laboral en estos tres años.
"Si en los próximos años hay que dedicarse a pagar lo que se ha construido y las empresas mientras están de brazos cruzados, cierran en dos años el 80 por ciento", afirmó Enrique Navarro, de IC2 Partners, que destacó que "muchas de las decisiones industriales que se tomaron fueron por política industrial".
Dominada por cuatro compañías - EADS-Casa, General Dynamics, Indra y Navantia -, la industria de defensa cuenta en España con unos 50.000 empleos directos e indirectos y factura entre 2.500 y 3.500 millones de euros al año.
"¿Es necesario mantener una industria española de Defensa? Yo parto de la base de que sí, por cuestiones estratégicas y de soberanía nacional, pero otra cosa es si su capacidad competitiva es la adecuada", señaló Fonfría, que ha formado parte de un grupo de trabajo encargado por el ministerio para estudiar esta situación. "Además, está sobredimensionada".
Ante esta situación y en vísperas de una cita electoral que podría suponer un cambio de gobierno en favor del Partido Popular, según las encuestas, las empresas no quieren hablar de problemas en los pagos mientras tratan de abrirse a mercados exteriores.
Fonfría se mostró partidario de contratos más pequeños "pero más necesarios, sobre todo con el tipo de conflictos que tenemos actualmente", y menciona por ejemplo los UAV, aviones no tripulados, de los que el Ejército español está utilizando algunos en la misión en Afganistán de procedencia extranjera.
En sentido similar, Navarro explica que parte del problema radica en la pretensión de jugar un rol en las misiones internacionales quizás excesivo para el peso del país. "Esto es consecuencia de tener un Ejército que gasta menos de la mitad que el resto de los países y sin embargo estamos en las mismas misiones que el resto de los países, las cuentas no cuadran", dijo.
El Partido Popular, que ha apostado por mantener la presencia española en misiones como la de Libia o Afganistán, aún no ha presentado públicamente sus propuestas de defensa y declinó hacer declaraciones sobre esta situación.
Un borrador de su programa mencionado por medios habla de reducir el número de mandos militares y de instalaciones. También considera prioritario sacar la deuda del balance del ministerio, aunque no especifica cómo, mientras sus "ideas en defensa" recogidas en su web (www.pp.es) hablan de impulsar el proceso de modernización de las Fuerzas Armadas y cumplir los planes de capacidades militares.
Cuando el partido de centroderecha ya ha anunciado que llevará a cabo recortes en la Administración y varias de las comunidades autónomas en las que gobierna han reducido recursos en áreas como sanidad y educación, parece difícil que se vaya a mejorar la dotación para la defensa en un país con un profundo sentimiento antimilitarista, a pesar de que las Fuerzas Armadas son de las instituciones mejor valoradas en las encuestas.

Blanco presentará el estudio del Corredor Mediterráneo en octubre

VALENCIA.- El ministro de Fomento, José Blanco, presentará el estudio y las inversiones del Corredor Mediterráneo en Valencia en la segunda mitad del próximo mes de octubre, según ha anunciado este lunes en rueda de prensa el portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de la capital del Túria, Joan Calabuig. 

   La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, remitió el pasado miércoles una carta a José Blanco para solicitarle que haga una exposición pública en la ciudad del estudio técnico del Corredor Mediterráneo. El Ministerio de Fomento, cumpliendo esta petición, lo hará en la segunda quincena de octubre.
   Joan Calabuig ha hecho hincapié en que "los esfuerzo de las organizaciones sociales, económicas y empresariales de la Comunitat, en la línea de exigir la construcción del eje del Corredor Mediterráneo y de sus declaración como parte de la Red Central Transeuropea de Transportes, va por muy buen camino".
   En este sentido, el portavoz socialista ha expresado su felicitación al conjunto de la sociedad civil valenciana "por el trabajo que se ha realizado y que se sigue realizando" y, asimismo, ha mostrado su convencimiento de que la Comisión Europea aprobará el proyecto del Corredor Mediterráneo "en los próximos días".

La morosidad del sistema financiero español marca un máximo desde febrero de 1995

MADRID.- La morosidad de los créditos concedidos por bancos, cajas, cooperativas y establecimientos financieros de crédito (EFC) a particulares y empresas se situó en julio en el 6,93%, a tan sólo siete centésimas del 7%.

   Esto supone un aumento tanto respecto al nivel de julio de hace un año (5,47%), como respecto al registrado el pasado mes de junio (6,41%), y supone la cota más alta registrada desde febrero de 1995, según datos del Banco de España.
   Los créditos morosos totales del sector financiero se situaron en julio en 124.717 millones de euros, lo que significa 24.717 millones por encima de la barrera psicológica de los 100.000 millones que se superó en mayo de 2010.
   El total de préstamos marcó 1,797 billones de euros en julio, lo que arroja un descenso del 1% en relación al mes precedente y una bajada del 1,9% en los últimos doce meses.
   La morosidad de las entidades de depósito, que incluyen en el cálculo a bancos, cajas y cooperativas de crédito, se situó en julio en la cota del 6,93%, lo que significa un incremento de 0,26 puntos respecto a junio.
   Por su parte, los establecimientos financieros, que no pueden captar depósitos, registraron una tasa de impago del 9%, el mismo nivel del mes precedente, con préstamos de 3.577 millones de dudoso cobro sobre un total de 39.766 millones en créditos.
   Para hacer frente a esta creciente morosidad, el sector financiero estableció sus provisiones en un total de 72.110 millones de euros, colchón que ha engordado en 489 millones en un mes y en 11.274 millones en un año.
   La mayor parte de estas reservas para hacer frente a pérdidas (68.896 millones de euros) corresponde a las entidades de depósito, según se desprende de los datos del instituto emisor español.

Luis de Guindos: La salida de Grecia del euro sería "catastrófica"


MADRID.- El que fuera secretario de Estado de Economía y mano derecha de Rato en el último Gobierno de José María Aznar sabe muy bien que la salida de la crisis, tanto europea como española, no va a ser un camino de rosas. Pero Luis de Guindos tiene muy claro cuál debe ser la hoja de ruta después del 20-N para recuperar la maltrecha economía española: ajustes y reformas. Conocedor del sistema financiero internacional y de la política comunitaria, tiene también sus recetas para superar el colapso que vive la unión monetaria: ceder soberanía a Bruselas y aplicar una política presupuestaria común. Lo entrevista el diario 'Abc', de Madrid.

—Cuatro años después del estallido de la crisis financiera internacional, las tensiones en los mercados continúan casi intactas. ¿Cuánto nos queda todavía por pasar?
—Las crisis financieras son extremadamente complicadas desde el punto de vista de su evolución y de la salida de las mismas. Son crisis profundas en las que la recuperación es muy lenta y muy frágil. Estas crisis se caracterizan por que hay sobreendeudamiento, burbujas de precios de activos y un impacto sobre los balances bancarios.

—¿Ese es el origen?
—Ese es el origen, pero la corrección de todos esos desequilibrios lleva tiempo, y puede provocar que las recesiones sean profundas y que la salida sea dubitativa, y eso es lo que estamos viendo actualmente.

—Y los gobiernos ¿no están dando palos de ciego? Grecia está con respiración asistida, pero no se quiere desconectar el respirador. ¿No sería mejor dejarla caer de una vez?
—En el caso de la crisis de Grecia y la crisis del euro, estamos sometidos a una contradicción. Hay una percepción de que el problema griego no tiene solución sin un impago de la deuda y sin una quita relevante, no del 21%, que es la que se pactó. Pero, por otro lado, se teme que ese impago genere un tsunami de duda e incertidumbre que afecte de una forma muy profunda a los bancos europeos. 

—¿Y cómo salimos de ese círculo?
—Ninguna de las salidas es fácil. Y de lo que se trata es de buscar el mal menor.

—¿Cuál sería, en su opinión?
—La única salida razonable en el corto plazo sería avanzar de forma muy clara hacia la unión fiscal. Puede ser un Tesoro único, pueden ser los eurobonos…. Lo que supone una unión fiscal en última instancia es centralizar la política fiscal, al igual que la política monetaria. Cederíamos a Bruselas la soberanía en esta materia.

—Algunos países, entre ellos Alemania, no estarían dispuestos a ceder esa soberanía.
—Es cierto que esa salida tiene problemas desde el punto de vista político, porque en los países solventes y fuertes genera muchísimo rechazo. Pero en última instancia, si se quiere solventar la crisis de la deuda actual, esa es la única solución.

—¿Hay otras alternativas?
—Otro escenario sería el de los impagos selectivos, los planes de rescate, las inyecciones de liquidez, la compra de bonos por parte del BCE… pero esas medidas solo te ayudan a comprar tiempo y te generan la percepción de que no estás yendo a la causa del problema. Por último, existiría lo que para mí es la peor solución, que sería ir al impago de la deuda por parte de los países con problemas, con las potenciales consecuencias que esto podría tener para la zona euro. Y en este escenario el riesgo de contangio es enorme.

—Hay economistas que ya abogan por dejar salir a Grecia del euro. ¿Cree que es una solución factible?
—Esa solución sería catastrófica para Grecia y muy mala para el resto de la zona euro. Y generaría un precedente que permitiría especular con más salidas. Para eliminar las dudas que existen sobre la solvencia de la zona euro será necesario apoyo financiero por parte de los países fuertes, pero también austeridad en los países que necesitan la ayuda y reformas para generar capacidad de crecimiento. 

—Pero al final las restricciones fiscales detraen crecimiento.
—Es absolutamente necesario hacer un ajuste presupuestario, pero, a la vez, tomar otras medidas para generar la expectativa de que vas a crecer. Si solo se aplicaran medidas de austeridad, sería como realizar una operación a corazón abierto sin anestesia. 

—Y aterrizando en España, ¿el horizonte económico es tan negro como parece?
—La economía española tiene dos horizontes: hasta el 20-N y después del 20-N. Hasta las elecciones hay varios riesgos para la economía.

—¿Cuáles?
—En primer lugar, un agravamiento de la crisis por la percepción de una desviación en la ejecución presupuestaria de la Seguridad Social o las autonomías. O que haya problemas con la reestructuración de las cajas de ahorros y, especialmente, con el proceso de venta de la CAM. También es peligroso que alguna autonomía no pueda hacer frente al pago del vencimiento de algunas de sus emisiones de deuda. Malas noticias en estos ámbitos pueden generar una situación de nerviosismo adicional sobre la economía española en un contexto en el que el Gobierno ya no tiene margen de maniobra. 

—Acaba de incluir en la Constitución el equilibrio presupuestario.
—Eso es una medida positivísima. Se manda una señal muy importante a los mercados. De hecho, yo creo que la razón por la que la prima de riesgo española es inferior a la italiana es que los mercados descuentan que en España a partir del 20-N va a haber un Gobierno que ejecutará las reformas que necesitamos. 

—¿También es positiva la recuperación del impuesto de Patrimonio?
—Esa es una decisión política, no económica. El Gobierno se oponía a la medida y ha sido el candidato socialista quien lo ha impuesto. Además, los impuestos para los ricos siempre los acaba pagando la clase media. Y lo que hay que hacer en España no es poner nuevos impuestos, sino generar empleo, actividad, demanda, consumo e inversión para que así se generen ingresos impositivos.

—No hay que crear nuevos impuestos, pero ¿hay que bajarlos?
—Ahora es más importante reducir el déficit público que bajar los impuestos.

Hoja de ruta para la nueva legislatura

La fuga de depósitos obliga a la CAM a usar 500 millones del Banco de España

MADRID.- El mayor temor de cualquier supervisor cuando interviene una entidad es evitar la fuga de depósitos. Los clientes pierden la confianza (el mayor activo) en la entidad y el miedo hace el resto. El 23 de julio pasado, cuando el Banco de España tomó el control de la quebrada Caja Mediterráneo (CAM), una de las primeras medidas fue abrirle una línea de liquidez de 3.000 millones para que esa posible salida de depósitos no estrangulara a la caja. También decidió inyectarle 2.800 millones en el capital.

Según consta en el libro de venta de la CAM, que Merrill Lynch está mostrando a los posibles compradores, la entidad alicantina ya ha sufrido el impacto del miedo. Hasta el 31 de agosto ha recurrido a 500 millones de la línea de liquidez del Banco de España. En lo que va de año, la caída del saldo de recursos de clientes de la que fuera la cuarta mayor caja de España ha descendido en varios miles de millones de euros, según publica hoy 'El País'.
Los expertos consultados creen que en las próximas semanas la caja apelará más a la liquidez del Banco de España porque la retirada del ahorro es un goteo difícil de frenar. La CAM, que registró pérdidas de 1.136 millones hasta junio, tiene muchos factores en contra. El principal es que el mercado se encuentra en plena guerra por el pasivo de los clientes, con el Santander liderando el movimiento, como ya es habitual. El cierre de los mercados mayoristas de financiación obliga a las entidades a buscar dinero en todas las fuentes posibles, incluso ofreciendo altísimos tipos de interés. El objetivo es atender los vencimientos de los préstamos, prioridad absoluta para cualquier entidad que no quiera declararse en quiebra.
Para mayor dificultad, los competidores, sabedores de la debilidad de la CAM, bombardean a los clientes compartidos con ofertas tentadoras. No obstante, la entidad alicantina se defiende con las mismas armas: ofrece un 4,45% en los depósitos a dos años y un 3% a un año de plazo. Al final todos pierden porque los ingresos se hunden, pero los más débiles son los primeros en caer y con una muerte lenta. Por último, la CAM tiene otro problema: está adelgazando la red de oficinas y la plantilla. Esa reducción siempre implica pérdida de ahorro.
Los 500 millones utilizados hasta el 31 de agosto pueden suponer un incremento de la deuda de la entidad para el comprador. Hasta fin de este año tiene, además, vencimientos por valor de 979 millones. Pero el gran problema será 2012, cuando le toca devolver 5.400 millones prestados. El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), consciente de que esto puede alejar a compradores, señala en el cuaderno de venta que está dispuesto a estudiar fórmulas para colaborar en la financiación de la deuda. Obviamente sería un préstamo que el comprador tendría que devolver a un tipo de interés pactado pero atrasar las deudas, hoy en día, vale oro.
El Banco de España también está dispuesto a financiar el precio que se pague por la CAM. El tipo que se aplicaría en este caso dependerá de la valoración que tengan en el mercado los seguros de impago (CDS) del comprador. Es decir, a más solvencia, menor tipo y viceversa. Otra muestra de que la liquidez es ahora el gran escollo.
La mayor novedad del sistema de venta de la CAM es que ya no habrá un esquema de protección de activos dañados con el modelo tradicional. El último caso fue el de la BBK, a la que se entregaron 400 millones por quedarse con Cajasur y hacer frente a todos los agujeros que surgieran. La banca ha presionado para que el FROB cambie las reglas: el FROB asumirá el 80% de las primeras pérdidas que aparezcan, hasta 2.500 millones. A partir de esa cantidad, si continúan presentándose problemas, el fondo de rescate se queda con el 90% y el comprador con el 10% restante. Es el sistema utilizado en Estados Unidos para vender bancos quebrados. El Banco de España es consciente de que sin este método, que pasa de una cantidad tasada a otra en la que se reduce la posible pérdida, nadie compraría la CAM.
Pero el Banco de España ha acotado de dónde pueden surgir las pérdidas. Así los activos que cubrirá son: cartera de promotores (11.000 millones); créditos hipotecarios calificados subestándar, es decir, en riesgo de impago (1.100 millones); activos adjudicados (3.400 millones); préstamos fallidos (1.300 millones) y sociedades inmobiliarias participadas. En total sumarían unos 16.800 millones, sin contar las sociedades del ladrillo. Nada se dice de los dudosos. Al final de octubre es posible que la CAM tenga nuevo dueño. Un problema menos para el sistema, pero ya ha sembrado la sombra de la duda sobre todo el sector. "La CAM no es un cisne negro, sino una de las cajas mal gestionadas, como otras, por lo que las cifras se pueden extrapolar. Puede que otras de las dañadas también tengan una morosidad real cercana al 20%. Entonces, la cantidad que se necesita para recapitalizar al sistema sería mucho más de los 17.000 millones anunciados. Quizá el doble", comenta un ejecutivo experto en el sector.

Los requisitos para la compra

- El 26 de septiembre termina el plazo de presentación de ofertas no vinculantes.
- Pocos días después, el FROB seleccionará las que pueden continuar en la siguiente fase y concluirá en cuatro semanas. Las escogidas podrán hacer la due dilligence (una auditoría técnica) de la CAM y presentarán una oferta vinculante.
- El FROB podrá financiar la compra de la CAM.
- También puede ayudar con los vencimientos de liquidez de la entidad, que son de 979 millones en el año 2011 y de 5.400 millones en 2012.
El comprador de la CAM será el que menos ayudas públicas solicite.
- Además del dinero, el Banco de España valorará la capacidad de gestión de los equipos humanos, así como la experiencia en el negocio bancario, la solvencia de la entidad, la fortaleza financiera y la certeza de que los órganos de gestión van a aprobar la propuesta presentada para asumir el control.