No obstante, el ajuste ha sido "relativamente pequeño" y la serie presenta el segundo mejor dato desde que se inició el cómputo de la misma aunque todavía predomina una visión pesimista sobre la situación.
En el informe se pone de manifiesto que "la marcha del desempleo y el arranque de la campaña turística de verano deben sumarse a los indicadores de consumo duradero" al objeto de que la incertidumbre que aún rodea a la economía española y de la Región "se amortigüe".
Las expectativas optaban por el mantenimiento de la situación; mientras que los optimistas, por su parte, fueron sólo el 7% para el momento actual.
En este sentido, "parece que las expectativas sobre el turismo son netamente mejores que en el ejercicio pasado, aunque a costa de importantes reducciones en los precios de venta".- (NEM)
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