martes, 22 de agosto de 2006

La verdad sobre la asociación "Volver a la tierra"


Comunicado emitido por la asociación.

LA COORDINADORA DE LA ASOCIACIÓN “VOLVER A LA TIERRA” ANTE LA NOTICIA(*) APARECIDA EN EL DIARIO “LA VERDAD” DE MURCIA EN SU EDICIÓN DEL DOMINGO 6 DE AGOSTO DE 2006 QUIERE ACLARAR LO SIGUIENTE:

(*) Multan a tres ecologistas por construirse casas ilegales en un espacio natural de Moratalla. Pertenecen a “Volver a la tierra”, organización integrada en “Murcia No se Vende”.

Que independientemente de la exactitud y veracidad del contenido de la noticia, se aprecia una clara actitud tendenciosa a implicar, y por tanto a desprestigiar, con estos hechos a la Coordinadora La Región de Murcia No Se Vende (CLRMNSV); y más allá a los ecologistas en general. Para aquellos y aquellas que buscan la verdad –que no tiene porque coincidir con lo que dice “La Verdad”– con todos sus matices y su riqueza policromática, y no sólo la noticia sensacionalista del momento, van a continuación una serie de aclaraciones divididas en dos secciones: una en lo tocante a la implicación de la CLRMNSV en todo este asunto, y otra expresamente relacionada con los hechos que se relatan.

SECCIÓN I. Sobre “Murcia No Se Vende”.

1. Hay que dejar absolutamente claro que la CLRMNSV no tiene ninguna responsabilidad sobre los hechos acaecidos. La adhesión a la CLRMNSV es libre y no se investiga policialmente a las asociaciones y entidades que la integran, si los fines y estatutos –como es nuestro caso– son acordes con los principios de la Coordinadora, se les acepta.

2. “Volver a la tierra” no es una “asociación ecologista”; valores ecológicos impregnan ciertos puntos de sus estatutos, pero no son los únicos ni los más importantes. A los miembros –socios o simpatizantes– que solicitan derechos de usufructo de las tierras, una vez concedidos, son ampliamente autónomos para llevar a cabo sus proyectos y, como es lógico, cualquier actitud sancionable hacia sus socios y simpatizantes será responsabilidad únicamente de “Volver a la Tierra” y no de la CLRMNSV, que, repetimos una vez más, nada tiene que ver con los asuntos internos de las asociaciones y grupos que la integran.

3. Tildar de “ecologistas” a los tres miembros de “Volver a la tierra” implicados en los hechos que se describen en el artículo es, cuanto menos, una apreciación subjetiva por parte del periodista, cuyo fin parece ser desprestigiar al movimiento ecologista, ¿por qué no los llama “agricultores” si dedican parte de su tiempo a cultivar las tierras? Además como personas físicas nunca han tenido una relación directa con la CLRMNSV.

4. La asociación “Volver a la tierra” no sólo está integrada en la CLRMNSV, también, y desde hace mucho más tiempo, forma parte de la Plataforma Rural y del Consejo Sectorial del Medio Ambiente del Ayuntamiento de Moratalla, ¿por qué no se refleja este hecho junto al nombre de “Murcia No Se vende” en los titulares y en el interior del escrito?, ¿se “amortiguaría” el impacto que produciría en los lectores el nombre de la CLRMNSV al “difuminarse” junto a los otros? Además, ¿cuál es el fin que se persigue al colocar la fotografía de un socio de “Volver a la Tierra”, no implicado en los hechos mencionados, junto a otros miembros de la CLRMNSV, si no es el de evidenciar gráficamente la conexión de ambos grupos ante los lectores?. Por otra parte, los expedientes fueron abiertos a tres personas físicas y no a “Volver a la tierra”; estas personas participan activamente también en otros grupos que aquí no se mencionan –posiblemente por no estar relacionados con la ecología– además de en dicha asociación. Llegados a este punto se muestra evidente que el objetivo principal de los que están tras esta noticia es levantar “sospechas” y dudas sobre la coherencia y honestidad de la CLRMNSV a través de una asociación integrante de la misma, o mejor dicho, de dos socios y un simpatizante de la asociación “Volver a la tierra”.

5. Por último, ¿por qué aparecen estos hechos –la mayoría de ellos acaecidos varios años atrás y conocidos ampliamente por el Ayuntamiento de Moratalla– como noticia “novedosa” precisamente ahora? Sin duda, porque la CLRMNSV está adquiriendo gran protagonismo en el escenario político regional, por su coherencia y honestidad a la hora de denunciar las graves y peligrosas connivencias entre el sector político y el de los empresarios del ladrillo de nuestra Región. (Entre paréntesis: últimamente con las vistas puestas en el Noroeste, precisamente los lugares donde más operativa está “Volver a la tierra”.) Cualquier hecho que pueda servir para sembrar sombras sobre la imprescindible y valiosa labor de la CLRMNSV será vomitado y amplificado por aquellos grupos fácticos que ven peligrar su suculenta fuente de ganancias; poder y medios tienen para ello. Grupos que no se muestran indiferentes ante los resultados de las elecciones municipales del próximo año, y que van a intentar por todos los medios a su alcance buscar “trapos sucios” de los grupos y de las personas que militan activa y conscientemente para que la Región de Murcia no sea devorada por el insaciable apetito lucrativo que campea a sus anchas por nuestras tierras. Ingenuos ellos, piensan que matando –en este caso desprestigiando– al “mensajero” se acaba con el “mensaje”; y el mensaje suena claro y alto: “MURCIA NO SE VENDE”.

SECCIÓN II. Sobre los hechos que se describen.

1. Es falso que las construcciones citadas se encuentren en un espacio natural protegido, como se afirma en el rotativo.“Volver a la Tierra” es propietaria, en régimen de pro-indiviso, con otra persona (cuyo nombre reservamos por no ser el estilo de esta asociación sin ánimo de lucro publicar nombres de particulares sin su consentimiento expreso –al contrario de lo que hace “La Verdad” en este artículo–), de una finca en el paraje de “Las Setas”, junto a La Rambla de la Rogativa, inscrita en el registro de la propiedad de Caravaca de la Cruz con el nº 14756. La Rambla de la Rogativa está en un L.I.C. (Lugar de Interés Comunitario) y una estrecha franja de la finca –en lo que sería el dominio propio del cauce de la rambla– se encuentra dentro del espacio natural. En dicha finca no existe ningún tipo de construcción. Las construcciones aludidas se encuentran en otra finca, con nº de registro diferente a la señalada, que no pertenece a ningún L.I.C.

2. De los tres “ecologistas” –como “La Verdad” des-califica en el titular… y ustedes sabrán por qué, pues ¿cómo saben si lo son o no si afirman no haber podido hablar con ninguno?–, uno de ellos no es socio de “Volver a la Tierra”.

3. La legalización de las obras es responsabilidad exclusiva de los promotores de las mismas y no de “Volver a la Tierra”, que no comparte necesariamente la decisión que estos tomen al respecto. La función, en estos casos, de la Asamblea de “Volver a la Tierra”, se limita a corroborar la intención de los solicitantes de intentar vivir en el lugar y de si las construcciones se atienen a los criterios bioconstructivos por los que se aboga en sus estatutos.

4. Se remarca en el artículo publicado la infructuosidad de la localización de los implicados. Las fotos que aparecen están tomadas el sábado 5 por la mañana, ¿tan urgente era la elaboración del artículo, que “La Verdad” no tuvo tiempo de preguntarles a alguno de los miembros de “Volver a la Tierra” que allí se encontraban en esos momentos para que pudiera informarles de “la otra versión” que un periodismo profesional que se precie de tal nombre debe contrastar?.

5. “Volver a la Tierra” solicita a “La Verdad” una disculpa pública, en edición dominical y con referencia en primera página a estas aclaraciones, por haber publicado, sin nuestro consentimiento, contenidos de sus estatutos, con errores de bulto, como cuando se afirma que las casas construidas en “El Mojón” están a disposición de sus asociados.

6. “Volver a la Tierra” no comparte la decisión de “La Verdad” de difundir datos de expedientes urbanísticos privados que, legalmente, sólo pueden hacerse públicos cuando éstos han salido en edicto municipal, y no es éste el caso que nos ocupa, al menos según nuestras informaciones; por tanto, también solicitamos una disculpa pública por el daño causado a la imagen de estas personas.

7. Y una pregunta para finalizar: ¿Qué interés informativo despertaría la difusión de estos expedientes incoados a personas particulares que viven en el anonimato público y que usan tierras cedidas por un propietario si este propietario, “Volver a la Tierra”, no formara parte de la Coordinadora “Murcia no se Vende”? No hay que ser muy avispado para comprender los motivos que han movido a “La Verdad” para hacerlo. Por tanto, y para evitar dañar la imagen de “Murcia No Se Vende” ante algunos sectores de la opinión pública, a petición propia de “Volver a la Tierra”, nos hemos dado provisionalmente de baja en la Coordinadora hasta una próxima reunión de la asamblea, donde se le pide que tome una decisión definitiva.

La Coordinadora de “Volver a la Tierra

Viernes, 11 de Agosto de 2.006

NOTA: Rogamos a “La Verdad” la publicación íntegra de estas aclaraciones –de las que nos reservamos el derecho a que sean difundidas por otros canales de comunicación en el caso de no encontrar la acogida esperada en su rotativo–, como titular y el próximo Domingo, como fue publicada la mencionada “noticia”, para que la opinión pública tenga más datos y, de algún modo, se intente reparar el daño causado por su periódico a la intimidad de las personas implicadas y no implicadas, a la asociación “Volver a la Tierra” y a la “Coordinadora la Región de Murcia No Se Vende”. Quedamos a su entera disposición para aclarar cualquier duda o ampliar información.
Reciba un cordial saludo.

nota 2: La Verdad publicó un breve de la respuesta contra las dos páginas que desprestigiaban, sin contrastar, a esta asociación.