Esta circunstancia no supondrá mayor contrariedad para los cooperativistas.
Pedro Martínez, presidente de la cooperativa, ha explicado que el local se vendió a otra sociedad, según 'La Verdad'.
Entre los cooperativistas se encuentran el presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, el concejal de Hacienda de Murcia, Joaquín Moya Angeler, el ex concejal socialista de Urbanismo de Lorca, Josías Martínez, así como abogados, notarios y médicos. La operación del local comercial no incumbe a todos, sino a 16 cooperativas -entre los que no se encuentra Valcárcel- que compraron los bajos. El edificio tiene 700 metros cuadrados por planta.
Moya Angeler y Pedro Martínez han explicado a La Verdad que en un plazo de dos a tres meses se entregarán las viviendas a los propietarios. Este último no ofrece detalles de la operación comercial porque señala que no está autorizado.
«De eso se encarga una sociedad de un grupo de cooperativistas. Sólo le puedo decir que ese local se vendió y punto. No sé nada de Zara», explicó.
Zara cuenta con otros cuatro establecimientos en Murcia ( Avenida de la Constitución, Nueva Condomina, Thader y Las Atalayas).
El responsable de comunicación del Grupo Inditex, Raúl Estradera, ha explicado a esta Redacción que «hubo conversaciones para alquilar el local, pero finalmente no ha llegado a concretarse nada. No es que hayamos cambiado de intenciones, sino que no se ha concretado esa posibilidad. Hubo contactos y acuerdos de inicio, pero no se cerró el acuerdo». Sobre los motivos y las cifras de la operación, Estradera explicó que no suelen dar esa información.
El concejal Moya Angeler, quien invitó a Valcárcel a entrar en la cooperativa, espera que en mayo puedan ocupar las viviendas. Explica que el edificio está repartido en 24 propiedades con superficies que oscilan entre los 120 y 220 metros cuadrados útiles. Los precios de origen de cada vivienda oscilan entre los 30 y 50 millones de pesetas, a los que se han sumado las derramas.
«Se trata de precios de la época. Estamos hablando de una cooperativa que se inició hace muchos años», puntualiza. Valcárcel comentó hace tres años que su vivienda, en la sexta planta, le costará unos 100 millones de pesetas, para lo cual pidió una hipoteca.
Añade Moya Angeler que el reparto de las viviendas se hizo por sorteo y que todas tienen hipotecas. «Los precios son los que son porque se trata de una cooperativa, que se rige por unas normas muy concretas, donde hay que respetar los turnos y no se puede revender». Sobre los bajos, comenta que «Zara no viene y están buscando otras firmas. Esto no afecta a todos los cooperativistas, sino al 80%».
El concejal murciano apunta que la operación del inmueble de la Gran Vía de Murcia la inició hace casi diez años una empresa de Lorca especializada en estos proyectos. Compró el edificio a Metrovacesa por unos 2.400 millones de pesetas. Metrovacesa, que promovió el complejo comercial Thader, había adquirido a su vez el inmueble -7.000 metros cuadrados- a otra sociedad.
La historia del bajo comercial ha ido en paralelo a las obras. Primero lo compró el Grupo Hispania, dirigido por Trinitario Casanova. El acuerdo con el promotor de la polémica urbanización de La Zerrichera de Águilas se rompió y un grupo de 16 cooperativistas se hizo con los bajos por 2.000 millones de pesetas.
La Concejalía de Urbanismo abrió en 2007 expediente sancionador al edificio de la Gran Vía número 9, (edificio Banco Exterior de España), del que es cooperativista el presidente Valcárcel, por haber iniciado las obras del ático antes de la aprobación definitiva del Plan Especial de Reforma Interior.
Dicho plan especial fue aprobado en esa misma fecha con los votos favorables en solitario del PP -que tiene mayoría absoluta- y en contra del PSOE y de IU-Los Verdes.
Sin embargo, las obras del ático, en el que se construyen tres viviendas abuhardilladas, de 170 m2, 219 m2 y 283 m2, estban ya casi terminadas.