lunes, 18 de abril de 2011

Pasión murciana / Inmaculada Reverte

La Región vivirá estos días inmersa en su pasión por la Semana Santa. Coloraos y Salzillos en Murcia; Marrajos y Californios de Cartagena; Blanco y Azul lorquinos; tambores que desde Mula y Moratalla laten en toda la geografía murciana como un solo corazón. La misma noche que comenzaba este estallido de pasión se producía el ascenso del Club Baloncesto Murcia a la ACB. Sobredosis de murcianía rota al conocer que el número de empresas de la Región ha caído un 20% desde 2007, casi el doble que la media nacional. 

Esta mezcla de noticias me lleva a cuestionarme una vez más cómo, con el potencial tan grande que tenemos, no acabamos de despegar. Me pregunto cuándo esta tierra decidió dar la espalda a lo que más fama y renombre internacional le ha dado siempre: la Huerta, con mayúsculas. 

¿Podríamos imaginar una Rioja sin vino? ¿Una Galicia sin marisco? ¿Una Asturias sin leche? ¿Una Andalucía sin aceite? ¿Una Extremadura sin dehesa? ¿Por qué hemos hecho una Murcia sin Huerta? Hemos abandonado nuestra identidad, no sé si por poca rentabilidad o por algún complejo de inferioridad difícil de entender.

Los bancales han ido dando paso a los campos de golf, que pueden estar bien para un rato, pero en el momento en que ingleses y alemanes se ven inmersos en una crisis económica como la actual, lo primero que se quitan son los caprichos de darle al palo al sur de Europa y pasan las vacaciones en casa haciendo sudokus antes de comer.

Y si en la dieta añaden verduras y hortalizas mejor para su salud y mejor para la economía murciana, que ya sabemos que los ladrillos y la hierba del green no son comestibles. Hemos de ver la agricultura como parte de la solución y no como el problema. Puede ser motor de investigación, innovación y hasta de turismo. 

¿No se hacen packs de dos días para visitar bodegas de vino? ¿Por qué no mostramos al mundo lo que mejor sabemos hacer? No avanzaremos como Región hasta darnos cuenta de que somos originales y tenemos joyas únicas, que nos aportan autenticidad y que tenemos que cuidar. El Mar Menor, una laguna peculiar que ha de ser explotada atendiendo a su particularidad, navegando a vela y sin motor.
 
O el Valle de Ricote, un gran desconocido al que no se acercará nadie si lo ultrajamos a ladrillazo limpio. Cartagena romana y Murcia musulmana, ‘piedras’ únicas y milenarias que miles de turistas chinos con una economía emergente querrán pagar por ver.

Nunca la copia ha superado al original. Pero nos hemos empeñado en copiar lo de otros y dejar nuestro gran legado original aparte. Queremos ahora imitar el modelo de parques de atracciones cuando ninguno de los actuales en España tiene ganancias. No creamos más los cantos de sirena. Nos prometieron un Real Murcia C.F. de 1ª división y nos lo devolvieron a la 2ª B. ¿Va a ser ésta la categoría de la Paramount de Samper?.

1 comentario:

Los Pilares de la Tierra dijo...

Muchas gracias por publicar aquí mi artículo. Solo un apunte: ya no pertenezco a las JJSS, y en la actualidad mis artículos los firmo solo a título personal.¡Un saludo!
Inma R.