sábado, 24 de julio de 2010

Mantenga los buenos modales durante sus vacaciones

LONDRES.- En plena época de vacaciones, un viaje al extranjero nos espera a muchos de nosotros. Días relajados, temperaturas apacibles y el ritmo relajante que se produce al desconectar. Sin embargo, con frecuencia esto puede provocar que olvidemos nuestros modales.

El estrés de un viaje puede poner a prueba nuestro comportamiento, incluso antes de que hayamos llegado a nuestro destino, y las ajustadas condiciones de los aviones vienen a decir que las buenas maneras son primordiales.

No invada el territorio de los pasajeros vecinos: mantenga los codos bien colocados; recline su asiento con cuidado para evitar una invasión repentina del espacio limitado para las piernas de los pasajeros de atrás. Una conversación cordial con los compañeros de al lado puede ser agradable, pero hay que saber cuándo callarse.

Beba con moderación, un comportamiento bullicioso importunará (e irritará) a los pasajeros de al lado. Ayude a los ancianos o a aquellos de pequeña estatura a coger o a sacar sus maletas de los compartimentos que hay sobre la cabeza. Sea paciente cuando haya que desembarcar y recuerde dar las gracias al personal del vuelo por los servicios prestados.

Cumplir con los costumbres en el extranjero mientras viajamos es esencial, así que empiece a leer esa parte aburrida del principio de la guía turística sobre las buenas costumbres y las buenas maneras de su destino elegido.

Esté pendiente de cómo se comportan los que le rodean y actúe en consecuencia. Evite la arrogancia de imaginar que todo el mundo durante sus viajes habla su idioma - o debería hacerlo. Esté atento a cualquier salida de tono con antelación, como por ejemplo mostrar la planta de sus pies en Tailandia o comer con su mano izquierda en India.

Investigue las buenas maneras que uno necesitará en el día a día, sobre todo en lo referente al aspecto económico, como por ejemplo regatear a alguien o dejarle propina. Esté pendientes de sus compañeros de viaje. Aténgase a los planes, escuche lo que ellos quieren hacer y cumpla con el presupuesto acordado.

La playa es una zona pública un tanto rara, donde nos desnudamos como si estuviéramos en ropa interior.

Con respecto al espacio de otras personas, mantenga una distancia considerable de su toalla con la del más cercano. No olvide que la arena llega a todos lados, así que tenga cuidado a la hora de sacudir la toalla teniendo en cuenta la dirección del viento.

La música debería escucharse sólo con auriculares, nunca con altavoces.

El bañador debería proteger su intimidad. Bañarse haciendo 'topless' debería hacerse en playas aisladas o abandonadas. Nunca se quede mirando fijamente ni clave tus ojos sobre las personas que están tomando el sol. Cúbrase con algo en tiendas o restaurantes que estén cerca de la playa.

En los hoteles, vista de forma apropiada en las zonas públicas. Aunque esté volviendo de la piscina, asegúrese de estar seco y cubierto. Los bares de los hoteles son con frecuencia lugares tranquilos y sofisticados, evite el comportamiento ruidoso o ebrio.

Deje su habitación ordenada para los servicios de limpieza, respete el mobiliario y deje las excentricidades de estrella del rock para los profesionales.

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