MURCIA.- El actual secretario general del PSRM-PSOE, Pedro Saura, no será con toda seguridad el candidato socialista a la presidencia de la Comunidad Autónoma de Murcia en las elecciones autonómicas de 2011, según fuentes solventes de la sede de Ferraz. El detonante parece haber sido el desmembramiento secuencial de la organización en Cartagena, Librilla, San Pedro del Pinatar, Abanilla o Abarán, con el elevado riesgo de contagio.
La decisión respondería, pues, a un criterio sólido de la dirección federal del partido, concretamente de la secretaria de Organización, Leire Pajín porque, los socialistas murcianos ya no ilusionan para nada al electorado de izquierdas con su actual dirección, ni siquiera a gran parte de sus propias filas, desde donde ha comenzado a prosperar la idea de mejor candidaturas independientes locales que pechar con el lastre de un ticket electoral con Saura para las elecciones autonómicas y municipales.
La Ejecutiva federal desea ahora al frente de la candidatura del PSRM a una cara nueva y de cierto prestigio entre la izquierda sociológica. No parecen tener ya nada que hacer ninguna de las viejas glorias del PSRM, donde se avecina poco menos que una refundación, por lo que se descarta al actual delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, susceptible también de ser cesado una vez acabe el verano por su archidemostrada incompetencia para hacer remontar al PSRM desde la sima en que ambos máximos responsables políticos lo han hundido.
Una reciente encuesta del CIS, la incapacidad manifiesta del tándem Oñate-Moreno para conjurar las escisiones en marcha y la falta de apoyo fáctico de la agrupación de Cartagena, la más importante del PSRM, a la sede regional de Princesa, serían las tres causas para activar a Ferraz y precipitar así un proceso que ya estaba, más o menos, diseñado desde hace muchos meses ante la depresión y práctica inactividad orgánica.
Saura estaría literalmente solo desde hace meses y así se lo viene confesando a los pocos que acudían a visitarlo, a algunos de los cuales les ofrecía la posibilidad incluso de engrosar una teórica candidatura suya para las próximas elecciones autonómicas en un intento de demostrar la vigencia de un liderazgo que, en realidad, nunca existió.
La venganza de Fuentes Zorita con el PSOE de Zapatero tras ser destituido por el Gobierno socialista y la designación de Charo Quesada como su sustituta al frente de la CHS, a instancias del secretario general del PSRM, debilitaron definitivamente su posición frente a la izquierda murciana, para la que quedó bastante desenmascarado vista su complacencia sostenida con el soporte económico de Valcárcel y su comportamiento respecto al PP en la Asamblea Regional.
Ante esa situación, el delegado del Gobierno ha venido haciendo por su parte una soterrada campaña política personal para intentar reunir la suficiente legitimidad orgánica como para aparecer públicamente como alternativa en su momento o designar a su hija como depositaria de esos apoyos recogidos. Tal es así, que el PSRM cartagenero le advirtió hace poco que se abstuviese de hacer esa campaña -repleta de promesas de futuros cargos a quienes le han creído- más abajo del puerto de la Cadena.
Ahora parece que Tovar será relevado en un Consejo de Ministros del mes de septiembre para que otra persona de mayor confianza de Moncloa y/o Ferraz dirija políticamente la campaña electoral de 2011 en la Región de Murcia, cuyas principales candidaturas serán inducidas y no del todo decididas aquí. Pedro Saura no está ya en condiciones de seguir prometiendo puestos en esas listas porque el centro de gravedad del nuevo poder socialista regional estará lejos de él.
La decisión respondería, pues, a un criterio sólido de la dirección federal del partido, concretamente de la secretaria de Organización, Leire Pajín porque, los socialistas murcianos ya no ilusionan para nada al electorado de izquierdas con su actual dirección, ni siquiera a gran parte de sus propias filas, desde donde ha comenzado a prosperar la idea de mejor candidaturas independientes locales que pechar con el lastre de un ticket electoral con Saura para las elecciones autonómicas y municipales.
La Ejecutiva federal desea ahora al frente de la candidatura del PSRM a una cara nueva y de cierto prestigio entre la izquierda sociológica. No parecen tener ya nada que hacer ninguna de las viejas glorias del PSRM, donde se avecina poco menos que una refundación, por lo que se descarta al actual delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, susceptible también de ser cesado una vez acabe el verano por su archidemostrada incompetencia para hacer remontar al PSRM desde la sima en que ambos máximos responsables políticos lo han hundido.
Una reciente encuesta del CIS, la incapacidad manifiesta del tándem Oñate-Moreno para conjurar las escisiones en marcha y la falta de apoyo fáctico de la agrupación de Cartagena, la más importante del PSRM, a la sede regional de Princesa, serían las tres causas para activar a Ferraz y precipitar así un proceso que ya estaba, más o menos, diseñado desde hace muchos meses ante la depresión y práctica inactividad orgánica.
Saura estaría literalmente solo desde hace meses y así se lo viene confesando a los pocos que acudían a visitarlo, a algunos de los cuales les ofrecía la posibilidad incluso de engrosar una teórica candidatura suya para las próximas elecciones autonómicas en un intento de demostrar la vigencia de un liderazgo que, en realidad, nunca existió.
La venganza de Fuentes Zorita con el PSOE de Zapatero tras ser destituido por el Gobierno socialista y la designación de Charo Quesada como su sustituta al frente de la CHS, a instancias del secretario general del PSRM, debilitaron definitivamente su posición frente a la izquierda murciana, para la que quedó bastante desenmascarado vista su complacencia sostenida con el soporte económico de Valcárcel y su comportamiento respecto al PP en la Asamblea Regional.
Ante esa situación, el delegado del Gobierno ha venido haciendo por su parte una soterrada campaña política personal para intentar reunir la suficiente legitimidad orgánica como para aparecer públicamente como alternativa en su momento o designar a su hija como depositaria de esos apoyos recogidos. Tal es así, que el PSRM cartagenero le advirtió hace poco que se abstuviese de hacer esa campaña -repleta de promesas de futuros cargos a quienes le han creído- más abajo del puerto de la Cadena.
Ahora parece que Tovar será relevado en un Consejo de Ministros del mes de septiembre para que otra persona de mayor confianza de Moncloa y/o Ferraz dirija políticamente la campaña electoral de 2011 en la Región de Murcia, cuyas principales candidaturas serán inducidas y no del todo decididas aquí. Pedro Saura no está ya en condiciones de seguir prometiendo puestos en esas listas porque el centro de gravedad del nuevo poder socialista regional estará lejos de él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario