MADRID.- Novacaixagalicia, Cajamurcia (BMN), Caja de Ávila (Bankia) y Unicaja van a seguir ligadas a su pacto de accionistas en Sacyr, cuyo vencimiento está fijado el 31 de diciembre. Fuentes cercanas a las entidades aseguran a 'Cinco Días' que se activará la prórroga del mismo para mantener el 12,1%, los tres consejeros, y actuar como árbitro en el enfrentamiento entre los fundadores de la constructora y el bloque que forman Carceller y Abelló.
El equilibrio entre grupos de accionistas en Sacyr Vallehermoso es ahora más inestable que nunca, lo que ha ayudado a que las cuatro cajas de ahorro presentes en su capital conquisten un papel determinante que pretenden mantener con la próxima renovación de su sindicación de acciones.
El pacto de la constructora con la petrolera mexicana Pemex para ganar influencia en Repsol, firmado sin el conocimiento de La Caixa (segundo accionista de Repsol con el 12,8%), ha abierto aún más la brecha entre el núcleo de fundadores de Sacyr, que lidera el presidente Luis del Rivero, y el de los inversores con presencia en el consejo, encabezados por Demetrio Carceller y Juan Abelló. Los tres dominicales en representación de las cajas tienen ahora una función clave como bisagra.
Hasta ahora eran Del Rivero, Manrique y Loureda quienes llevaban claramente la voz cantante, pero en las últimas fechas los apoyos con que contaban demuestran que no son incondicionales.
Novacaixagalicia, Unicaja, Caja de Ávila y Cajamurcia están por la labor de frenar una batalla de Sacyr en Repsol, donde La Caixa ha tomado posiciones contra la constructora. En esa tesis los tres consejeros de estas entidades apoyan a los tres de Disa, incluido Demetrio Carceller, y a los dos que representan los intereses de Juan Abelló. De igual modo opinan el independiente Matías Cortés y al vicepresidente tercero de la constructora, Diogo Álvez Díniz.
En lo que toca al modo de proceder en Repsol, Del Rivero tiene enfrente a diez consejeros de un total de 19. Aunque al menos cinco de los opositores lo son de forma circunstancial (los tres de las cajas, Cortés y Díniz). Ello motiva que su influencia en Sacyr se haya multiplicado, tras convertirse en ansiados apoyos para los dos bloques de poder.
Renovación
Las cajas sindicaron sus participaciones en abril de 2010, a través de un pacto que les otorga el 12,11% de Sacyr y tres consejeros dominicales: Ángel López Corona, José Luis Méndez y Andrés Pérez, los dos primeros de la entidad gallega y el tercero de Caja de Ávila. De separar sus paquetes accionariales, Novacaixagalicia se quedaría con el 8,65% de Sacyr y un solo consejero por el sistema de representación proporcional; mientras las tres cajas restantes descenderían hasta el 1,95% cada una, muy por debajo del 5% que se requiere en Sacyr para estar en el órgano de decisión.
El pacto vence el 31 de diciembre y es prorrogable por periodos de un año. Fuentes cercanas al pool de entidades aseguran que la primera de esas renovaciones está asegurada. Para presentar cualquier objeción existía un plazo que finalizaba el pasado viernes 30 de septiembre y parece que no ha habido manifestaciones en contra.
Lejos de desbaratar la alianza, el pasado viernes las cajas actuaron en bloque en el consejo de Sacyr al pedir una solución pactada con La Caixa en el conflicto con Repsol. De forma paralela, reclaman a Sacyr que se disponga a analizar desinversiones para rebajar la actual deuda de 11.194 millones.
El pacto de la constructora con la petrolera mexicana Pemex para ganar influencia en Repsol, firmado sin el conocimiento de La Caixa (segundo accionista de Repsol con el 12,8%), ha abierto aún más la brecha entre el núcleo de fundadores de Sacyr, que lidera el presidente Luis del Rivero, y el de los inversores con presencia en el consejo, encabezados por Demetrio Carceller y Juan Abelló. Los tres dominicales en representación de las cajas tienen ahora una función clave como bisagra.
Hasta ahora eran Del Rivero, Manrique y Loureda quienes llevaban claramente la voz cantante, pero en las últimas fechas los apoyos con que contaban demuestran que no son incondicionales.
Novacaixagalicia, Unicaja, Caja de Ávila y Cajamurcia están por la labor de frenar una batalla de Sacyr en Repsol, donde La Caixa ha tomado posiciones contra la constructora. En esa tesis los tres consejeros de estas entidades apoyan a los tres de Disa, incluido Demetrio Carceller, y a los dos que representan los intereses de Juan Abelló. De igual modo opinan el independiente Matías Cortés y al vicepresidente tercero de la constructora, Diogo Álvez Díniz.
En lo que toca al modo de proceder en Repsol, Del Rivero tiene enfrente a diez consejeros de un total de 19. Aunque al menos cinco de los opositores lo son de forma circunstancial (los tres de las cajas, Cortés y Díniz). Ello motiva que su influencia en Sacyr se haya multiplicado, tras convertirse en ansiados apoyos para los dos bloques de poder.
Renovación
Las cajas sindicaron sus participaciones en abril de 2010, a través de un pacto que les otorga el 12,11% de Sacyr y tres consejeros dominicales: Ángel López Corona, José Luis Méndez y Andrés Pérez, los dos primeros de la entidad gallega y el tercero de Caja de Ávila. De separar sus paquetes accionariales, Novacaixagalicia se quedaría con el 8,65% de Sacyr y un solo consejero por el sistema de representación proporcional; mientras las tres cajas restantes descenderían hasta el 1,95% cada una, muy por debajo del 5% que se requiere en Sacyr para estar en el órgano de decisión.
El pacto vence el 31 de diciembre y es prorrogable por periodos de un año. Fuentes cercanas al pool de entidades aseguran que la primera de esas renovaciones está asegurada. Para presentar cualquier objeción existía un plazo que finalizaba el pasado viernes 30 de septiembre y parece que no ha habido manifestaciones en contra.
Lejos de desbaratar la alianza, el pasado viernes las cajas actuaron en bloque en el consejo de Sacyr al pedir una solución pactada con La Caixa en el conflicto con Repsol. De forma paralela, reclaman a Sacyr que se disponga a analizar desinversiones para rebajar la actual deuda de 11.194 millones.
Pedir dimisiones "no se plantea a día de hoy"
En virtud del pacto de accionistas, las cajas presentes en el capital de Sacyr tienen la mayor representación entre los distintos partícipes en la Comisión Ejecutiva, con dos sillones de un total de siete miembros. Son Ángel López Corona y José Luis Méndez, ambos del entorno de Novacaixagalicia.
A pesar de la relevancia de la Comisión, en Sacyr ha sido extraña hasta ahora su convocatoria. En todo 2010 no se reunió a este grupo de notables, mientras el consejo de administración lo hizo hasta en 11 ocasiones a lo largo del ejercicio.
Sin embargo, en 2011 parece que la tónica será distinta y que el papel de la Comisión Ejecutiva será de mayor influencia. Fuentes cercanas al grupo de construcción aseguran que fue en este órgano de gobierno de Sacyr donde se pidió a Luis del Rivero que llamara a un consejo extraordinario, solo dos días antes del consejo ordinario de Repsol celebrado el 28 de septiembre. Fue para analizar el pacto con Pemex.
Las cuatro cajas que sindicaron su voto en abril de 2010 también tienen un representante en la Comisión de Estrategia e Inversiones, idéntica representación a la que se les ha otorgado en la Comisión de Auditoría y en la de Nombramientos.
Las cajas han venido jugando el papel de accionista tranquilo. Ahora sus votos deciden. "El único interés que nos mueve es defender nuestras inversiones", comentaban ayer desde una de las cuatro aliadas. ¿Esa defensa incluye la petición de un relevo al frente de Sacyr? De momento, parece que no. La misma fuente asegura que "el cambio al frente de la compañía no se ha planteado ni se hará a no ser que no exista otra salida. Nuestra intención es buscar y provocar el consenso entre los distintos frentes de accionistas".
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