lunes, 4 de diciembre de 2006

Los bancos restringen crédito para comprar suelo


La futura ley nacional del Suelo, actualmente en tramitación por el Congreso de los Diputados, ya hace notar sus efectos benéficos en las provincias del sureste peninsular a la hora de conseguir créditos para comprar terrenos en los que edificar posteriormente. Las entidades bancarias de Alicante, Almería y Murcia, al menos, han elevado el nivel cualitativo de exigencia y garantías de los créditos hipotecarios denominados "préstamos a promotor" para luego edificar viviendas.

Con esta nueva legislación, que entrará en vigor a comienzos de 2007, la valoración de cualquier suelo a la hora de tasarlo tendrá que ver mucho menos que hasta ahora con su expectativa urbanizadora que con su valor de calificación real en el momento de su adquisición como rústico.
Ante ese horizonte tan cercano, las entidades bancarias toman ya sus precauciones frente a la inseguridad de que ahora cualquier terreno rústico no termine siendo finalmente expropiado o no se recalifique nunca como urbanizable. La nueva ley estatal abarata considerablemente, incluso, los procesos para que las administraciones públicas se puedan hacer con cualquier terreno.

Esa ley ya tiene previsto que cualquier plan urbanístico reserve un 25% de su suelo para construir VPO y así contrarrestar el encarecimiento experimentado por la vivienda nueva, de hasta un 150%, entre 1998-2005, y un aumento del 500% del precio del suelo susceptible de ser urbanizado.

La nueva situación hace tremendamente difícil que ahora se lleve a cabo la AIR (Actuación de Interés Regional) de la Marina de Cope, en Águilas, la explosión urbanística de Mazarrón o sur del Mar Menor (con fuerte presencia de promotoras y constructoras alicantinas) y se demuestra lo innecesario de la nueva autopista de peaje Cartagena-Vera ante el parón a la especulación urbanística en todo el litoral meridional de la Región de Murcia y el levante almeriense, con el riesgo de ruina para su concesionaria, "Autopistas del Sureste", al menos que consiga cambiar las condiciones de su actual contrato con el Estado hacia la fórmula más ventajosa del "peaje en sombra", hasta para el tramo en servicio Crevillente-Cartagena. (NEM)