viernes, 2 de junio de 2006

El reparto del botín

Los resultados político-económicos de inversiones ventajistas de nuevo cuño no son, a veces, como se esperan tras las promesas del mediocre trepador de turno, dispuesto a vender a su padre por un sillón de primera fila. Ya son dos las empresas cartageneras, "Polaris World" e "Hispania", víctimas de esas promesas murcianas a cambio de cebar al protagonista, o a su entorno, con todo tipo de bienes y parabienes, que se han visto sorprendidas a medio camino de forzar la legalidad, no por incumplida menos vigente, creídas de contar con una cobertura política que su esfuerzo económico les costaba y que, a la hora de demostrarlo, se les niega el atajo prometido apelando a unas exigencias, que siempre se dieron por válidas como obstáculo que no debe serlo "estando nosotros aquí y siendo vosotros los afectados". Pase primero por caja, y luego por la Caja.

Tanto Meroño como Casanova han sido un par de pardillos por no saber con quien se la jugaban. En otro plano, igual que Zambudio, de ITT y Televisión Murciana. "Prometer, prometer hasta meter", que dicen en la Huerta, y luego, si te he visto, no me acuerdo. Si hubiesen preguntado antes a Calero, él sí que es un verdadero catedrático en cierta ciencia sobre tarados políticos. Ya no vale decir, porque no es tiempo, que se llevan de Murcia a Almería o Alicante las inversiones previstas. Se ha jugado con la codicia desde la ambición de poder y, de momento, va ganando la segunda lacra. La cosa es que, quien decía estar para jugársela por todos, ahora los deja tirados con créditos multimillonarios y suelo rústico comprado a buen precio pero sin posibilidad de colocar ni un ladrillo. Sucedió antes con "Polaris World" y ahora con "Hispania". Hay gente que presume de tener palabra y que es conocida de años por una retórica ridícula, grotesca y hueca.

Los que financian campañas políticas lo hacen a cambio de una alta rentabilidad por lo arriesgado siempre de esa inversión. No se puede cambiar de postura en 24 horas después de excitar durante meses a los ventajistas, con viajes de ayuda a Londres "in extremis" y apelaciones al "Agua para todos". Está muy bien conseguir un magnífico piso de 250 m2 en la Gran Vía Salzillo un 70% más barato de su valor de tasación pero alguien tendrá que cargar con la diferencia a cambio de fuertes compensaciones en otro orden de cosas. ¿Ahora qué? Si alguien canta, el murciano más conocido hoy se puede sentar en el banquillo por presunto tráfico de influencias. Que casi seguro las ha habido, en este y otros casos, a través del hermanísimo y colegas interpuestos para tomarle el pelo a pachequeros y unionenses. Eso, va a misa. Y el fiscal-jefe tiene pruebas encima de su mesa. Otra cosa es cuando y cómo las utilizará, si llega a hacerlo.

¿Para qué invertir tanto en medios-botafumeiro (100.000 ejemplares diarios de "Crónica del Sureste", según la OJD) si luego eso no se traduce en billetes del BCE por un trato de favor de quienes administran el grueso de la publicidad local desde la táctica del palo y la zanahoria? Podemos hablar de debilidad y de cobardía, pero también de caraduras. Se puede hablar de mentirosos pero también de falta de dignidad tras beneficiarse indirectamente de situaciones sobrevenidas de poder. "Nunca mais" un tipo así, que se ríe de la sociedad civil y de las sociedades mercantiles a las que promete el oro y luego les manda al "moro de Blanca" para que escupa un embuste tras otro. El prometedor está acabado por jugar a aprendíz de brujo pero falta el empujón para que se vaya por mentiroso y porque nada se hace sin que él lo decida.

Paralizar inversiones no productivas, no lo condena nadie. Pero lanzar complejos mediáticos contra un farsante, es una especie de purgatorio que redime y reinserta. No hay que castigar a los ciudadanos de San Javier, Mazarrón, Alhama o Águilas retirando el futuro prometido sino prescindir de los políticos parásitos, que todo lo encarecen e interceptan los retornos en su propio beneficio. Aquí ha subido el peaje en base a renovar temporada. Si quiere usted el "pelotazo" del que hablamos hace tres años, primero vuelva a financiar mis gastos de campaña y no tenga tentaciones de hacerlo también con mi competencia porque crea que ya está más fuerte que yo.

Eso de la inseguridad jurídica para los inversores, los engaños reiterados a un truhán, los actos de cobardía de un mentiroso compulsivo, la imagen negativa y de desconcierto, y la reserva de acciones legales por supuestos perjuicios, está muy bien pero ahora toca actuar y descubrir al felón antes de sentarse a la mesa a pactar buenas prácticas urbanísticas con la sociedad civil, que viene denunciando de meses el incumplimiento legal de la propia autoridad obligada a ello. No es preciso retirar inversiones pero hagánse las cosas bien y prescindamos de intermediarios comisionistas que todo lo encarecen arriesgando lo mínimo, y luego no cumpliendo lo prometido.

Ni Cope, ni Zerrichera, ni Corvera son planteamientos realistas. Hay quien le ha dicho al fiscal-jefe, que a él nunca le gusto el proyecto de La Zerrichera. Pero lo ha afirmado al saber que después del verano habrá en Murcia 50 fiscales dispuestos a meter en la cárcel a quien eche un pulso al Estado. Por eso ha salido corriendo y dejado en el camino a quienes saciaron su hambre. En el reparto del botín, alguien se ha llevado ya la única parte segura. Todavía se está riendo.

Malestar en Yecla

La crisis en el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Yecla, integrado por concejales del PP, tras el largo mandato del maestro nacional, Maeso, es el reflejo de dos situaciones a un tiempo: la falta de un renovado liderazgo local y el malestar enquistado de los yeclanos con una distante ciudad de Murcia (a sólo 35 kilómetros menos que Valencia y 2o más que Alicante, por mejor carretera ambas al ser gran parte autovía) desde la que se sienten, si no olvidados, no muy bien tratados o, al menos, como se creen merecer por su importancia histórica, social, económica, demográfica, geográfica, y estratégica al estar a caballo de cuatro provincias y tres regiones. Además, su relación diaria con la Comunidad Valenciana es más intensa: los jóvenes prefieren estudiar en las universidades de Valencia o Alicante, y los mayores ir de compras y copas los fines de semana a estas mismas ciudades antes que a una ciudad de Murcia mucho más aburrida.

Excepto para la Feria del Mueble y el Centro Tecnológico de la Madera, los políticos de San Esteban no se acuerdan de que Yecla existe. Con la cercana Jumilla las relaciones son también prácticamente inexistentes pese a concentrar Yecla servicios del partido judicial, como juzgados, hospital comarcal, delegación del INFO y de la Cámara de Comercio e Industria de Murcia. La ciudad, todavía con un importante sector agrícola y otro vitivinícola de primer orden al penetrar su Denominación de Origen en municipios manchegos colindantes, mira más que nunca a la vecina y próspera Comunidad Valenciana, de la que tanto necesita aprender su industria lider y más competitiva. El aeropuerto de Yecla es, naturalmente, El Altet y no San Javier, mientras el proyecto de Corvera le es ajeno y mentalmente lejano por no conectar tampoco con sus intereses estructurales. Por algo será que es uno de los pocos municipios murcianos donde no hay desempleo, y se da trabajo industrial y agrícola a alicantinos, amén de a un gran número de inmigrantes hispanoamericanos con papeles en regla y cierta especialización productiva.

La sensación del yeclano medio, pese a más de 25 años de autonomía política regional, es de cierto desarraigo de su provincia administrativa y de falta de identificación con el rumbo de la Región de Murcia porque piensan aportan mucho más de lo que reciben pese a ser un núcleo industrial de primer orden dentro nuestro territorio. Sólamente el sector del Mueble contribuye al PIBR murciano con un mínimo de 250.000 millones de pesetas anuales y ayuda, tanto a paliar el déficit de una balanza exterior, ahora en caída libre, como a equilibrar la tasa de cobertura de las exportaciones/importaciones. La reciente traición de Valcárcel al primer sector productivo local, con el que no consultó, fomentando personalmente la llegada y establecimiento en la ciudad de Murcia de la multinacional sueca del mueble "Ikea", tras viajar a su sede central en Estocolmo, es algo que Yecla y los yeclanos no olvidarán fácilmente y que le harán pagar al PP en los comicios de 2007 si, al menos, no se produce un relevo generacional en el comité local y la candidatura municipal. El partido que incluya los mínimos que pide Yecla en su programa electoral regional, se llevará el mayor número de votos en esta circunscripción.

En un momento de reforma del Estatuto de Autonomía su esperanza en la comarcalización, desde una descentralización de servicios administrativos, es la única que anida en estas gentes del Altiplano, que también se sienten discriminadas en infraestructuras de transporte al tardar la conversión de la N-344 en autovía por la polémica de su entronque por Jumilla para Murcia o desde aquí a Caravaca para Andalucía. Entretanto los casi 100 kilómetros que le separan de su capital, bien por la muy mejorada y más recta ruta comarcal de Fortuna, bien por la más congestionada y sinuosa ruta nacional de Blanca-Molina de Segura, los 90 minutos de viaje en pleno siglo XXI parecen una tomadura de pelo que se traduce en que las mercancías para exportar prefieren salir por el puerto de Valencia, o en su defecto de Alicante, antes que recorrer los 150 kilómetros que le separan del puerto de Cartagena e invertir el doble en tiempo y coste de los portes. Ahora el anhelo de los yeclanos es una autovía con Villena y mejora del eje de comunicación por carretera con el resto de la Comunidad Valenciana y Madrid a través de Almansa. Por algo han dejado de mirar más al sur. Si pudiesen, elegirían ser alicantinos tal como estuvieron a punto de serlo en 1833. Ser murcianos no les está resultando más rentable. (NEM)

El otro entierro de la sardina

El ya exdirector del INFO, Francisco Sardina, ha tenido que precipitar su anuncio de fichaje como segundo ejecutivo de "Polaris World" (parece que no por menos de 600.000 euros al año, más dietas, para igualarse con el salario de un hijo del alto funcionario municipal jubilado, supuestamente Valenzuela Lillo) para así poder justificar mejor su presencia en Marráquex este sábado 3 de junio en la nueva boda del presidente del emporio, Pedro García Meroño, de 38 años, con su actual joven novia marroquí, a celebrar los lujosos fastos en el mejor hotel de la ciudad. Algunos de sus 2.000 empleados en Europa asistirán también a la ceremonia, expresamente seleccionados por su jefe.

De momento se desconocen los nombres de esa larga lista de 180 invitados, la mayoría murcianos, donde también habrá presencias sorprendentes de italianos y cubanos de Miami. La representación de Torre Pacheco no parece que sea la más numerosa pero sí puede serlo la de socios, formales y opacos, de lo más notable de la burguesía murciana con intereses directos en "Polaris". También se esperan sonadas ausencias, por intuición o mera prudencia, en momentos de tanta incertidumbre y polémica en torno a "Polaris", ante las relaciones de privilegio con los poderes regionales descubiertas por la prensa y radio más independientes. (Parece que otro hijo, arquitecto, de Zorita también ha hecho algún que otro proyecto para García Meroño).

Ahora se ha sabido, al hilo de la marcha de Sardina, la supuesta participación del INFO en uno de los créditos sindicados a "Polaris" y la presunta propiedad de una de sus casas por parte de su director general, un hombre de la disciplina absoluta del ex consejero de Industria, Patricio Valverde. Por eso todavía está pendiente de conocer la Asamblea Regional la lista de empresas a las que este político otorgó subvenciones millonarias desde el citado organismo, a partir de una auditoría de gestión pendiente aún de realizar, y ahora también las que repartió y a quienes, su sustituto Sardina, flamante nuevo ejecutivo de la más emblemática empresa murciana del subsector turístico-inmobiliario. Ahí tiene la Fiscalía del TSJ una buena investigación pendiente por si alguna de las actuaciones fuese constitutiva de algunos presuntos delitos. El precedente sentado hoy por las Salas de Lo Penal y Lo Civil del TSJ de la Comunidad Valenciana, desestimando un recurso de Zaplana, es otra victoria de la libertad de expresión ante las pretensiones de ciertos politicos de tratar de evitar la información debida sobre sus actuaciones más dudosas, susceptibles de ser consideradas por el fiscal-jefe al manejarse dinero público.

El novio ha fletado un vuelo "charter" completo para trasladar de Murcia a Marruecos a sus invitados, aparte del susodicho Sardina, parece que también, entre otros relevantes murcianos, el consejero de Presidencia y amigo personal del novio, Fernando de la Cierva; el concejal y promotor inmobiliario, Antonio Sánchez Carrillo, y el prestigioso abogado Carlos Valcárcel Siso.