lunes, 2 de junio de 2008

Mendoza y Costa Morata en la picota primaveral / Apunte de Argárico

El Vaticano asiste expectante al duelo de intereses entre el presidente de la Fundación “San Antonio”, José Luis Mendoza, y el obispo de la Diócesis de Cartagena, monseñor Reig Pla, pero sin pronunciarse oficialmente para desautorizarlo. Cuando el prelado no cede, sus razones tendrá. Y cuando el arzobispo de Granada y metropolitano, monseñor Martínez, lo apoya sin fisuras, no creo sea para importunarse con Roma.

Ambos tienen más información de la que trasciende y alguien desde allí les anima a seguir, seguro de que les asiste la razón canónica y de que se la van a dar en los dicasterios. Como mínimo, solución salomónica de consolación para no desairar al caballero de la Orden de San Gregorio y supuesto bachiller superior.

Mendoza ha quemado ya todas sus naves y tiene prisa porque el obispo se crea perdedor. El abandono del hasta ahora rector de la Universidad Católica, Antonio Montoro, miembro del Opus Dei, por su cercanía a Reig, es un signo claro de que la balanza se inclina ahora hacia la plaza de Belluga y de que la extraña carta privada del secretario de Estado Bertone, la injerencia inaceptable del cardenal arzobispo de Madrid, Rouco Varela, así como de la Conferencia Episcopal, y las advertencias forzadas del Nuncio Monteiro de Castro, no trascienden a categoría porque ahora son anécdotas frente a una fuerte argumentación jurídica más que históricamente documentada. No digo ya el cable de ambigüedad lanzado por Valcárcel en la espera de ser rector de la UCAM cuando deje San Esteban, según lo prometido por Mendoza.

Maestro en el manejo de las flaquezas de la condición humana, Mendoza parece haber calculado mal esta vez al jugar demasiado fuerte para arrebatar la UCAM a su legítima propietaria, que no es otra que la Diócesis de Cartagena. Poca gente sabe que la UCAM nació también para poder sufragar con cierta dignidad los gastos de unos sacerdotes jubilados y necesitados de asistencia por ser vitalmente dependientes.

Y, además, porque la sede episcopal estaba virtualmente en quiebra técnica durante la larga etapa de monseñor Azagra, ahora obispo emérito. Parece que Mendoza nunca cumplió la parte de su compromiso porque le era políticamente más rentable llevar su óbolo al Papa. Por eso, Cañizares y Ureña nunca rechistaron ni exigieron la legítima. Al contrario, utilizaron su silencio en beneficio de su propia buena suerte posterior.

Reig ha tragado por prudencia con el incumplimiento hecho norma por Mendoza pero no ha cedido a la trágala de que, encima, le arrebatase la titularidad del centro universitario, que legalmente le corresponde a tenor de un dictamen del Consejo de Estado español interpretando correctamente los vigentes acuerdos con la Santa Sede.

A diferencia de Cañizares y Ureña, este obispo no antepone su interés en los ascensos eclesiales a sus obligaciones pastorales del momento y calcula perfectamente el riesgo de cada uno de sus movimientos en la creencia de que se mueve con red si por tal se entiende toda la documentación jurídica al respecto, que obra en la secretaría del Palacio Episcopal, litigios de Cañizares, conveniencias de Ureña y silencio cómplice de Azagra aparte.

Una de las incógnitas desde el comienzo de todo este proceso hace más de diez años es cómo escogió Azagra para tamaña empresa a un personaje con los antecedentes de Mendoza, lo promocionó luego Cañizares y no lo combatió finalmente Ureña. Porque, en el fondo, estamos hablando de un gran negocio y de dinero. A punto estuvo la UCAM de pasar a la órbita del CEU “San Pablo” siendo administrador apostólico monseñor Cañizares quien, por sus enfrentamientos con la Asociación Católica de Propagandistas, prefirió seguir encomendando a Mendoza su gestión y explotación pese a sus primeros conatos de desencuentro con el Movimiento Neocatecumenal y con el Opus Dei.

Las cosas que luego han trascendido desde dentro sobre los excesos de todo tipo por parte de Mendoza, sus continuas salidas de tono, las humillaciones reiteradas a los ex rectores Fernández Ardanaz y Montoro, el presunto tráfico de títulos propios, el escándalo sobre cierto trato vejatorio a profesores críticos, la campaña de desprestigio contra el vicerrector Higinio Marín, la truculenta adquisición de los terrenos de Los Dolores al Ministerio de Defensa, la recepción de cesiones municipales en Los Jerónimos y el manejo tan ortodoxo de las cuentas de la UCAM, hacen inexplicable la pasividad de la Iglesia durante tanto tiempo e increíble que la Agencia Tributaria no haya anunciado nunca una inspección fiscal en semejante avispero.

Como muy bien ha expresado Reig Pla todo esto es consecuencia de un intento de reinterpretar la historia…a conveniencia de determinados intereses particulares, que no de la Iglesia Católica ni de la Diócesis de Cartagena. Mientras monseñor Ureña se consideraba de paso en el palacio de la plaza de Belluga camino de ser, primero arzobispo y luego cardenal de la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana, el actual obispo vive Murcia como si fuera su mejor destino y sin pensar en más, dentro de un impropio juego de vanidades y ambiciones desmedidas de unos y de otros en España y Roma.

Precisamente con esas flaquezas humanas juega Mendoza en medio de un diabólico cerco tendido por él mismo. Y muchos se preguntan quién es, en realidad, este osado espontáneo de tan baja estofa, y cómo un personaje así, tan lerdo como para presidir una universidad, puede embarcar a todo un secretario de Estado vaticano después de ganarse a obispos, arzobispos, cardenales… ¿Seduce con tentaciones en forma de dádivas, compra conciencias a su manera, acaso juega habitualmente con las debilidades de los prelados por un “Rolex” de oro?

Parece que con Reig Pla ha pinchado en hueso porque ha resultado más “fenicio” que el propio Mendoza. El cartagenero puede haber encontrado un alicantino a su medida y, además, de Cocentaina. Ni los bravos alcoyanos han podido jamás con ellos pese a ser vecinos; se inventaron hasta una nueva comarca para no depender de los hijos de San Jorge.

El repudio a Costa Morata

También entre los ecologistas hay sus más y sus menos.

Parece que la decisión de que la plataforma "Murcia No Se Vende" no secunde la campaña "Costa contra la corrupción", destinada a recabar los 18.000 euros que pesan sobre el profesor aguileño Pedro Costa Morata, como consecuencia de una sentencia condenatoria del Juzgado de Lorca, hay que buscarla en su origen mucho más en las motivaciones de "Ecologistas en Acción de la Región de Murcia", que en excusas de su candidatura electoral por IU-Los Verdes al Senado hace tres meses. El repudio aflorado tiene más miga y mucho más fondo.

Porque, como ya se demostró en las elecciones de hace un año, este independiente, verde y de izquierdas, no arrancó suficientes votos ni en su propio pueblo al ser, desde hace casi treinta y cinco años, un veraneante más con alguna fama de manipulador entre ciertos sectores de la propia izquierda local más ilustrada. No es un enemigo para el PSRM ni para nadie aunque la "nomenklatura" de la reacción trate de hacerlo mártir con esta curiosa sentencia de primera instancia ya recurrida en segunda... y, si hace falta, hasta Estrasburgo a base de euros pedidos puerta a puerta.

Costa es un francotirador, de escasa relevancia ya, dentro del creciente movimiento ecologista español, que se especializó hace mucho tiempo en la casi exclusiva defensa del litoral, pero que tiene un afán de protagonismo individual que no encaja muy bien con lo que se lleva hoy de acción colectiva, mediática y de gran conexión con la opinión pública más concienciada. Le ha salido una muy fuerte competencia con "Greenpeace".

Levanta por eso mucho recelo entre figuras más jóvenes y con planteamientos muy distintos sobre la estrategia a seguir. Y, uno a uno, mucho menos valientes que él porque demostrado está que no tiene pelos en la lengua, ni en la pluma, aunque su discurso suene ya a muy conocido. Su excesiva confianza, por su larga militancia, y mucha vehemencia es precisamente lo que lo llevó ante un juez por lenguaraz.

Costa es un histórico, ahora de andar por casa, casi una pieza de museo, al que precisamente no se le debiera tratar con tanto desdén desde las filas del PSRM a causa de viejas rencillas y con tontas explicaciones de interpuestos, como que somos «un movimiento social independiente y apartidista, donde todo el mundo tiene cabida sin discriminación por razones de sexo, raza, creencia religiosa o afinidad política», precisamente antiguos sindicalistas de "Hidroelectrica Española", versus "Iberdrola", la empresa que tanto combatió Pedro en su día y hoy propietaria de la mayor parte de los terrenos a urbanizar en la Marina de Cabo Cope.


En "Ecologistas en Acción", "Greenpeace" o "ANSE" no goza Costa de un gran predicamento aunque finjan, cuando no hay más remedio, en un perfecto ejercicio de hipocresía en función de los objetivos irrenunciables y la imprescindible unidad de estas minorías en territorio tan sometido por la especulación urbanística. Lo que pasa ahora es que a José Ramón Jara le estorban estos movimientos sociales, asamblearios pero muy minoritarios, que tanto le obligan a mantener una pose izquierdista, que no desea, y a los que parece ha ordenado desactivar o instalar en la más trivial banalidad, como bien se pudo ver ya este sábado en la fracasada concentración de "Murcia No Se Vende".

Es la de Costa Morata la soledad del viejo triunfador de la lucha en 1974 contra la instalación de una central nuclear en Cabo Cope, promovida por "Hidroeléctrica", aunque luego reciba de sus femeninas manos, en lo que se percibe como gran contradicción, el premio nacional de medio ambiente que le concedió la ministra de Aznar, Isabel Tocino, hoy una radical, activa y comprometida con la energía nuclear en España. Y hay quien hasta dice, que como premio a haberselas jurado al PSOE de Felipe González-Alfonso Guerra-José Bono, que también lo repudió en su día al sentirse utilizado por Pedro Costa.

Costa Morata levanta ese lógico recelo entre ciertos ecologistas precisamente por quien le concedió ese tan cacareado premio en 1998, porque colabora regularmente en publicaciones muy marcadas por el tongo y porque tiene, o ha tenido, un despacho profesional-consulting abierto al público en Madrid, en la calle Francisco Silvela, para poder comer todos los días aprovechando también, y es legítimo, su proyección pública en estas cuestiones, llegado el caso. Pero en la vida, nadie le ha regalado nada a este huérfano de ferroviario pasado desde muy niño por internados de León, para más "pedigree" en la era Zapatero.

A veces, resulta que, tal vez en su afán de convertir al infiel, acepta Pedro el caramelo envenenado del adversario y realiza trabajos por encargo y remunerados. Parece el caso de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de la Región de Murcia, que preside el polémico José López Rejas, sobre qué hacer con el litoral murciano y que, según el propio Costa, no terminó de cobrar. IU-Los Verdes lo supo en su momento y no le puso objeciones porque el cambio de última hora desde la lista a la Asamblea Regional a la del Ayuntamiento de Murcia dicen que fue por no estar censado en la Región y no para "esconderlo" por miedo a que trascendiese en la campaña electoral.

Para muchos elementos clave de la izquierda murciana no es pues de fiar, entre muchas otras razones porque Costa no se confía a nadie, curtido ya a sus años en 101 batallas libradas en solitario y, a lo sumo, es más cercano con los compañeros de viaje que ha necesitado en cada momento para no ser desplazado del escenario, que tanto le gusta porque lo estima imprescindible para influir y que sus planteamientos sean considerados por la gente.

Lo que menos se tolera de Costa es su tendencia a repartir patentes verdes o lanzar anatemas ideológicos contra quien no comparte sus tesis, táctica o prioridades. Muchos no reconocen su autoridad porque lo perciben como un autoritario agitador fuera de tiempo y prefieren acercarse más a quien hoy tiene la mejor iniciativa y el favor de los medios en la lucha, más espectáculo, contra la urbanización salvaje del litoral, y que no son otros que los avezados, intrépidos, demócratas, universales, y mucho menos retóricos, miembros de "Greenpeace".

El gran argumento, más político, contra él es que ya no es capaz de mover a nadie, ni siquiera en su pueblo (pese a ser primo del actor Paco Rabal), tal como dice haber comprobado "Ecologistas en Acción", presidida en Murcia por la profesora Julia Martínez, cuando allí han celebrado acciones de protesta contra la "actuación de interés regional " en la Marina de Cope, cuna del propio Costa, un ecologista de otra época pero muy reacio a prescindir de las bambalinas porque todavía se siente útil aunque lo sea sólamente a su región de origen, tan poco agradecida a la postre con él aunque la central nuclear no se instalase realmente por la gran actividad sísmica medida en aquel paraje, hoy de nuevo en peligro.

Carlos Valcárcel, de nuevo presidente de la Cofradía de la Sangre sin mediar elecciones

MURCIA.- El sábado 31 de mayo finalizó el plazo de presentación de candidaturas para presidente de la Cofradía de la Preciosísima Sangre, que desfila la noche del Miércoles Santo en la Semana Santa murciana.

Solo se presentó la candidatura del actual titular y abogado Carlos Valcárcel Siso, hermano del presidente de la Comunidad Autónoma, para ser reelegido para otros cinco años, por lo que inicia un nuevo mandato por aclamación, y sin necesidad de celebrar elecciones.

En los últimos años, su nombre ha aparecido en los medios de comunicación ligado a su intervención profesional en varias operaciones de tipo comercial pero dentro del ámbito de la Región, que se han querido relacionar con su parentesco más que con un acreditado prestigio como abogado desde hace muchos años en la ciudad de Murcia.

De hecho, Carlos Valcárcel ha pasado y cobrado sus minutas, y liquidado sus correspondientes impuestos a la Hacienda Pública e ingresado el importe restante en cuentas corrientes, de las que es titular, en entidades españolas de crédito, tras concluir su concurso en todas y cada una de ellas.

En círculos periodísticos y de poder, se le considera el verdadero "cerebro" de la familia Valcárcel-Siso y le une desde su juventud, en grupos de coros y danzas, mas que una estrecha amistad con el promotor inmobiliario, ex concejal y militante del PP, Antonio Sánchez Carrillo.

La conspiración: de Calnegre al parador / Floren Dimas Balsalobre*

Puesta en valor», «progreso», «puestos de trabajo» , socorridos argumentos con los que se construyó, en medio de la maravillosa bahía de Águilas, un puerto deportivo que ha destruido y hurtado a los bañistas un gran tramo de su playa, sin haber logrado atraer el turismo de yate y joyería esperado, y finalmente los únicos puestos de trabajo ofertados, son los del que vigila los botes y el que pone gasolina a las motoras.

Eso sí, habrá servido para que unos cuantos tahures, se forraran con la compraventa de puntos de amarre de barcos, cuyos foráneos patrones nunca más fueron vistos cerca del lugar. Mi gozo en un pozo y la cuenta al maestro armero, con la especial gravedad de estar hablando de daños irreversibles, que no solamente destruyen paisajes, si no que contribuyen a empobrecer y desarticular, el sentido compartido de los valores históricos, monumentales y paisajísticos, sociales y económicos, de los pueblos mediterráneos.

El parador «que no sobresaldría de la muralla», en palabras de Miguel Navarro, ha robado el protagonismo a la Torre Alfonsina y aumenta su metastásico volumen, como un tumor maligno en el corazón de nuestro más querido emblema urbano, mientras que al otro lado de la Almenara la sombra de otra locura, se cierne sobre la costa de la Marina de Cope, acabe o no en un inmenso resort invendible y despoblado, por la explosión de la burbuja inmobiliaria y la crisis económica mundial, destruyendo nuestro hábitat más impoluto.

La «puesta en valor» anunciada sería, con mucho, para los que cojan el dinero y corran antes de la debacle final; el «progreso», el de las cuentas corrientes de los empresarios y políticos que intercambiaron leyes por dinero, para enladrillarnos el último paraíso del Mediterráneo, y los «puestos de trabajo» anunciados, del tipo de los que ofrecen los nórdicos vejestorios, de las lujosas urbanizaciones semidesiertas de Cabo Palos o Marina d'Or: limpiadoras y jardineros.

Todos estos vaticinios, no son teorías negativistas, si no tesis constatadas, contemplando con horror el arrasamiento de la costa al norte y al sur de Cabo Cope, atravesando la inmensa herida abierta en el espacio natural surcado por la «autopista de los resorts» y percibiendo la degradación de unos pueblos, inducidos a la codicia, a la pérdida de sus valores y economías sostenibles, por poco apoyo institucional que recibiesen, convirtiéndolos en dormitorios de camareros y limpiadoras.


Si ustedes evocan el final de El planeta de los simios, recordarán el espectáculo impactante de la estatua de libertad semienterrada en la arena, y sabrán que tal destino no fue fruto de la casualidad, ni de un cataclismo cósmico, si no de una conspiración que tuvo nombres y apellidos.

Los nombres y apellidos que ustedes conocen, y las fuerzas políticas y económicas que confabulan por acción u omisión sus interés políticos y económicos, personales y partidistas, para que un día, otra generación, pronuncie ante la visión devastada de la costa murciana, las mismas palabras de un Charlton Heston que, de rodillas sobre arena, golpea el suelo de impotencia, mientras lanza al espacio un grito desesperado: «Lo habéis destruido. Yo os maldigo a todos».

Cambiemos el futuro: movilicémonos contra la conspiración.

* Floren Dimas Balsalobre es miembro de la asociación para la Defensa del Patrimonio Cultural de Lorca.

La crisis reducirá el crecimiento regional murciano al 1,5% este año y empujará los precios hasta el 4,9 %

MURCIA.- Todavía no se le ve el fondo a la desaceleración económica que atraviesa el país, o mejor dicho, a las tres crisis simultáneas que nos aquejan (financiera, construcción y materias primas), de tal modo que los datos empresariales, de producción o macroeconómicos son -salvo excepciones- peores que los anteriores (el descenso en el crecimiento del PIB durante el primer trimestre es elocuente), interpreta hoy "La Verdad".

No es extraño, pues, que los informes de los equipos de análisis económico y financieros que estudian el desarrollo de cada autonomía sean cada vez más sombríos.

Funcas (la Fundación de las Cajas de Ahorro) ha actualizado los datos elaborados en diciembre del año pasado sobre la evolución de las distintas regiones y, por lo que respecta a Murcia, el enfriamiento es considerable. El Valor Añadido Bruto regional, VAB (que se identifica con el PIB a los precios básicos) sólo crecerá el 1,5%; es decir, 2,4 puntos menos que en el 2007. Este dato sería el más bajo, al menos desde el año 1995.

Tal vez por lo dicho más arriba, el Gobierno regional y los agentes sociales deben hacer esfuerzos suplementarios sobre las iniciativas ya tomadas para intentar taponar las brechas que se están produciendo en el mercado laboral.

Según los analistas de la Fundación, el sector que experimentará un peor comportamiento a lo largo del año será el de la construcción, que pasará de unas estimaciones expansivas del 3% a un decrecimiento del 2,2% a final de año.

La crisis se está notando especialmente al pasar el número de parados del sector de 7.500 en agosto del 2007 a más de 12.000 en abril, de ellos casi un tercio inmigrantes. El indicador del desempleo total pasará del 7,6% el año pasado al 9,1% estimado para el actual.

De ahí que haya sido bien acogida las iniciativa de la consejería de Empleo para formar a un buen número de inmigrantes de la construcción en paro -sin estudios primarios cerca del 60% de ellos- para que se puedan recolocar en otros sectores, fundamentalmente en industria, turismo e incluso como autónomos.

Sin embargo, según los datos de Funcas, la actividad agrícola -a la que acude gran número de extranjeros en paro como tabla de salvación- experimentará una pequeña caída respecto al año anterior. Los empresarios advierten a los demandantes de empleo sobre la precaria situación del campo por la falta de agua, la reducción de parcelas, la disminución de cosechas en algunos productos (pimientos, hortalizas) y la caída de determinados precios en origen (tomates), aunque el consumidor los pague a precios prohibitivos.

El sector industrial tiene mejores perspectivas -aunque el presente no sea óptimo- gracias a l os apoyos de los gobiernos central y regional, a las inversiones, a las exportaciones y a la apuesta decidida de los agentes sociales por la energía y las tecnologías de la información. Pese a todo, el incremento se quedará en el 2,5% (seis décimas menos que el año anterior) a causa del cambio de ciclo en España.

El índice de la producción industrial de marzo (último dato conocido) experimentó en Murcia una bajada interanual del 11,9% en marzo y del 2,2% en el primer trimestre, cifras muy alejadas de la positiva evolución acaecida un año antes.

La balanza comercial en enero y febrero de este año es, según datos del ICEX, peor que la de doce meses antes, no sólo por la caída de las exportaciones, sino por el desequilibrio comercial, de tal manera que la tasa de cobertura fue del 37% frente al 65% en el 2007.

El sector Servicios experimentará en la Región, según los datos de Funcas, la mayor desaceleración de los últimos seis años y pasará de un crecimiento del 4,2% en el 2007 a la mitad en este año.

Este macrogrupo (que representa dos tercios del PIB de la Región) está compuesto por talleres y comercios, turismo, tecnologías de la información y servicios a empresas. Las ventas han disminuido en los últimos meses, especialmente en marzo, con una caída del 8% interanual. Por otra parte, Murcia ha sido junto a Canarias y Andalucía la comunidad con mayor porcentaje (5%) de efectos de comercio impagados sobre vencidos.

Sin embargo, el empleo en este subsector ha crecido casi el 2% en lo que va de año. Sobre el turismo, actividad en la que hay puestas no pocas esperanzas, el número de visitantes se ha incrementado en el primer trimestre por encima de la media, aunque la estancia por cliente en los hoteles ha sido inferior al resto de zonas turísticas.

El retroceso de la producción industrial en Murcia preocupa a los empresarios

MURCIA.- Los empresarios murcianos parecen encontrarse realmente preocupados y sorprendidos por la intensidad del deterioro económico. Probablemente el último informe sea el menos optimista de cuantos han publicado y se encuentra lejos del ánimo esperanzador que habitualmente les acompaña, según "La Verdad".

El análisis realizado hace unas semanas sobre la situación actual y las perspectivas inmediatas son elocuentes. La CROEM indica que la mayoría de los indicadores coyunturales auguran una intensa desaceleración, «incluso más intensa de la que existe a nivel nacional».

Señala que en el segundo semestre del año pasado empezaron a registrarse los primeros síntomas y, pese al crecimiento del 3,8% anual, durante el primer trimestre de este año se han producido resultados desfavorables en la práctica totalidad de los sectores productivos, «aunque Murcia se encuentra en posición de fortaleza para afrontar la actual coyuntura, después de una senda de desarrollo económico intensa y prolongada».

Indican los empresarios que el repunte del paro, sobre todo en construcción, la elevada tasa de precios, la desaceleración del consumo y el retroceso en la producción industrial (muy elevada en marzo) son los aspectos más preocupantes de la situación actual.

Destaca en el análisis los pobres resultados de la industria murciana en el primer trimestre, pese a haber caído menos que el conjunto del país. La desaceleración se refrenda con la menor utilización de la capacidad productiva, que ha descendido al 63% y es compatible con el descenso inversor a comienzos de año y el deterioro del indicador sobre el clima industrial.

En cuanto a la construcción, la edificación residencial y la obra civil se encuentran en una delicada situación, «pese a que la recesión de la actividad constructora ha sido menos intensa en Murcia que en el resto del país. La situación es delicadísima».

La agricultura -afirman- ha registrado resultados satisfactorios hasta marzo, pese a la falta de recursos hídricos. En cuanto al sector servicios -indican los empresarios-, tampoco presenta síntomas que induzcan al optimismo, ya que tanto el comercio como el transporte y el turismo registran resultados mediocres.

(Vista parcial del Polígono Industrial Oeste de Murcia)

Diego de Ramón pregunta a Solbes cuánto ha invertido la CAM en obras sociales humanas

MURCIA.- El abogado Diego de Ramón, en un escrito dirigido al vicepresidente y ministro de Economía y Hacienda, el alicantino Pedro Solbes, se reserva el derecho de acudir al Tribunal de Cuentas de la Unión Europea y al Parlamento Europeo, para informarles acerca de las inversiones sociales humanas de la Caja de Ahorro del Mediterráneo y ver si realmente se ajustan a sus obligaciones legales.

En nombre de la Asociación Murciana de Afectados por el Síndrome de Fatiga Crónica y Fibromialgia, un 3,4% de la población, y ante el anuncio de creación de un depósito gubernamental de 10.000 millones de euros para ayudar a entidades financieras en apuros, De Ramón informa a Solbes que la CAM sigue endeudándose porque sigue subiendo la morosidad hasta de promotores con proyectos inmobiliarios condenados por el Parlamento Europeo.

"Y eso, teniendo en cuenta la grave crisis financiera, con posible imprudencia temeraria en expedientes concursales, de dudosa salida económica al 100%, por parte de la CAM".

El letrado advierte a Solbes antes "de acceder la CAM a ese auxilio de financiación sin depurar las responsabilidades de sus dirigentes", ya que doce de sus consejeros se han concedido 23 millones de euros en créditos "y el director general goza de un contrato blindado". Luego se pregunta: "¿Dónde están sus inversiones sociales humanas?", al referirse también a posible imprudencia temeraria financiera y hablar hasta de la compra de participaciones en bancos de Marruecos.

Diego de Ramón, antes de querer saber cuánto ha invertido en obras sociales humanas y, concretamente la CAM en la asociación que representa, y el grado de participación o audiencia a los colectivos afectados, recuerda a Solbes la reciente declaración de la agencia internacional de calificación de riesgo, "Moody's", poniendo en revisión la solvencia de la CAM.

El letrado quiere también que los gobiernos autónomos murciano y valenciano muestren los escritos dirigidos a la CAM en la exigencia de participación comparativa con otras cajas de ahorro, que ascienden hasta un 45% y más, sobre programas de ayudas sociales. Y cuál ha sido la última auditoría, sobre los fondos sociales europeos y del Estado español recibidos, a estos gobiernos.

También exige que la CAM muestre su gestión, tanto en Murcia como en la Comunidad Valenciana, en infraestructuras sociales de discapacitados y colectivos carentes de cualquier tipo de ayuda.

Ante tal quebranto social y humano, De Ramón anuncia que, de no obtener respuesta de Solbes, se dirigirá también a otras instituciones europeas competentes, al Banco Central Europeo, a la Organización Mundial de la Salud, Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional para informarles de las verdaderas políticas sociales de estas entidades financieras en los países que dicen aplicarlas y de los contratos blindados de los directivos de Cajas, que dicen ser sociales, para que sean examinados todos estos extremos de aplicación y su grado de cumplimiento.