MURCIA.- Entre 1.000 y 1.500 funcionarios públicos, según estimaciones de la Policía Local, han cercado esta noche la casa del presidente regional, Ramón Luis Valcárcel, en la Gran Vía, con una pancarta donde se le tacha de fascista, según 'La Verdad', en protesta por los recortes en las condiciones laborales de los funcionarios de la Comunidad que contempla la Ley de Medidas Extraordinarias contra el déficit presentada ayer por el PP.
El presidente lleva varios días visiblemente nervioso, según personas próximas a él, como intuyendo que las próximas semanas puede estar en las primeras páginas de la prensa nacional por eventuales revelaciones de varias investigaciones en marcha que le involucran directamente tras varias denuncias ante Anticorrupción de dos conocidos letrados de Murcia, célebres por su acreditada independencia.
El presidente lleva varios días visiblemente nervioso, según personas próximas a él, como intuyendo que las próximas semanas puede estar en las primeras páginas de la prensa nacional por eventuales revelaciones de varias investigaciones en marcha que le involucran directamente tras varias denuncias ante Anticorrupción de dos conocidos letrados de Murcia, célebres por su acreditada independencia.
Miles de funcionarios, convocados de urgencia por los sindicatos, han llenado una Gran Vía cortada al tráfico tras abandonar la plaza de San Bartolomé donde se inició la protesta. A Valcárcel, que tenía previsto acudir a la sede de la Cámara de Comercio, en la plaza de San Bartolomé del centro de Murcia, a recibir el premio Destacados de la Cadena Ser, le esperaban empleados cientos de públicos concentrados. Los funcionarios han colgado una pancarta con la leyenda 'Valcárcel fascista' sobre un vehículo que creían el del presidente.
La protesta ha llevado a los organizadores del acto a suspenderlo, por lo que Valcárcel no ha acudido a la plaza de San Bartolomé. Los funcionarios, convocados por los sindicatos, se han dirigido a la sede del Gobierno regional, cortando la Gran Vía en su marcha hacia San Esteban.
Ante la numerosa presencia de manifestantes, la plaza de San Bartolomé, en donde se han lanzado huevos, se ha quedado pequeña. Por lo que muchos funcionarios han invadido sin previo aviso la Gran Vía, obligando a pararse a numerosos coches, que han sido desviados por la Policía Local.
De especial tensión ha sido la salida de algunos asistentes al acto, como el secretario general de la Consejería de Presidencia y vicesecretario del Partido Popular en la Región, José Gabriel Ruiz, que ha necesitado protección para abandonar la Cámara de Comercio ante el acoso e incluso golpes de algunos empleados públicos que le increpaban.
Junto a él se encontraba el senador popular Pedro Manuel Hernández y Arturo Giménez, militante del PP y ex alto cargo del Servicio Murciano de Salud.
La Gran Vía de Murcia estuvo cerrada varias horas. El grupo mayoritario de manifestantes, entre los que había numerosos sindicalistas y profesores afectados por la eliminación de algunos complementos en sus nóminas, continuó hasta el Plano de San Francisco.
A la altura de la calle Platería otro grupo de personas -cerca de un centenar- se quedó en las inmediaciones del edificio del antiguo Banco Exterior, donde tiene su nueva residencia el presidente regional, y elevó sus soflamas contra los recortes. Allí permanecieron alrededor de media hora.
Una docena de agentes de la Policía Nacional y Local tuvieron que escoltar esta noche a tres altos cargos del PP tras ser golpeados e insultados por varios manifestantes, enervados por las últimas medidas de recorte salarial a los funcionarios adoptadas por el Gobierno regional.
El senador nacional por Murcia Pedro Manuel Hernández López; el secretario general de la Consejería de Presidencia y Administraciones Públicas, José Gabriel Ruiz, y el ex subdirector de Gestión de Servicios Generales de La Arrixaca y ex director de Gestión del Morales Meseguer, Arturo Giménez, fueron increpados a la salida de la Cámara Oficial de Comercio, donde estaba prevista la asistencia del presidente regional, Ramón Luis Valcárcel, en un acto de la Cadena Ser, cuando caminaban por el callejón de San Bartolomé, en Murcia.
Desde aquí hasta la plaza de Santo Domingo les gritaron, les llamaron «fascistas», «sinvergüenzas» e «hijos de puta», les arrojaron botellas de agua, les escupieron y también les arrinconaron, hasta el punto de que los agentes de Policía no lograron impedir que fueran zarandeados y vilipendiados.
La Gran Vía de Murcia estuvo cerrada varias horas. El grupo mayoritario de manifestantes, entre los que había numerosos sindicalistas y profesores afectados por la eliminación de algunos complementos en sus nóminas, continuó hasta el Plano de San Francisco. A la altura de la calle Platería otro grupo de personas -cerca de un centenar- se quedó en las inmediaciones del edificio del antiguo Banco Exterior, donde tiene su nueva residencia el presidente regional, y elevó sus soflamas contra los recortes.
Allí permanecieron alrededor de media hora. El secretario general de UGT, Antonio Jiménez, desconocía la agresión a los miembros del PP e indicó que la dureza de las medidas anunciadas por el Ejecutivo murciano han levantado los ánimos de la gente, «aunque hay que reprobar cualquier actitud de violencia, eso sí es inadmisible».
La Gran Vía de Murcia estuvo cerrada varias horas. El grupo mayoritario de manifestantes, entre los que había numerosos sindicalistas y profesores afectados por la eliminación de algunos complementos en sus nóminas, continuó hasta el Plano de San Francisco.
A la altura de la calle Platería otro grupo de personas -cerca de un centenar- se quedó en las inmediaciones del edificio del antiguo Banco Exterior, donde tiene su nueva residencia el presidente regional, y elevó sus soflamas contra los recortes. Allí permanecieron alrededor de media hora.
Una docena de agentes de la Policía Nacional y Local tuvieron que escoltar esta noche a tres altos cargos del PP tras ser golpeados e insultados por varios manifestantes, enervados por las últimas medidas de recorte salarial a los funcionarios adoptadas por el Gobierno regional.
El senador nacional por Murcia Pedro Manuel Hernández López; el secretario general de la Consejería de Presidencia y Administraciones Públicas, José Gabriel Ruiz, y el ex subdirector de Gestión de Servicios Generales de La Arrixaca y ex director de Gestión del Morales Meseguer, Arturo Giménez, fueron increpados a la salida de la Cámara Oficial de Comercio, donde estaba prevista la asistencia del presidente regional, Ramón Luis Valcárcel, en un acto de la Cadena Ser, cuando caminaban por el callejón de San Bartolomé, en Murcia.
Desde aquí hasta la plaza de Santo Domingo les gritaron, les llamaron «fascistas», «sinvergüenzas» e «hijos de puta», les arrojaron botellas de agua, les escupieron y también les arrinconaron, hasta el punto de que los agentes de Policía no lograron impedir que fueran zarandeados y vilipendiados.
La Gran Vía de Murcia estuvo cerrada varias horas. El grupo mayoritario de manifestantes, entre los que había numerosos sindicalistas y profesores afectados por la eliminación de algunos complementos en sus nóminas, continuó hasta el Plano de San Francisco. A la altura de la calle Platería otro grupo de personas -cerca de un centenar- se quedó en las inmediaciones del edificio del antiguo Banco Exterior, donde tiene su nueva residencia el presidente regional, y elevó sus soflamas contra los recortes.
Allí permanecieron alrededor de media hora. El secretario general de UGT, Antonio Jiménez, desconocía la agresión a los miembros del PP e indicó que la dureza de las medidas anunciadas por el Ejecutivo murciano han levantado los ánimos de la gente, «aunque hay que reprobar cualquier actitud de violencia, eso sí es inadmisible».
Los líderes sindicales de UGT y CC OO en la Región, Antonio Jiménez y Daniel Bueno, se encontraban presentes en la protesta, si bien no la encabezaban. Los funcionarios han acudido con emblemas de las organizaciones sindicales pero no con una pancarta tras la que agruparse. También se ha acercado a la concentración de empleados públicos la candidata socialista Begoña García Retegui.
A las 9 de la mañana de mañana se ha convocado una concentración y una manifestación ante la Asamblea Regional de Murcia, en Cartagena, "para impedir que los diputados accedan a votar la ley de recortes", como la denomina la federación regional de Enseñanza de UGT, en el pleno convocado para ello a las 10:30 horas, según ha acordado hoy la Junta de Portavoces de la Cámara legislativa.
"En la Región de Murcia somos más de 22.000 docentes, ¡entre todos tenemos que impedirlo!", añade en su comunicado UGT.
"¡No lo vamos a tolerar!", señalan todos los sindicatos en un comunicado conjunto en el que califican de "atraco" y "agresión brutal a los servicios públicos regionales" la proposición de ley del PP, que pretende ahorrar unos 300 millones de euros a las arcas públicas autonómicas para reducir el déficit público.
Los sindicatos expresan "su indignación por el contenido de esta proposición y las formas desleales y autoritarias en las que se desarrolla", pues, en su opinión, "el Gobierno y el PP de Murcia se ceban con los empleados públicos para afrontar las consecuencias de su mala gestión de la crisis financiera actual, producto de políticas apoyadas en la especulación y el despilfarro".
"Hemos asistido durante años a la mofa de los portavoces del PP murciano al Gobierno central con motivo de las medidas que éste ha puesto en marcha contra el déficit público, y ahora, la proposición que presenta a votación supera en dureza y en formas desleales a todo lo conocido", añaden.
En su opinión, esta propuesta "dinamita 12 años de acuerdos y de mejoras para el colectivo de empleados públicos, basados en la práctica de la negociación colectiva", y dejan a éstos "sin voz para hacer frente a estos atropellos", que "suponen una pérdida de empleos, efecto inmediato de un recorte a los servicios públicos, y no sólo a los intereses particulares de sus empleados".
"Al altísimo precio en forma de desempleo regional se unen estas medidas de atraco al colectivo de empleados públicos de la Región, a los que se les hace pagar una política descerebrada que pretende ocultar con portavoces saltimbanquis la cruda realidad de nuestra situación económica", concluyen Csif, Sterm-Intersindical, Anpe, Satse, UGT y CCOO.
Que Valcárcel dé la cara
Que Valcárcel dé la cara
La viceportavoz del PSRM-PSOE en la Asamblea Regional, Begoña García Retegui, ha afirmado que es "inaplazable" que el presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, "dé la cara en relación con los recortes anunciados por el Gobierno regional y que serán aprobados por el PP en el Parlamento autonómico sin debate este jueves", puesto que, ha reprobado, "lesiona los derechos de los empleados públicos en vez de acabar con el despilfarro".
A su juicio, "ante un recorte de semejante envergadura, sin negociación previa, sin ningún acuerdo, sin ningún tipo de explicación, requerimos a Valcárcel para que se persone en la Asamblea Regional y dé explicaciones a los ciudadanos de por qué ha elegido lesionar los derechos de los empleados públicos en lugar de haber acometido las reformas que la Administración regional".
Entre ellas, ha subrayado, "haber acabado con el despilfarro y con el descontrol del gasto público". Al hilo, García Retegui ha recordado que ninguna CCAA "ha tenido que infringir un daño semejante a sus empleado públicos, ni ninguna lo ha hecho".
Razón por la que ha considerado que si el PP "hubiera hecho los deberes, si hubiera reducido sus chiringuitos públicos, el número de asesores, de personal eventual de gabinete, el descontrol y el despilfarro, los gastos de protocolo, publicidad y propaganda, pues no habríamos tenido que llegar a esta situación".
No obstante, ha manifestado, "una vez aquí, lo que no tiene justificación alguna es que se elija la vía de reducir derechos, porque no se reducen sólo salarios sino también derechos, de los empleados públicos".
Para la viceportavoz socialista, "lo más grave quizá sea la exposición de motivos que da el Gobierno regional, después de casi 16 años gobernando y siendo responsable de la Administración, de por qué se practica la reducción".
"En ella se habla poco más o menos de que el Gobierno regional del PP ha venido manteniendo privilegios a los trabajadores, habla de que los empleados públicos son poco más o menos que vagos y maleantes a los que hay que aplicar ahora un correctivo", ha comentado García Retegui, quien ha resaltado que "la rapidez en el recorte de salarios y derechos a los empleados públicos que se plantea el Gobierno de Valcárcel contrasta con el amplio margen de tiempo que se da para reducir el número de entes y empresas públicas".
De forma que "se incumplen todos los compromisos con el Ministerio de Economía, con la Asamblea Regional y los propios acuerdos del Consejo de Gobierno, pues Valcárcel nos contó hace casi un año que iba a reducir el número de esos entes y de que iba a practicar la austeridad".